Se conocieron los nuevos acuerdos entre VW y el Smata. En enero el sindicato recaudó más de $ 5 millones por “contribución empresaria”, mientras aumentan la flexibilización y las suspensiones.
El sindicato automotriz ha sido uno de los más golpeados con el ajuste del gobierno de Macri. Quiénes más lo han sufrido, desde principios de 2016, han sido los trabajadores de las autopartistas (con cierres y despidos). Pero también los de las terminales, con “retiros voluntarios” (despidos) y suspensiones.
El caballito de batalla del gobierno y las multinacionales: había que aumentar la productividad. Que menos trabajadores, y más flexibilizados, produzcan lo mismo (o más). Una historia que los mecánicos conocen.
Luego del convenio flexible para los petroleros de Vaca Muerta, les tocaría a los mecánicos, lo habían adelantado los ministros Triaca y Cabrera.
El futuro llegó. Hace rato. Nos enteramos por el Boletín Oficial de enero que la comisión directiva del Smata y la gerencia de Volkswagen Argentina firmaron una serie de acuerdos homologados por el Ministerio de Trabajo. En uno de ellos se asegura que “las actuales circunstancias en que se desenvuelve la actividad de la Planta Pacheco hacen necesario que se activen modalidades de trabajo que permitan obtener mayor eficiencia, productividad y la optimización de equipos e instalaciones” (Disposición 116). El acuerdo implica, entre otras cuestiones, la aplicación de turnos rotativos en nuevos sectores de la planta. Junto a los retiros y suspensiones, la empresa avanza sobre el convenio colectivo y las condiciones de trabajo.
Sin embargo, en el mismo Boletín Oficial nos encontramos con una sorpresa. Mientras entrega los puntos del convenio que hacen a las condiciones de trabajo de sus afiliados, el Smata “defiende a muerte” aquellos que hacen a la recaudación de la caja sindical.
Allí se conoce la Resolución 741, acordada a fines de 2016 por el Smata y Volkswagen Argentina ante el Ministerio de Trabajo. El acuerdo “establece el importe a abonar en concepto de “contribución empresaria” destinada al desarrollo de los fines gremiales, culturales y sociales de la entidad sindical”.
A pesar de que los obreros de VW fabrican entre 180 autos por turno, el acuerdo obliga a la empresa a pagar solo por los modelos de Volkswagen patentados en el país. Al final de la resolución se publican los montos actualizados. Se trata de $ 264 por cada vehículo “económico” (Gol, Voyage, Fox, Saveiro, etc), $ 352 por los “monovolumen” (Suran), $ 396 por cada “mediano” (Bora, Vento, Golf, Polo), $ 572 por cada vehículo “grande” (Tiguan, Touareg, Passat) y $ 704 los camiones, buses y las famosas Amarok.
Aún cuando se trate de los autos patentados, y no los fabricados, la cúpula del gremio recauda una interesante suma de dinero. Si tenemos en cuenta solo el mes de enero y las estadísticas de patentamientos publicadas en distintos medios (Parabrisas, Acara, Autoblog), la recaudación para las arcas solo por la Planta VW Pacheco y el mes de enero es impresionante. Alrededor de $ 2.386.000 por los tres autos livianos más vendidos (Gol, Voyage, UP), $ 912 mil por el Suran, $ 915 mil por los tres medianos más vendidos (Vento, Golf, Polo). Si tomamos en cuenta los VW patentados en enero (14.270 unidades) y un promedio del “aporte por unidad” ($ 350), nos da una suma superior a los $ 5.000.000. Un fangote de guita, depositado en la cuenta que tiene el sindicato en una sucursal del BBVA Banco Francés en el centro porteño.
Si hacemos el mismo ejercicio con las ventas de 2016 de VW Argentina, cuando a pesar de la caída se patentaron 108.000 unidades de sus distintos modelos, la cifra anual supera los $ 35.000.000.
Pero lo cierto es que en enero el patentamiento de autos aumentó un 60 %. Y se espera que ese crecimiento se mantenga, impulsado por el consumo de determinados sectores sociales y la compra de utilitarios para el campo (como la Amaroc).
Los dirigentes del Smata se deben estar frotando las manos. Mientras se muestran flexibles con las suspensiones, los “retiros voluntarios” y la precarización laboral, “se plantan” en los puntos que permiten recaudar para el aparato sindical.
Corrijamos entonces la primera oración de esta nota. Donde dice “el sindicato automotriz...” mejor digamos “los trabajadores automotrices han sido uno de los más golpeados por el ajuste”. Porque el sindicato, su conducción y sus arcas, parece que pasan un buen momento.
Ulises Valdez
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