En Plaza de Mayo se concentraron decenas de miles de personas. Cantaron contra la lucha docente y los piquetes. Cecilia Pando y Alfredo Casero estuvieron en la marcha.
Como un revival de los cacerolazos de 2012 o la marcha por Nisman en 2015, varias decenas de miles de personas de las clases medias altas salieron este sábado a manifestar en defensa del Gobierno nacional.
Bajo el discurso de la defensa de la “democracia” y la “república”, los manifestantes cantaron contra los piquetes pero también contra el reclamo docente. Lo hicieron apoyando a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.
La concentración más importante tuvo lugar en el Obelisco, desde donde la movilización partió hacia Plaza de Mayo. Alrededor de las 19.30 una parte de la misma y sus alrededores se encontraba ocupada por los manifestantes.
Fue clara la composición de clase media alta entre los manifestantes. Se trata del sector que más claramente se identifica en el terreno político con el actual oficialismo. Una suerte de minoría intensa que lo votó en las PASO del 2015 y hoy es parte de su base social y electoral más firme.
El carácter reaccionario de la convocatoria quedó evidenciado, por ejemplo, en la participación de Cecilia Pando, conocida defensora de genocidas. Otras figuras, afines al oficialismo como Fernando Iglesias o el actor Alfredo Caseros, estuvieron allí.
La movilización logró una afluencia importante impulsada por la polarización que el Gobierno viene instalando desde hace semanas, hablando de un “complot kirchnerista” contra la gestión oficial. Eso pudo evidenciarse en el hecho de que las canciones más escuchadas fueron contra el kirchnerismo. Entre ellas "no vuelven nunca más" fue la más cantada.
El Gobierno no había convocado públicamente a la movilización pero si instigó la participación por medio de las redes y a través de las segundas líneas de funcionarios. La importante convocatoria vino a ser una suerte de alivio, luego de un mes en el que amplios sectores de trabajadores coparon las calles en todo el país, manifestando contra la política oficial y el ajuste en curso.
Sin embargo, la jornada también dejó al desnudo que el universo del apoyo al macrismo en el poder sigue reducido a estos sectores. Fue, claramente, una movilización de la base más firme del macrismo.
Redacción LID
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