miércoles, 31 de enero de 2018

Correogate, la denuncia que Macri no pudo apagar

La investigación de Nuestras Voces que destapó el escandaloso intento de autoperdón de 70 mil millones de pesos de Mauricio Macri a la empresa familiar Correo Argentino es uno de los pocos frentes judiciales que el presidente no ha podido controlar, pese a complicidad de jueces y fiscales.
El 8 de febrero de 2017 Mauricio Macri cumplió 58 años. Era su segundo cumpleaños como presidente, pero seguramente no hubo humor para festejos. Ese día, Nuestras Voces reveló el intentó condonarle a su familia más de 70.000 millones de pesos producto de la histórica deuda de Correo Argentino, una de las empresas de la familia Macri, con el Estado.
El escándalo del Correo fue tal que ni siquiera los medios oficialistas pudieron evitar mencionarlo. Y hasta el día de hoy, aunque parece estancado, es casi el único frente judicial que Macri no logró cerrar gracias a la complicidad de jueces y fiscales que dictaron sobreseimientos express para las causas que molestaron al Gobierno. Con todo, Macri y su familia aún no pagaron un peso de su deuda.
Corrupción, vaciamiento, conflictos de interés, y la eterna herencia de los empresarios cuyo único talento fue aprovecharse de un Estado que, ahora, controlan.

La pesada herencia

Los Macri han significado un costo muy alto para el país. Multiplicaron sus empresas y estatizaron sus deudas privadas en tiempos dictatoriales para pasar, ya en democracia, a encabezar la patria contratista de los 90. Uno de sus últimos trofeos fue la concesión del servicio postal que les otorgó Carlos Menem en 1997. A cambio, los Macri se comprometieron a pagar un canon semestral de 51.600.000 pesos durante los 30 años que durara la concesión. Pero al poco tiempo dejaron de pagar el canon y empezó el conflicto que dura hasta la actualidad. El 19 de septiembre de 2001, Correo Argentino presentó un concurso preventivo de acreedores ante la Justicia. Ya debían 296 millones de pesos. Hasta hoy, no pagaron un centavo.
Durante 15 años, algo totalmente anómalo, el concurso de Correo Argentino quedó inmerso en la bruma judicial. Que los Macri no pagaban sus deudas con el Estado era vox populi, pero la cuestión quedó fuera de la agenda pública durante años. En 2016, sin embargo, todo cambió. Macri, una vez presidente, mutó una vez más la relación de su familia con el Estado. Ahora ya no era algo externo con el que hacer negocios, sino el Estado directamente bajo su control. Así, de los dos lados del mostrador, buscó cerrar el asunto de la deuda del Correo con la solución más beneficiosa para sí mismo: condonándola.
Pero algo falló. El personaje clave de esta historia es la fiscala Gabriela Boquin, que advirtió la maniobra y logró abortarla. Aquel 8 de febrero de 2017, con un dictamen que ampliaba otro ya firmado el 30 de diciembre de 2016, desnudó la maniobra. Tal como reveló Nuestas Voces, la fiscala Boquin pidió que se rechace la homologación de un acuerdo entre la familia Macri y el Gobierno de Macri que, en sus palabras, legitimaba una propuesta que era “ abusiva, implica perjuicio fiscal y su irregular aceptación perjudica gravemente el patrimonio del Estado Nacional ”.
No fue gratis para Boquin, que vivió desde la agresión pública del Gabinete Nacional hasta, como reveló el periodista Ariel Zak, sospechosas fallas en la custodia en la puerta de su casa.
En su dictamen, Boquin detallaba la operación. El día clave fue el 28 de junio de 2016, cuando se realizó una audiencia entre Correo Argentino y el Estado ante la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial. Fue todo un paso de comedia, cuyo inicio ya era sospechoso. Fue el Estado Nacional quien solicitó la audiencia el 19 de mayo de 2016 y “ adelantó -según consta en el expediente- que podría prestar conformidad en caso de mejorarse la propuesta ”.
El funcionario que encabezó la negociación, Juan Manuel Mocoroa, tenía órdenes expresas del entonces ministro de Comunicación Oscar Aguad de aceptar una propuesta exactamente igual a la que ofreció la familia Macri. Propuesta que, en lo concreto, implicaba una quita de 70.163 millones de pesos.

Recular en chancletas

Macri estuvo callado varios días. Salieron a defenderlo varios de sus funcionarios. El primero fue Mocoroa, que afirmó: “ No le perdonamos ni un mango a Franco Macri, nada, ni siquiera los intereses”. Desde el Gobierno intentaron minimizar el tema y le aseguraron a los medios oficialistas que “la fiscal hizo una interpretación arbitraria y caprichosa”, pero no pudieron frenar el escándalo.
En Comodoro Py se radicaron 4 denuncias contra Macri, Aguad y otros funcionarios, que fueron unificadas por el juez Ariel Lijo y el fiscal Juan Pedro Zoni.
A las 48 horas la fiscala Boquin encontró nuevos elementos que empeoraron la situación. Tal como informó Nuestras Voces, Boquin presentó un nuevo dictamen donde denunciaba la mala fe procesal de la familia Macri. Mientras el gobierno de Macri le perdonaba a su familia más de 70.000 millones de pesos la misma familia Macri demandaba al Estado por 2.365 millones de pesos. La causa sigue abierta.
Las máximas autoridades de Gobierno salieron en defensa de Macri, pero pronto empezaron a notarse las contradicciones. Aguad, que en un principio dijo que Macri no sabía nada del asunto, luego reconoció que le había comentado el tema a Marcos Peña, el Jefe de Gabinete. Peña reconoció entonces que Aguad “ nos ha mencionado al pasar que había que resolver este tema; con tranquilidad, nunca entramos en detalle ni en discusión porque le dijimos que se haga lo que corresponde, lo que tenga que ver con la ley” .

¿Foja cero?

