El domingo fueron detenidos dirigentes del SEOM por protagonizar forcejeos con la policía en el marco de una protesta. Dirigentes municipales lanzan paro y movilización.
El domingo (15) fueron detenidos los dirigentes del SEOM-Jujuy, Santiago Seillant y Adrián Mirkin de la Comisión Directiva y Álvaro Sandoval (Coordinador de Prensa) por miembros de la policía provincial del gobierno de Gerardo Morales. Esta medida represiva fue tomada como respuesta a la protesta del gremio municipal, ante el intendente Raúl “Chuli” Jorge (UCR), en reclamo de la recategorización y pase a planta permanente, entre otros planteos, según informaron desde el sindicato.
El miércoles pasado en momentos en que iba a concretarse una audiencia con autoridades municipales en el Edificio Central de Av. Éxodo se produjeron forcejeos con la policía que intentó impedir el ingreso a la delegación del gremio, dando lugar a heridos de ambas partes. A raíz de estos hechos el fiscal N°6 Gustavo Araya ordenó allanamientos y la posterior detención de los dirigentes sindicales.
El dirigente del SEOM, Carlos “Perro” Santillán, denunció el accionar de la policía provincial por tratarse de “operativos similares a la dictadura militar y con la metodología que tiene Macri de la dictadura”, según se difundió en un comunicado de prensa. Durante la jornada de ayer, encabezó una conferencia de prensa donde anunció un paro de 48 horas desde el lunes, y una movilización provincial del gremio para el martes.
Se trata, nuevamente, de un hecho de criminalización de la protesta y persecución a las organizaciones de los trabajadores en las tierras del gobernador radical de Cambiemos, Gerardo Morales, junto al massismo. No casualmente, el fiscal Araya que ordenó los allanamientos y detenciones de los dirigentes del SEOM, con un enorme despliegue policial que ya es moneda corriente en la Provincia, es el mismo fiscal que armó causas contra la dirigente Milagro Sala detenida de manera irregular desde hace cuatro meses.
Recientemente, organismos de derechos humanos, sociales y políticos han denunciado que en Jujuy se ha “suspendido el Estado de Derecho”, en referencia a la detención irregular de Milagro Sala, la persecución, judicialización y hasta despidos que sufren las organizaciones y militantes sociales, sindicales y políticos. Recordemos que el gobernador Gerardo Morales, desde su asunción llevó adelante reformas tendientes a “empoderar” una Justicia adicta, como la ampliación con mayoría propia del Superior Tribunal de Justicia, la habilitación de nuevos poderes a los fiscales para el armado de causas; así como la entrada en vigencia del nuevo Código Contravencional, aprobado bajo el anterior Gobierno del FPV-PJ, que le brinda superpoderes a la policía.
Este nuevo ataque contra los trabajadores y sus organizaciones confirma la avanzada derechista del gobierno de Macri y del de Gerardo Morales que comenzó en Jujuy con la detención ilegal de Milagro Sala por haber realizado un acampe. Confirma así mismo, la justeza del reclamo y movilización que recorrió el país, del cual el PTS-Frente de Izquierda fue parte activa desde el primer momento, junto a organismos de DD.HH, sociales y políticos, exigiendo su libertad y denunciando que se trataba de un laboratorio de represión para debilitar la resistencia al ajuste que aplican desde Tierra del Fuego a La Quiaca.
Quienes aplaudieron la detención de la dirigente social, así como quienes mantuvieron posiciones correctas en los papeles pero sin impulsar medidas en consecuencia, amparados en las diferencias políticas y metodológicas con esta organización social, perdieron de vista que el de Gerardo Morales y Macri es un gobierno profundamente antiobrero, que con la detención de Sala buscaba sentar un precedente nefasto contra los trabajadores y sus métodos de organización y protesta, empoderando el aparato represivo del Estado.
LID
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