El presidente y la gobernadora estuvieron de “minivacaciones” por Bariloche y Villa La Angostura, muy cerca de la región donde Gendarmería secuestró al joven el 1° de agosto. Del caso, ni hablaron.
El Presidente Mauricio Macri y la Gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal cenaron juntos la noche del domingo en Villa La Angostura, la localidad neuquina elegida para tomarse unas minivacaciones de fin de semana largo. Además de los hijos de ambos y de Juliana Awada, compartieron lujos y placeres con Nicolás Caputo, el amigo y socio del mandatario.
Macri estuvo desde el viernes a la noche en la casa que Caputo tiene en el exclusivo country Cumelén de la villa turística. Vidal también se alojó en la zona pero antes, el jueves a la tarde, pasó varias horas en Bariloche, provincia de Río Negro.
Según se encargaron de difundir desde el entorno de la Gobernadora, Vidal caminó por la Avenida Arrayanes de La Angostura y se sacó muchas fotos con comerciantes y turistas, inundando de sonrisas varias cuentas de redes sociales.
Tal vez por estar demasiado ocupados eligiendo qué té tomar mirando el paisaje, a lo largo del todo el fin de semana no hubo comunicados de prensa ni tuits institucionales del Gobierno nacional ni del Gobierno provincial donde ambos mandatarios hicieran referencia al caso del joven desaparecido a manos de la Gendarmería el último 1° de agosto tras una represión de esa fuerza a la comunidad mapuche del Pu Lof de Cushamen, Chubut.
Si bien en sí mismo eso no sorprende, ya que en estos veinte días no se mostraron precisamente preocupados por el tema, resulta más provocativo aún que hayan pasado por la ciudad donde vive parte de la familia de Maldonado e incluso fotografiarse festivamente a menos de cien kilómetros de allí sin siquiera buscar un mínimo contacto con ellos. Ambos aterrizaron antes del fin de semana en el aeropuerto de Bariloche, donde viven y trabajan el hermano y la cuñada de Santiago Maldonado.
Otra parte de la familia de Santiago (su madre Stella, su padre Enrique y su otro hermano Germán) vive en 25 de Mayo, localidad del interior profundo de la Provincia de Buenos Aires, gobernada desde hace casi dos años por Vidal. De allí es oriundo Santiago e incluso en una escuela de allí debía votar el pasado 13 de agosto.
Un dato resulta revelador. La “custodia presidencial” en Villa La Angostura está a cargo de un grupo combinado de dos de los brazos armados nacionales: Policía Federal y Gendarmería. Precisamente ambas fuerzas desde hace semanas están en el centro de la escena por el caso Maldonado, una “investigando” a la otra por la desaparición de Santiago, cumpliendo las (pocas, malas y tardías) órdenes del juez federal de Esquel Guido Otranto.
Tomándonos de imbéciles
Quienes tampoco querían hablar en estas horas de Santiago Maldonado son los ministros de Seguridad Patricia Bullrich y de Justicia y Derechos Humanos Germán Garavano. Pero sus planes, precozmente, fracasaron.
Por infantilismo político o cinismo (o por las dos cosas) ambos funcionarios anunciaron por Facebook que este martes a la mañana contestarán “en vivo todas tus inquietudes sobre la lucha contra el narcotráfico y la nueva Ley de Flagrancia”. Entusiasmados por ese ida y vuelta con eventuales votantes de Cambiemos, agregaron una invitación: “dejá tus preguntas de estos y otros temas que a vos te interesan en los comentarios del posteo”.
Desde que lanzaron la propuesta Bullrich y Garavano no hacen más que tragar saliva. Como una catarata de indignación popular, una casi única pregunta copó el muro de Facebook, multiplicada por cientos de posteos. ¿Dónde está Santiago Maldonado?
Ayer, al cumplirse veinte días de la desaparición forzada del joven bonarense, solidario con la causa mapuche en la Patagonia y secuestrado a manos de la Gendarmería Nacional, su hermano Sergio habló desde Bariloche. Entre otras cosas dijo que el Gobierno “es el único que no ve la realidad” y que hasta que desde el Estado no se “asuma que es una desaparición forzada no vamos a avanzar”.
“En vez de hacerse cargo y decir lo que pasó, responsabilizar a quien está involucrado, siguen tapando y dando vueltas con cosas que no tienen sentido”, manifestó a Radio Rivadavia de Buenos Aires. “Uno siente que le están tomando el pelo”, sentenció.
Sergio y otros seres queridos de Santiago acaban de lanzar una página web con el objetivo de contar la verdadera historia de la desaparición del joven artesano a la vez que denunciar a los responsables y sus encubridores. Y además procuran que ese sitio sea un receptor directo de cualquier información o dato que ayude a determinar qué pasó con Maldonado. La página es www.santiagomaldonado.com.
Como se escribió en otro artículo de este diario, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich aún no renunció a su cargo. Y no parece estar dispuesta a hacerlo por el momento. Pero sus actos, sus dichos y, sobre todo, las evidencias del caso ameritan a esta altura no sólo que renuncie sino que sea sometida a una investigación judicial por encubrir de forma deliberada el aberrante delito de la desaparición forzada de Santiago Maldonado.
Daniel Satur
@saturnetroc
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