Macri apreció 8 días después de que Nuestras Voces destapara este escándalo. Dio una conferencia de prensa y habló por primera vez del tema Correo Argentino. “Instruí a Aguad para volver a foja cero. No hay ningún hecho consolidado, no sucedió nada, no se pagó ni se cobró “, sostuvo. Esto mostraba la promiscuidad de esta operación. Macri le daba a Aguad instrucciones públicas sobre el tema, es decir, se metía en el tema que involucraba directamente a su familia. Aseguraba que una causa de miles de fojas volvía a foja cero, algo no sólo imposible sino que, en todo caso, era una decisión de las juezas y no del presidente. Por último, cuando sostuvo que “no sucedió nada”, olvidó mencionar que el Estado había aceptado condonarle más de 70.000 millones de pesos a su familia. “ Volvamos a la Justicia. Empecemos de cero. Queremos un acuerdo integral “, insistió Macri, en clara alusión a la estrategia de su familia de pagar su deuda con lo que le cobrara al Estado en otros juicios, algo que la Corte Suprema ya le había negado en 2009.
“ Así como no participé en nada de lo que llevó a cabo el ministro Aguad, quiero estar alejado de cualquier mala interpretación “, insistió Macri. De nuevo las contradicciones: o su ministro no le informó sobre un tema clave de la gestión o Macri sabía y mintió.

Que no se note

Desde el estallido del escándalo del Correo el Gobierno tuvo un objetivo central: que no empañara la campaña electoral. Tuvo éxito, ya que logró erradicar el tema de los medios oficialistas y evitar su propagación en la agenda de campaña.
Los medios no fueron los únicos cómplices. Cuando la fiscala Boquin pidió que se filmara la nueva audiencia entre los Macri y el Estado, las juezas María Lila Gómez Alonso de Díaz Cordero y Matilde Ballerini se lo negaron.
No hubieran filmado mucho igual, ya que el Gobierno logró suspenderla. Antes de que comenzara la reunión, Juan Bernabé Araoz, apoderado del ministerio de Comunicación, presentó una nota donde pidió “la suspensión de la audiencia” y “la suspensión de todos los plazos que estuvieran corriendo en la presente causa por el término de ciento veinte días”. La excusa fueron los dos decretos para regular los conflictos de interés anunciados por Macri en la apertura de sesiones legislativas y que el Gobierno estaba preparando. Los 120 días pasaron y nunca más hubo ninguna audiencia para avanzar con el pago de las deudas de la familia presidencia.
Este medio también reveló que el Estado Nacional no fue el único que rechazó durante años las estrategias de la familia Macri para el pago de la deuda de Correo Argentino. El Banco Nación también se negó a aceptar propuestas de pago de una deuda que calificó técnicamente de irrecuperable.

Chau Balbin

El 13 de febrero, a los pocos días de revelado el escándalo, el fiscal Sergio Rodriguez, titular Procuraduría de Investigaciones, le pidió al Procurador del Tesoro Carlos Balbín que investigara lo sucedido en este expediente. Balbín ordenó un sumario administrativo y una auditoría sobre todo lo actuado en la causa Correo Argentino. Semanas después sería uno de los motivos principales de su salida del Gobierno.
La auditoría, hecha por el funcionario de carrera Guillermo García, arrojó un resultado a todas luces crítico para Macri. “ No parece justo imputar las demoras que registra la causa exclusivamente al órgano judicial. También el Correo Argentino SA generó peticiones de todo tipo, varios de las cuales fueron sorprendentemente receptadas por los Tribunal y silenciosamente aceptadas por el Estado. En verdad, el Estado, activa o pasivamente, ha terminado, también, consintiendo con la marcada extensión del proceso ”. La auditoría mostró a todos los responsables de este escándalo: los Macri-las juezas-algunos abogados (no todos) del Estado.
Con las auditoría en sus manos, Balbín firmó un memorándum que molestó a Macri, no sólo porque cuestionó la actitud de su familia para no pagar sus deuda, sino, y fundamentalmente, porque opinó sobre una cuestión central: el pago de los intereses.
Los intereses son clave para entender porqué este memorándum de Balbín molestó a Macri y su familia. Si bien la ley plantea (y el Gobierno usó esto como argumento) que los intereses se suspenden desde la presentación del concurso (o sea, desde 2001), para Balbín “ la doctrina advierte que tal suspensión no es absoluta ” y esta doctrina “ podría ser invocada ” en este caso. Esto pone en jaque a la familia Macri: hay miles de millones de pesos en juego.
Esta opinión, junto a las incipientes investigaciones del caso Odebrecht, fueron el detonante de la salida de Balbin del Gobierno.

Vaciamiento

A tiempo, la fiscala Boquin emitió un nuevo dictamen que denunciaba las maniobras de vaciamiento de Correo Argentino en beneficio de otras empresas del clan Macri. En un minucioso dictamen, Boquin reconstruyó cómo habían logrado, con la complicidad judicial de la jueza Marta Cirulli, sacar de las cuentas congeladas de Correo Argentino un total de 1.645.923 pesos y 185.213 dólares durante 2016. “ La mayoría de los fondos detraídos habrían tenido como beneficiario final las arcas de las controlantes de la concursada (SOCMA-SIDECO) ”, afirmó Boquin.
El dictamen de Boquin detalla todas la maniobras de vaciamiento de Correo Argentino, que en lugar de mantener sus fondos para el eventual pago de sus deudas una vez que concluyera su concurso de acreedores, se dedicó a transferir dinero a otras empresas de la familia Macri. Lo que se desprende del minucioso escrito de Boquin es que Correo Argentino hizo negocios con otras empresas del Grupo Macri que eran sus controlantes, negocios en los cuales no obtuvo ningun beneficio más que vaciarse y desviar dinero hacia otros negocios de la familia presidencial.
Los Macri lanzaron un repliegue táctico dentro de su estrategia de vaciamiento de Correo Argentino, pero lograron que tanto la jueza Cirulli como las sindicaturas que actúan en el concurso demoraran los peritajes sobre las cuentas de la familia Macri.
Lo mismo hizo el juez Lijo, que cajoneó más de tres meses los pedidos del fiscal Zoni para investigar los balances de las empresas Macri. En el medio, el Gobierno desplegó una fuerte operación de prensa combinada con una amenaza de juicio político contra Lijo, mientras la familia Macri acomodaba los papeles de sus compañías. La impunidad mediática de Macri es tan grande que blanquearon la situación en el diario oficialista La Nación. En diciembre, en un nuevo paso de comedia, Lijo les pidió que presenten los papeles ya acomodados a piacere.
La Auditoría General de la Nación (AGN), que tiene que expedirse sobre el caso, también se tomó su tiempo. Aún con los plazos vencidos, pasó la publicación de sus conclusiones par

Nepotismo por Correo

Alrededor del escándalo del Correo hay, al menos, dos casos en los que Macri utilizó una vez más su rol de presidente en su propio beneficio, aunque sea de forma indirecta.
Por un lado, propuso para conjuez de la Corte Suprema a Julio Cesar Rivera. Se trata de un ex apoderado de empresas de los Macri, e incluso el abogado que tramitó el divorcio del actual presidente con Isabel Menditeguy. Rivera está a cargo de la sindicatura general del concurso de acreedores de Correo Argentino, es decir, de controlar el normal devenir del caso. Algo que, a todas luces, no hizo y por lo que fue imputado penalmente junto a Macri en la causa penal que instruye el juez Lijo.
El segundo caso es el pedido enviado al Senado para nombrar jueza a Agustina Diaz Cordero, hija de la jueza que controla la causa de Correo Argentino hace más de 15 años. Tal como reveló Nuestras Voces, se trata del intento de designar a esta joven abogada, asesora del ministro de Justicia Germán Garavano, tras un proceso plagado de irregularidades.

Ari Lijalad
Nuestras Voces

En el INTI no sobra nadie

En un nuevo capítulo del plan de políticas de ajuste que lejos está de cumplir las metas de “Pobreza 0” y de “reducir el índice de desocupación”, el gobierno nacional va ahora por el desguace del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) a través del despido de 250 trabajadoras y trabajadores del lugar.
Inmersos en un clima de angustia e incertidumbre, compañeros y compañeras del organismo resisten en el lugar de manera pacífica a la espera de que los funcionarios del INTI se acerquen a darles explicaciones, mientras llevan a cabo asambleas para debatir medidas de fuerza que exijan la reincorporación.
Cabe destacar que el INTI es un organismo fundamental para el desarrollo del país por lo cual, además de dejar en la calle a 250 familias, se pone en riesgo la producción, calidad y garantía de todo lo que consume nuestra población. En este contexto, estamos convencidos que un gobierno que no apuesta a la industria nacional ni al trabajo, busca un INTI reducido y al servicio de la patronal.
Desde la CTA Autónoma llamamos al gobierno nacional a que resuelva esta situación sin la pérdida de ni 1 sólo puesto de trabajo, al mismo tiempo que ponemos a disposición todos los recursos necesarios para seguir exigiendo la reincorporación de los 250 compañeros y compañeras porque EN EL INTI NO SOBRA NADIE!
Además, en este escenario donde la ola de despidos de la era Macri es cada vez más grande y los tarifazos permanentes golpean cada vez más fuerte a los salarios, se vuelve urgente convocar para febrero a un Paro Nacional de todas las centrales y los movimientos sociales con movilización a Plaza de Mayo.

Pablo Micheli y José Rigane

Pablo Micheli es el Secretario General de la CTA Autónoma. José Rigane es el Secretario Adjunto de la CTA Autónoma.

martes, 30 de enero de 2018

Cóndores muertos en Mendoza y riesgo de los agroquímicos



Impunidad para los agrotóxicos.

La aparición de 34 cóndores, dos ovejas, un puma, una cabra y un cordero muertos, en Malargüe, Mendoza, a 3 mil metros de altura y semiquemados conmocionó a la región y al país por la brutalidad del hecho y debido a que el cóndor es una de las especies protegidas, declarada monumento natural provincial por la ley 6.599.
Se presume que los animales fueron envenenados, sustentado en que aparecieron tanto animales salvajes como domésticos muertos; y también por el hecho de que intentaron quemarlos para hacer desaparecer la evidencia. Si bien se están analizando las muestras tomadas, se habla de que podrían haber sido envenenados con un agroquímico, carbofurano, un pesticida neurotóxico utilizado en cultivos de papa, maíz y soja, altamente letal para las aves.
El lugar donde sucedió la matanza pertenece al grupo de inversión anglo-malayo Walbrook, dueño de unas 600 mil hectáreas en la Argentina y que controla, además, la sociedad anónima Nieves de Mendoza, propietaria del complejo de esquí Las Leñas, adquirida en 2003 al grupo IRSA. Dentro de lo proyectado para la zona, el grupo Walbrook anunciaba en ese momento la intención de desarrollar un proyecto agrícola-ganadero en Malargüe, consistente en cultivo de papa y cría de ganado caprino (cabras), en tierras arrendadas a familias o puesteros que crían ganado. Para evitar la caza de sus animales, es muy común en la zona que rocíen partes de animales muertos o huesos con agroquímicos que se venden libremente para matar al principal depredador de ovejas y cabras, el puma. El peligro que esto conlleva además de la muerte de animales, es la potencial toxicidad para el ser humano por contaminación de cursos de agua.
El uso de agroquímicos está muy difundido en nuestro país, con las consecuencias fatales que tienen su mal uso y abuso en la salud humana. El Estado, que debería controlar y restringir su uso, hace la vista gorda, priorizando los intereses capitalistas por sobre la salud y la vida de la población y de la fauna. Por ejemplo el uso de glifosato por multinacionales para el cultivo de soja, en Formosa, hace estragos hace años en sus comunidades campesinas, desde enfermedades respiratorias y malformaciones hasta muertes por cáncer. Sin embargo, entidades estatales como el SENASA establecen que el glifosato es inocuo, avalando de esta manera la intoxicación masiva de las comunidades norteñas. En este caso, el carbofurano está prohibido en Canadá, la Unión Europea y Estados Unidos. En nuestro país, su uso está restringido a algunos cultivos frutales pero también es usado en cultivos de tabaco. El gran problema del uso de agroquímicos es que no existe trazabilidad de los productos ni un registro de quiénes compran los mismos. Esta falta de control, tanto estatal como de las empresas que arriendan sus tierras, genera tragedias como la de Mendoza.
Exigimos una investigación sobre lo ocurrido y el reconocimiento y la divulgación por parte del Estado de todas las investigaciones independientes que determinan la toxicidad de los agroquímicos (como el glifosato, investigación que fue desprestigiada y cajoneada), y el cese de la persecución a quienes investigan estas sustancias, para terminar con el amparo estatal a los grandes negociados de las empresas agrícola ganaderas del país.

Cecilia Brea (Presidenta Centro de Estudiantes de Veterinaria - EVET)

UE-Mercosur: Otro macro(n)fracaso de Macri

La firma del tratado de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea sumó un nuevo revés ante la posición de Francia de continuar protegiendo al sector ganadero de ese país, pese al desmedido afán de los gobiernos de Argentina y Brasil, encabezados por Mauricio Macri y el golpista Michel Temer.
La decisión de ambos gobiernos de bajar banderas, que despertara a fin de año temor y desconfianza entre los empresarios, trabajadores e industriales conosureños, no fue suficiente para traspasar los obstáculos que impone un importante lobby empresario europeo y los líderes de la Comisión Europea, un organismo supranacional que tomó carácter propio.
Macri fue a buscar en Francia un gesto que no consiguió. El presidente de Francia, Emmanuel Macron se manifestó públicamente en favor de continuar protegiendo al sector ganadero de su país. El próximo martes hay una nueva reunión por el acuerdo en Bruselas.
En Europa los industriales a favor del acuerdo, discuten contra el lobby agrícola que frena el acercamiento. Macri fue a buscar a Francia un gesto que no consiguió. El próximo martes hay una nueva reunión por el acuerdo en Bruselas.
Los gobiernos conosureños, en especial Argentina y Brasil, desde fines del año pasado tratan de anunciar con bombos y platillos el acuerdo que ya lleva dos décadas negociándose. Pero Macron le dio un nuevo parate al anuncio. Macri intentó superar con él las diferencias en relación a dos temas comerciales emblemáticos (carne y biocombustibles) ante el ostracismo europeo de ofrecer una mayor apertura para las exportaciones mercosureñas.
De la filtración de 19 textos de las negociaciones confidenciales de la UE y los gobiernos del Mercosur (de las que dio cuenta el economista Jorge Marchini), dos asumen temas que no habían sido puestos en el conocimiento público: los capítulos de los entendimientos alcanzados -o en debate pendiente- que se han venido elaborando en forma secreta, incluyendo los relacionados con servicios , inversión y comercio electrónico que pueden restringir y/o distorsionar en una medida inédita la capacidad de regulación económica y financiera de los países mercosureños.
Entre las filtraciones puestas al descubierto llama en particular el capítulo relacionado con la solución de diferencias, ya que pone en evidencia cómo podrían ser forzados los países del Mercosur a ceder soberanía jurídica y aceptar exigencias aún mayores que las definidas por Europa en otros TLCS con países periféricos.
La UE podría demandar a los gobiernos del Mercosur en un tribunal internacional por no cumplir con el TLC y si el país mercosureño perdiera, la UE podría elevar los aranceles de importación para los productos del Mercosur hasta que estos cambiaran normas, políticas y acciones de forma de cumplir con los fallos.
Las filtraciones demuestran que no solo la UE ha profundizado sus demandas exigiendo una mayor liberalización para la participación de las empresas europeas en las compras públicas de los países del Mercosur, inhibiendo una herramienta tradicional elemental para la promoción de nuevas industrias y servicios de economías con menor grado de desarrollo
Asimismo, sumó la exigencia de mayor flexibilización y menor control en las normas de origen, lo cual permitiría dar mayor penetración , por ejemplo, a las muy conocidas marcas europeas de prendas de vestir y diseño, para poder generar la mayor parte del valor de su producción en países con bajos costos para ser presentados , etiquetados y contar las ventajas de liberalización “europea” para su penetración en los mercados sureños.
Impuso, además, sus demandas de una mucho mayor protección de la propiedad intelectual para extender y profundizar privilegios monopólicos, lo que llevaría a un aumento sustancial de precios de medicamentos, restringiendo el desarrollo de la industria farmacéutica local de genéricos y limitando aún más el acceso a la salud a ellos.
Un análisis del diario argentino Página12 señala que los sectores manufactureros argentinos que mayor impacto podrían recibir son el automotor, maquinaria y bienes de capital y el químico, aunque las cámaras representativas de casi todos los industriales han manifestado públicamente sus reparos con el acuerdo. En Brasil también se esperan consecuencias industriales negativas. Su manufactura tiene más potencial exportador aunque también se perjudicaría si Argentina, su principal cliente en el capítulo industrial, accede a los productos europeos sin aranceles.
Uruguay y Paraguay tienen un sector industrial mínimo, con lo cual el impacto negativo es casi nulo. De hecho, Uruguay llegó a plantear la firma un acuerdo de libre comercio con China. Europa podría perder mercado en manos sudamericanas en determinados sectores agrícolas, como en carnes, etanol, vinos, lácteos y cereales.
Más allá de la mayor productividad del Mercosur en algunos de estos sectores y de la posibilidad de la baja de aranceles en Europa, hay relativo consenso alrededor de la idea de que los subsidios europeos no van a mermar y por lo tanto el acceso a ese mercado, incluso con la firma del acuerdo, no se allanará. Esa cerrazón europea la vivieron en carne propia Australia y Nueva Zelanda, que también trataron de negociar un relajamiento de las normas proteccionistas pero no lo lograron a causa del fuerte lobby agrícola, señala Página 12.
El analista Eduardo Febbro indica –desde París- que el mundo sin fronteras ni regulaciones pegajosas que constituye la tabla de la ley de los liberales del mundo tiene muros muy sólidos. Mauricio Macri no los pudo atravesar, pese a haber hecho los deberes que Occidente exige de todo candidato que quiera atraer a los nuevos colonialistas, es decir, los inversores.
El acuerdo comercial chocó con las “líneas rojas” que planteó el presidente francés. Incondicional de un mundo circulante y enemigo de cualquier aislamiento, Macron no despejó las trabas que desde hace décadas bloquean la firma del pacto entre los dos bloques. Las expectativas de arrancar un gesto de Macron para liberar el acuerdo eran más que escasas luego de que, la víspera, durante un encuentro con agricultores franceses en el centro de Francia, Macron les dijera que le presentaría a Mauricio Macri “líneas rojas que Francia no desea sobrepasar”. Y así fue.
Si bien España y Alemania han variado su postura, Francia lidera el grupo de tres países más hostiles a los avances con el Mercosur: los otros son Polonia e Irlanda. Hay varios puntos en discordia, empezando por el etanol. La UE impone un límite de 600 mil toneladas de etanol. La oferta es inaceptable para el bloque sudamericano. Las patentes y el sector bovino son otras de las líneas rojas. El Mercosur reclama mucho más espacios para la exportación. La oferta del sur es demasiado frondosa según los europeos. Estos temas ya impidieron que el pacto se firmara en 2017 en la Argentina durante la conferencia de la Organización Mundial de Comercio.
Esta semana se iniciará otro ciclo de negociaciones en Bruselas. Sin embargo, la decepción parisina fue considerable. Las posiciones son, por ahora, inconciliables: Francia pide demasiado para respetar sus líneas rojas y les deja a los miembros del Mercosur, en particular a la Argentina y Brasil, la responsabilidad de ceder. París miró ya con muy malos ojos las concesiones que hizo la Comisión Europea en lo que atañe al etanol y la carne a cambio de una mayor apertura para su sector automotriz.

Rodolfo Koé Gutiérrez, periodista económico argentino, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, ww.estrategia.la)

lunes, 29 de enero de 2018

Despidos y ajuste para atraer inversores

Los despidos crecen, en el INTI, en los Yacimientos de Carbón, en el Hospital Posadas, entre los más mencionados; acompañado con cierres de empresas.
Son situaciones que generan incertidumbre en miles de familias de trabajadores y trabajadoras.
Al mismo tiempo, el Presidente y sus Ministros declaran en Moscú, Davos o París que todo funciona viento en popa y con gran futuro.
¿Cuál de las dos realidades expresa el funcionamiento de la economía?
La primera, despidos y cierres, es expresión del ajuste del capital contra el trabajo, algo que está detrás de la segunda, el discurso optimista del gobierno y del poder económico.
Por ende, no son dos realidades, sino dos caras de la misma moneda.
Macri necesita atraer inversores externos y para eso muestra el ajuste desde sus políticas, que necesitan del “gradualismo” para que la sociedad lo soporte, al tiempo que otorga señales de la reestructuración empresarial en curso.
Esta reestructuración opera tanto en el capital privado como en el público, el que se lleva adelante desde el área de “modernización”, crecientemente asociado al achique, el ajuste o los despidos.
Todo bajo un discurso moderno, de eficiencia, que encubre la necesidad de bajar el salario para reducir los costos de producción y mejorar la ganancia.
En ese sentido opera la cotización del dólar, la suba de las tarifas y las pretendidas restricciones a la actualización salarial. ¿Por qué?

Cotización en alza

El dólar alto es demandado por grandes empresarios, productores y exportadores, del campo y la ciudad, que si no subía la cotización seguían guardando sus cosechas, especulando con el precio y así demoran las ventas externas y reducen el ingreso de divisas al país.
Se genera así una situación que agrava un déficit comercial de 8.500 millones de dólares para el 2017 y unos 10.000 millones previstos para este 2018. En el horizonte supone más endeudamiento para cancelar ese déficit externo.
Además, un dólar más alto está asociado a la baja de tasas de interés que promueve el cambio de las metas de inflación dispuesto a fines de diciembre pasado. Especuladores contentos pueden ahora apostar sus capitales al dólar, a las tasas o a bonos y acciones.
El accionar especulativo continúa definiendo el rumbo económico de la Argentina, especialmente con un Estado Nacional que juega su destino con el endeudamiento externo.

Tarifas exigidas por las empresas privatizadas

Las tarifas tienen que aumentar, así lo exigen las empresas y es el programa a seguir desde la asunción de Macri a fines del 2015. La idea es que sean equivalentes a un precio de mercado, que es monopólico por cierto.
Quien no pueda pagar perderá el servicio, es la norma del mercado que se define contra el derecho al agua, la luz, la electricidad, la energía, el transporte, la salud, la educación, etc.
La definición gubernamental, con consenso electoral y complicidad de los poderes del Estado, legislativo y judicial, apunta a la mercantilización de la cotidianeidad, algo contradictorio con una concepción de derechos.

Salarios en baja

Para completar la ecuación se requieren salarios en baja, algo que con todas las letras demanda el FMI en sus comentarios relativos al futuro de la Argentina.
Dicen textualmente en el Fondo: “La inflación seguiría retrocediendo, suponiendo que haya una moderación salarial.” [1]
No hay dudas que el poder económico requiere de la baja salarial y para ello pretende disciplinar al movimiento obrero, que en diciembre pasado, como en marzo, pudo evidenciar la fortísima capacidad movilizadora y de protesta modificando el escenario de la política.
Si luego de las elecciones de octubre, el gobierno confiaba en regresivas reformas previsionales y laborales, a costa de un importante descrédito avanzó contra las jubilaciones a fines de diciembre.
Luego postergó para febrero el tratamiento de la ley laboral y ahora morigera el ritmo reformista para avanzar con algunos cambios y en modo “gradual” tratar de cumplir con el objetivo, no solo afectando ingresos laborales, sino capacidad de acción sociopolítica de organizaciones sindicales y territoriales de trabajadores y trabajadoras.

