Este miércoles al mediodía, alrededor de cien organizaciones de todo el país marcharon desde Congreso a Plaza de Mayo, en contra del saqueo y la contaminación de los Bienes Comunes. La manifestación partió cerca de las 12 desde Rivadavia y Callao, y arribó al epicentro del poder político más de dos horas después, para iniciar un acto en el escenario montado frente a la Casa de Gobierno.
Por ANRed - Sur
La problemática ambiental está sumando, además de a grupos vecinales y ambientales, a otros con banderas tan disímiles como las del Partido Obrero o el Frente Popular Darío Santillán. Ayer al mediodía, alrededor de cien organizaciones de todo el país marcharon desde Congreso a Plaza de Mayo, en contra del saqueo y la contaminación de los bienes comunes.
Si bien muchas de las consignas se centraron en problemáticas puntuales de distintas localidades del país, el foco de los reclamos estuvo puesto en la denuncia del modelo económico basado en el uso sin miramientos de los mal llamados "recursos naturales" y en sus efectos ambientales devastadores.
Así lo comentó Leandro, del Frente Popular Darío Santillán: "El principal problema es la soja. Argentina produce soja para exportación y eso tiene múltiples consecuencias. No sólo la contaminación de las tierras por el uso de agroquímicos, sino también la expulsión de los campesinos a los centros urbanos por la falta de trabajo y el incremento de los precios en el mercado interno".
Con esa problemática llegaron a Buenos Aires movimientos de campesinos de distintas provincias del país. Manuel, del MOCASE Vía Campesina, explicó que en Santiago del Estero, por ejemplo, las napas de agua están muy cerca de la superficie del suelo y "se contaminan enseguida por el uso de agroquímicos en las plantaciones de soja. Esos agroquímicos están prohibidos, pero las leyes no se cumplen y se usan igual. No sólo se contamina el agua sino que además dejan las tierras en tan mal estado que después no se pueden usar más".
Otro de los conflictos, que trajo hasta la Capital a agrupaciones y asambleas de Chubut, La Rioja, Río Negro y San Juan, entre otras, es el de la instalación de mineras a cielo abierto. "En este momento debe haber unos 20 proyectos en funcionamiento y otros 200 que se van a firmar en los próximos cinco años. El problema de la minería es que se vuelan montañas con dinamita y que para separar las rocas de los minerales se emplea un método basado en el cianuro, con lo cual altas cantidades de este contaminante van a parar a las napas de agua y a las cuencas", resaltó Leandro.
Del norte al sur del Gran Buenos Aires
El espacio Intercuencas fue uno de los organizadores de la marcha, junto a, entre otros, el FPDS y la Asamblea Permanente por los Espacios Verdes Urbanos (APEVU). La coordinadora reúne a más de 70 espacios como foros hídricos y comisiones en defensa del agua, y surgió hace más de un año, con la idea de trabajar en forma conjunta las problemáticas de las cuencas del Riachuelo, el Río Reconquista y el Río de la Plata.
"Por ejemplo en Las Tunas las preocupaciones principales son la contaminación de las aguas, la falta de redes y de cloacas", afirmó Víctor, uno de los integrantes del espacio. "Los que viven en el Delta tienen problemas por la basura. En San Miguel está la planta para procesar los afluentes domiciliarios, pero sólo puede procesar 100 camiones diarios y se juntan más 300, los otros 200 son tirados al río. En el sur también está el problema del CEAMSE. No es un problema de una localidad, sino de todo el país, porque estamos yendo hacia un modelo de progreso que tiene beneficios económicos pero no es un modelo adecuado en cuanto a la calidad de vida", concluyó.
Gualeguaychú
La protesta de los vecinos de Gualeguaychú puso en los primeros planos el conflicto por la instalación de la fábrica de pasta de celulosa en Fray Bentos, pero al mismo tiempo generó un efecto ambiguo para el resto de los conflictos relacionados con el medio ambiente. Por un lado se instaló el tema en la agenda pública y de los medios, pero por otro la problemática quedó reducida a ese caso particular. Sin ir más lejos, el título de la crónica que daba cuenta de la marcha en el Último momento de Clarín.com fue "Los asambleístas de Gualeguaychú protestaron en Plaza de Mayo junto a ecologistas".
Para Leandro, del FPDS, "el problema central pasa por si Gualeguaychú se alía o no con los otros sectores del país. Si eso no sucede hay posibilidades de que salgan fortalecidas las disputas nacionalistas, el chauvinismo, como si la lucha fuera contra Uruguay. Si Gualeguaychú puede tomar también las consignas del resto de los conflictos puede impedir que se alimente esa falsa división entre países que hay, porque el problema no es con Uruguay sino con un modelo económico que está tanto en Uruguay como en Argentina, Brasil o Paraguay".
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