martes, 21 de febrero de 2017
Otro ´error´ de Macri, ahora con la venta de su empresa de aviones Macair
Uno de los dueños de Avianca, la compradora, es el buitre Paul Singer
Mauricio Macri acaba de recibir una nueva denuncia penal, esta vez por la entrega de las rutas aéreas a la compañía a Avianca en perjuicio de Aerolíneas Argentinas. La compañía colombiana ya logró una primera autorización oficial para realizar vuelos de cabotaje en recorridos que, en su totalidad, se superponen con los de Aerolíneas Argentinas. Estos servicios serían del tipo low cost (bajo costo), que se basan en una intensa flexibilidad de los trabajadores aeronáuticos.
Sin embargo la cuestión no acaba aquí. Sucede que de acuerdo a la legislación vigente, Avianca no podía prestar servicios de cabotaje, ya que esa posibilidad está reservada a empresas radicadas en el país y con mayoría de capital nacional. Para sortear ese obstáculo legal decidieron comprarle a la familia Macri su empresa de aviones Macair.
Así hicieron negocios ambos: por un lado Avianca que, al igual que LATAM (la fusión de la chilena LAN y la brasileña TAM) sin perder su carácter de grupo de capitales extranjeros adquiere chapa ´nacional´ y podrá prestar vuelos internos y, por el otro, el grupo Macri que recibió por su empresa un valor muy superior a los activos que poseía, ya que le vendió a Avianca la posibilidad de tener una “empresa nacional” y poder, así, realizar vuelos de cabotaje.
El entrelazamiento entre Avianca y el grupo Macri tiene más tela para cortar. Es que para continuar recibiendo los favores oficiales el grupo colombiano nombró como presidente de su filial local a Carlos Colunga, un ex (¿?) gerente del grupo Macri, que sucedió al propio Mauricio Macri en la dirección de la empresa Macair. La designación de Colunga frente a la filial argentina de Avianca abre sobradas sospechas que la familia Macri sigue siendo parte activa de la empresa.
Pero como si el tema no fuera lo suficientemente turbio, ha surgido ahora una nueva revelación: el titular del fondo buitre Paul Singer, que recibió u$s 2.400millones del gobierno por la deuda en default, es uno de los principales accionistas de la empresa Avianca. Tenemos así la siguiente situación: el presidente de la Nación ha realizado negocios con un acreedor buitre del país, le pone a uno de los cuadros gerenciales de su grupo económico a la nueva empresa y ahora la autoriza a volar en los recorridos de Aerolíneas Argentinas.
Si se suma el negociado de Avianca-Macair-Paul Singer a los del Correo Argentino o a los que alcanzan a Arribas-Odebretch surge un patrón común: el saqueo del Estado y del país por parte de los grupos empresarios entre los que se destaca el del propio Presidente de la Nación.
Gabriel Solano
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario