Por decreto, los efectivos del Ejército pasarían a reemplazar a 1200 gendarmes en el cuidado de las represas para que éstos sean destinados como fuerzas represivas al Conurbano bonaerense.
El Gobierno autorizaría a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia que militares reemplacen a gendarmes en la protección de los llamados objetivos estratégicos como, por ejemplo, las centrales nucleares o las represas hidroeléctricas.
Se lo pidió la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, a su par en Defensa, Julio Martínez. Pretenden dejar libres a unos 1.200 miembros de la Gendarmería, que hoy están destinados a las represas y centrales atómicas, para que actúen como fuerzas represivas en el Gran Buenos Aires.
Si bien desde el Gobierno nacional explicaron que “de ninguna forma esto supone poner a las fuerzas armadas en temas de seguridad interna o policiales y menos en la lucha contra el narcotráfico”, es un hecho gravísimo que puede ser la puerta de entrada a más medidas represivas con el Ejército y los militares tomando tareas dentro de la frontera nacional.
Esa parece ser la voluntad de la ministra de seguridad que a diario exige más represión y policías en las calles. En ese marco, mañana presentará una denuncia ante la Justicia por posibles saqueos organizados desde Facebook.
Ana Sanchez
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