Macri en Moscú, Davos y París

Toda esta realidad es la que Macri presentó con escaso éxito en Moscú, Davos o París.
Fue festejado por grandes empresarios, los organismos internacionales y saludados por sus colegas del capitalismo desarrollado, pero con escasas “efectividades conducentes”.
Resulta que los inversores necesitan confirmar el diagnóstico, especialmente esperando la derrota del movimiento obrero y popular, algo que aún está en veremos.

La inversión inicia el ciclo del capital

El capitalismo funciona con base en inversiones, que el Estado está imposibilitado de encarar y el capital local es huidizo al riesgo, acostumbrado al subsidio y al sostén estatal.
Solo queda el capital externo, ruso, francés o global, que elige sus destinos con base en ganancias seguras y con libre disponibilidad de movimiento.
Por eso no sorprende que Macron, el gobernante francés interponga el interés nacional a la presión ideológica de Macri por avanzar con los acuerdos entre la Unión Europea y el Mercosur.
El presidente argentino sostiene un discurso ideológico a favor del libre comercio y el colega francés le dice “primero Francia”. Es el mismo lenguaje de Donald Trump: “First América”.
Dirían en el barrio que Macri es más papista que el Papa y es cierto, ni EEUU, ni Francia, ni la Unión Europea, ni ningún país con pretensión o realidad hegemónica subordina el discurso del libre cambio a la realidad del capitalismo y la dominación.
Claro que también, junto a la voluntad “gradual” de reaccionarias reformas, existe la iniciativa política popular asentada en el descontento y una creciente protesta popular, que puede ser masiva como en diciembre y modificar el ritmo del accionar político del gobierno o del ajuste pretendido por el gran capital: los ansiados y esperados inversores.

Julio C. Gambina

Nota:

[1] Alejandro Werner. América Latina y el Caribe en 2018: Recuperación económica en ciernes. Blog del FMI, en: https://blog-dialogoafondo.imf.org/?p=8634 (consultado el 27/01/2018)
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Ante la derogación de la paritaria nacional los docentes nos disponemos a luchar

El gobierno nacional no para de tomar medidas perjudiciales que implican un retroceso en las condiciones de vida y trabajo, avasallando conquistas de la clase trabajadora. En esta oportunidad modifica las condiciones en la que se han desarrollado por años la Paritaria Nacional docente, aprobadas por la Ley 26075 y por el Decreto 457 del año 2007.
De esta manera se intenta avanzar sobre las negociaciones colectivas a nivel nacional, imponiendo de forma unilateral la voluntad del gobierno en detrimento de la representatividad reconocida de los distintos Sindicatos como CTERA, SADOP, CEA, AMET y UDA. Esto significa que cada provincia debe discutir separadamente la paritaria salarial, generando mayor desigualdades entre las mismas ya que no se plantearía un piso salarial nacional. A su vez desconoce la representación mayoritaria de la CTERA poniendo en igualdad de condiciones al resto de sindicatos minoritarios que son parte de la CGT y por lo tanto sería más fácil imponer condiciones desfavorables en las negociaciones, considerando el accionar político gremial de la CGT de los últimos tiempos.
El gobierno impone un aumento del 15% y deja a un lado la “clausula gatillo”, la cual posibilita la reapertura de las negociaciones con los gremios en el caso de que el porcentaje de la inflación supere el porcentaje del incremento salarial acordado en un principio. En 2015, el gobierno previó una inflación del 25% y terminó siendo un 40,2%, y en 2017 se pautó un 17% y el año finalizó en 25%. Actualmente los analistas estiman que la inflación será al menos en el 20%. Por lo que se deduce que con todo el paquete inflacionario descargado por este gobierno, el salario de la clase trabajadora se desintegrará en poco tiempo y no se recuperará con ese miserable aumento.
Esto se da en el marco de una campaña de hostigamiento y desprestigio del Gobierno contra los sindicatos. Incluso el oficialismo no dudo en usar a sus sicarios para amedrentar y así fue que el secretario general de Suteba y adjunto de Ctera, Roberto Baradel, recibió amenazas en su correo electrónico. “Te avisamos que no te metas más con el gobierno. Ahora vamos por vos y tu sindicato. Pudiste ser parte de todo esto, pero decidiste ser el enemigo, ahora te vamos a hacer desaparecer", le advirtieron.
Los dirigentes de la CTERA, Sonia Alesso, como miembro de la Internacional de la Educación, y Hugo Yasky, Secretario General de la IEAL presentarán la denuncia en la OIT y la Internacional de la Educación ante el ataque y vulneración a los derechos de los trabajadores de la educación por parte del gobierno macrista.
Pero, a esta altura de los acontecimientos consideramos que la CTERA tiene que organizar a la gran base docente y al conjunto de la comunidad educativa planteando plenarios de delegados de escuela con mandato para definir un plan de acción y enfrentar a este gobierno defensor de los intereses de los capitalistas.
Una vez más, los docentes seremos el caso testigo para el resto de las negociaciones de la clase trabajadora, otros sindicatos ya plantearon no aceptar tal irrisoria propuesta, en ese camino estamos nosotros también. La disponibilidad a la lucha y el hacer frente al desprestigio siempre impuesto en los medios de comunicación, repitiendo el accionar de este gobierno que poco le importa la educación pública y que sigue empecinado en seguir su plan de ajuste. Los trabajadores de la educación a su vez reclamamos a CTERA:

No inicio de clases y plan de lucha en defensa del salario

Por la defensa de los sindicatos y de las paritarias docentes nacional y provinciales

Por un salario que cubra la canasta familiar

Por la defensa de las jubilaciones de los docentes y del resto de los trabajadores

