El estudiante Jorge Varela, de la Escuela Municipal de Bellas Artes (EMBA) “Carlos Morel”, fue gravemente herido por un proyectil antitumulto disparado por efectivos de la seccional Quilmes primera en la puerta de las oficinas del intendente quilmeño Sergio Villordo. Los incidentes comenzaron cuando la infantería intentó detener a un estudiante durante un escrache con pintadas y huevos hacia la oficina, ubicada en la esquina céntrica de San Martín y Videla. Ante la resistencia de lo jóvenes, un policía disparó a corta distancia su escopeta, impactando en la pierna de Varela. El hecho entorpece la campaña electoral en la que el intendente Villordo, ahijado político del ministro del Interior Aníbal Fernández, intenta renovar su mandato. La legitimidad del reclamo y la torpeza del ex chofer del bigotudo ministro unirán una vez más al deshilachado arco opositor en una gran marcha por las calles de la ciudad, convocada para hoy a las 17hs.
“Ante un nuevo hecho de esta gravedad, renuncio” había anunciado el secretario municipal de Derechos Humanos, Hugo Colaone, hace ya más de un año, ante alumnos de la EMBA. En aquella ocasión una patota integrada por funcionarios de segunda línea y concejales distritales había agredido a golpes a los alumnos de la escuela de artes. El hecho permanece impune hasta el día de hoy y la causa que debía investigarlo duerme en el cajón de los adictos tribunales de Quilmes. Luego de ese episodio, la gendarmerìa reprimió una movilización en la ribera, la policía municipal a trabajadores de ATE y, ahora, a estudiantes. Es de esperar que el secretario pueda cumplir ahora con su palabra.
El conflicto entre el municipio y la escuela de artes es de vieja data. Desde que se reinstauró la democracia y bajo intendencias de la UCR y el PJ, la EMBA fue trasladada y paulatinamente vaciada como institución pública. Desde hace un par de años, los alumnos encararon la lucha por mejorar sus condiciones de estudio. El año pasado la tensión parecía haber encontrado su techo, cuando se comprobó que quienes protagonizaron el ataque a golpes trabajaban -y lo siguen haciendo- bajo órdenes directas del intendente. El repudio generalizado a la golpiza, que se difundió en medios nacionales, abrió las negociaciones entre la comunidad educativa de la EMBA y el municipio. Sin embargo, y a más de un año, pocas cosas se han modificado. El estatuto, modificado irregularmente por la gestión Villordo, sigue vigente, la mayoría de las mejoras edilicias exigidas no han sido realizadas y, en aquellas que sí se operativizaron desde la escuela, el municipio adeuda los sueldos de los trabajadores, en falta con un compromiso adquirido.
En ese contexto, los estudiantes decidieron el pasado miércoles dirigirse al local de San Martín y Videla. Llamado como tantos otros en la ciudad como “El Villordo”, es una oficina que mezcla el pago de impuestos y tramites municipales con una fastuosa propaganda proselitista del intendente. Allí, el ex chofer de Fernández tiene sus oficinas personales. Los estudiantes se encontraron con la hostilidad del personal policial a las órdenes del Capitán Javier Fredes, que intentó detener violentamente a uno de ellos. Ante la respuesta negativa de los alumnos, un efectivo disparó su escopeta a menos de un metro de distancia, hiriendo al estudiante de diseño gráfico Jorge Varela.
Hoy viernes, a las 17, una gran movilización partirá desde La Morel para repudiar la represión, y seguir reclamando el cese de los constantes abusos de parte del Intendente. Solo la gran incapacidad de un intendente matón, cuyo poder es prestado y está en decadencia, logrará una vez más unir a todo el arco opositor de Quilmes, entre los que se encuentran fuerzas disidentes del propio Frente Para la Victoria, como Francisco “Barba” Gutierrez, quien luego de una ardua y enmarañada pelea fue aceptado a último momento como candidato a intendente por el Presidente Kirchner, en una boleta que, como ocurre con la que postula a Villordo, encabeza Cristina Fernández. Personajes residuales de los alicaídos PI y ARI, ex concejales de Rodríguez Saá, y pastores de derecha gozarán una vez más de una oportunidad de movilizar una multitud por las calles de Quilmes. Se sumarán también fuerzas políticas y sociales de izquierda, algunas con participación en las elecciones y otras que no participan de la instancia.
El motor de la movilización no será otro que el reclamo de los estudiantes, quienes cuentan con buena parte del consenso masivo y logran unir varios reclamos de la sociedad en sus actividades. Las mejoras generales en las condiciones de funcionamiento y enseñanza de la EMBA, los problemas reales de Quilmes, siguen sin ser escuchados por el oficialismo y ese es el problema más contundente.
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