La impunidad baja desde el Vaticano.
El Tribunal de Justicia de Morón acaba de hacer lugar al pedido de la defensa del cura pedófilo Julio César Grassi para adjudicarle el beneficio del dos por uno.
La Corte Suprema de Justicia acaba de reafirmar la condena definitiva de 15 años, y tal como advertimos en el análisis de fallo, el encubrimiento y beneficio al cura se lleva adelante a través de la interpretación del tiempo de la condena y de la adjudicación de los beneficios que hoy se pusieron en marcha.
Los casi 3 años que permaneció detenido Grassi hasta el momento de su condena definitiva valdrán el doble a partir de ahora, si se confirma el dictamen del Tribunal de Morón, que fue apelado en el día de hoy por el abogado Juan Pablo Gallego. Si a eso se suman los beneficios tales como el de la libertad condicional a la que se puede acceder al cumplirse dos tercios de la condena cuando los presos tienen partes de "buena conducta" el operativo de liberación prematura de Grassi ya se ha puesto en marcha.
El caso Grassi compromete particularmente al Papa Francisco, quien como presidente del Episcopado argentino llevó adelante la protección directa del cura pedófilo, la cual continúa hasta el día de hoy y que está detrás de los pasos actuales para liberarlo.
Prensa Obrera
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