Contra la Reforma Previsional y Reforma Laboral de Cambiemos y de los gobernadores del PJ

Defensa irrestricta de la Paritaria Nacional como instrumento de negociación y de lucha a través del cual los docentes podemos reclamar y exigir nuestros derechos

En defensa de los estatutos docentes y por la derogación de la Reforma Educativa que perjudica y desestima a la educación

Malvina Alvides (Delegada SUTEBA) y miembro de la Corriente Socialista Militante

Psiquiátricos, guetos y disciplinadores sociales

En el discurrir de esta sociedad, las formas subversivas al orden impuesto deben ser acalladas y encerradas. Esta es la lógica con la cual se sostiene un régimen de dominación pacificador. Las herramientas utilizadas en este espacio-tiempo son varias y aparentemente no guardan formas opresivas: la seducción y la culpabilización de une. Al correr el velo de esta apariencia, es posible vislumbrar las formas violentas y mejor acabadas de la dominación.
Hoy, ya no es necesario para la represión, la igualación en cantidad de personas para contrarrestar las fisuras de este sistema. En este espacio-tiempo nos constituimos como policías de une misma y de otres, con atravesamientos punitivistas, exigiendo castigo y encierro. Cuando se tienen formas diferentes a las “normales”, se está en los márgenes y las fisuras devienen en otredad no-humana, es cuando la legalidad opera en el disciplinamiento social.
La patologización psiquiátrica es una respuesta política de disciplinamiento y el encierro, un procedimiento. La ciencia blanca está al servicio de la normalización, la medicalización y el negocio de la industria farmacéutica psicotrópica tiene como finalidad crear personas enfermas. Esto se sostiene en la construcción de humanidad de quienes están sanas dentro de este sistema y quiénes no. Lo sano es político, sumiso y humano. El estado es orden y progreso. No se niega el sufrimiento de estadíos de “depresión” frente a la constitución de este mundo; pero creemos considerar la potencialidad política de transformación.
Una de las tantas formas que tiene el sistema para continuar fortaleciéndose, son los lugares de encierro. El incremento de las personas en cárceles o hospitales psiquiátricos parecería ser que no nos hacen preguntar qué sociedad fascista tenemos, sino que mal están les otres. La sociedad tiene una mirada sobre el sistema hospitalario como algo que te va a prolongar la vida. Esta es una de las formas de construcción de moralidad de nuestra sociedad; al denominarlo hospital psiquiátrico la construcción social es un espacio que te salvará y no un lugar de encierro. El pensamiento de salvación guarda una mirada profundamente moral en función de una estructura judeo-cristiana, no obstante; ¿Salvar a quien?
Actualmente, en la Argentina se estiman en 50000 personas solo en psiquiátricos públicos. En el año 2010, se aprobó una ley que establece cerrarlos en forma definitiva para el año 2020 reemplazándolos por hospitales generales. No obstante, como detalla el informe de 2017 del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) durante el periodo 2010-2015 no hubo importantes avances en la desmanicomialización y en los últimos años del gobierno de la Alianza Cambiemos se revirtió la tibieza de este proceso.
En el año 2016 el Ministerio de Salud decidió crear la Comisión Nacional de Salud Mental, designando personas autoritariamente sin un proceso amplio de selección. Se excluyó a las organizaciones civiles de familiares y organismos de Derechos Humanos. Asimismo, se eliminaron todos los requisitos que debían cumplir las instituciones públicas y privadas de encierro.
En un informe de 2016, de representantes civiles, denunciaron la prelación en psiquiátricos de terapias electroconvulsivas (TEC), más conocidas como electroshock y sujeciones físicas.
En el territorio denominado argentina, las armas del estado asesinan a una persona por día por gatillo fácil. En esta sociedad, cuando las balas del estado no realizan su cometido, se apela a los lugares de encierro que funcionan como disciplinador social y guetos.
Uno de los tantos ejemplos de gueto; hasta el año 2006 en el psiquiátrico de Lujan Domingo Cabred, murieron 70 personas por año. En el sistema carcelario, se encuentran 71464 personas privadas de su libertad y mueren cientos de personas por responsabilidad del estado. Desde Virginia Bolten, nos preguntamos: ¿cómo aboliremos los lugares de encierro del estado racista que perpetúan genocidio invisible?

Editorial Virginia Bolten (Argentina)

Victoria Ocampo: una irreverente de la literatura



Ramona Victoria Rufina Ocampo nace en el seno de una familia aristocrática en la ciudad de Buenos Aires un 7 de abril de 1890 en una vieja casona de San Martín y Viamonte. Hermana mayor entre otras seis mujeres durante su infancia Victoria es educada en forma privada por institutrices y aprendió francés como primer idioma, para luego continuar con el inglés y el español.

La familia Ocampo regresa al país luego de recorrer París, Londres, Ginebra y Roma hasta asentarse nuevamente en Buenos Aires, en la famosa casona de Béccar, Villa Ocampo, donde Victoria a corta edad comienza a verse atraída por la literatura: Julio Verne, Charles Dickens, Daniel Defoe, Edgar Allan Poe componen su lista de favoritos. Ya adolescente, en 1908 la familia se traslada nuevamente a Europa, donde se forma en La Sorbona y el College de France.
Con escasos veintitrés años, se casa con Luis Bernardo de Estrada, matrimonio breve que terminaría con un “hombre tiránico, convencional y devorado por el amor propio", según sus propias palabras. Así entonces comienza una relación con Julián Martínez, primo de Estrada, a quien conoce en Roma durante un viaje mientras aún continuaba casada; esta y sus posteriores relaciones dan cuenta de su posición frente a las mismas y su audaz actitud para los tiempos que corrían. Aquella relación conflictiva con su primer marido puede leerse en la novela Xamaica, de Ricardo Güiraldes, cuyo personaje protagónico está inspirado en la propia Ocampo. La realidad que la atravesaba por entonces no sucumbía ante la pasividad y aquello que le impidiera su libertad: su negativa frente un matrimonio convencional y su renuncia a la maternidad por mandato dejaban entrever el carácter determinante de una “adelantada” para su época.
Ella solo hablaría de su relación con Julián Martínez en un capítulo de la novela La rama de Salzburgo: “El pasado de J., dormido en él, vivía en mí de manera aguda. Este intercambio de carga del pasado es fatal entre amantes que padecen de amor. Nos habíamos encontrado a alturas muy distintas de nuestras vidas, con una experiencia sin relación una con otra, ni equilibrio.”

Inicios literarios y fundación de Revista Sur

Su primera nota la editó para el diario La Nación, titulada Babel, donde escribió sobre las desigualdades entre seres humanos y realizó un comentario del Canto XV del Purgatorio. En 1924, Ortega y Gasset le publicó su primer libro, De Francesca a Beatrice. La intelectual, ensayista, traductora y editora publicó diversos libros como La laguna de los nenúfares, diez tomos de Testimonios y Tagore en las barrancas de San Isidro. Hasta 1930 todas sus notas eran escritas en francés para luego ser traducidas.
Con el tiempo, Victoria Ocampo se relacionó con grandes personalidades del mundo intelectual, tanto nacionales como internacionales. El contacto con aquellas y su deseo de transgredir lo establecido hasta el momento la llevaron a buscar una manera de hacer visible sus ideas: fundó la revista Sur en 1931 y la Editorial Sur en 1933, con ayuda de José Ortega y Gasset, Waldo Frank y Eduardo Mallea, donde encontró satisfecho su deseo. A través de estos espacios promovió a escritores de todas las latitudes. El novelista norteamericano Frank fue quien la impulsó a llevar adelante el proyecto de la publicación, que fuera para ella un legendario puente entre diversas culturas: construir un lazo cultural entre continentes, entre “las dos Américas”, como lo decían por entonces. Al ser publicada en Europa y Latinoamérica, Sur buscaba promocionar la literatura argentina y latinoamericana, por extensión, y atraer a aquellos personajes que tanto interesaban a su fundadora, como el de Virginia Woolf con quien luego llegaría a forjar una gran amistad.
Frank sugirió que la revista a fundar tratara las inquietudes y problemas de la literatura del momento. El 1 de enero de 1931, apareció el primer número, el que se agotó rápidamente con una tirada de cuatro mil ejemplares y fue vendida también en París y Madrid. Entre los colaboradores de la primera etapa de Sur encontramos, en sus diversos consejos, a Ernest Ansermet, Drieu La Rochelle, Leo Ferrero, Waldo Frank, Pedro Henríquez Ureña, Alfonso Reyes, Jules Superville, José Ortega y Gasset, Jorge Luis Borges, Eduardo J. Bullrich, Oliverio Girondo –que renunciaría al poco tiempo-, Alfredo González Garaño, Eduardo Mallea, María Rosa Oliver y Guillermo De Torre. A lo largo de los años de la revista, estos comités fueron mutando y se incorporaron Ernesto Sábato y Adolfo Bioy Casares. Tras la flecha apuntando hacia abajo, como portada, se encontraban diversos artículos de debate y discusiones ideológicas, filosóficas y políticas.
Sur significó una oportunidad de consolidación literaria para jóvenes escritores: Julio Cortázar escribió que «... nos ayudó a los estudiantes que en la década de 1930 al 1940 tentábamos un camino, titubeando entre tantos errores, tantas abyectas facilidades y mentiras», para Octavio Paz, «Sur no es solo un revista o una institución: es una tradición del espíritu... [Victoria] ha hecho lo que nadie antes había hecho en América».
Frente a los problemas para financiar su salida y otras polémicas, Ocampo escribió: “Lleva publicados más de doscientos números y me ha creado más de doscientos problemas. Muchos más dolores de cabeza. No sé si me sobrevivirá”.

Fundación de la UMA (Unión de Mujeres Argentinas)

Seguramente el de activista por los derechos de las mujeres es el perfil más ignorado de Victoria Ocampo. Siempre se resaltaba su calidad de escritora como su influencia en aquella época, siendo la primera mujer “de letras”, consagrada como tal por la Academia Argentina de Letras en 1977. En 1936 fundó, junto a María Rosa Oliver y Susana Larguía, la Unión de Mujeres Argentinas, una organización de mujeres que se creó para defender sus derechos civiles. Como dirigente de la misma, Ocampo siguió consciente de que la liberación de las mujeres era a la vez una necesidad y una revolución que avizoraba poco antes de su muerte.
Durante 1935, lideró una campaña contra la iniciativa de un grupo de jueces que buscaban practicar una reforma al Código Civil que inhibiera a la mujer casada para administrar sus propios bienes, y a favor, en cambio, de sus maridos, a quienes autorizaron a anular el vínculo si comprobaban que su mujer no era virgen al contraer matrimonio. Y lo peor: las mujeres no podían aceptar trabajar ni ejercer profesión alguna sin autorización legal del marido. En la esfera pública defendió con convicción los derechos de las mujeres desde las páginas de Sur.
En su ensayo de 1936 titulado La mujer y su expresión, la escritora reflexionó acerca de la situación de las mujeres en el contexto patriarcal. Ya en agosto del mismo año dio un discurso radial que supo ser transmitido en España sobre La mujer y su expresión con el fin de fomentar la solidaridad entre las mujeres de todo el mundo. Finalmente, la UMA logró su objetivo y el proyecto de la reforma fue anulado.

Mussolinni, Perón y la cárcel

En septiembre de 1934 el Instituto Interuniversitario Fascista de Cultura invita a Ocampo y Eduardo Mallea a dar una serie de conferencias en diversas universidades italianas. A pesar de oponerse al régimen de Benito Mussolini, la escritora mantuvo una entrevista con el dictador, donde le realizó una serie de preguntas con respecto a la condición de la mujer en el Estado fascista. Mussolini le dijo que el primer deber de la mujer era el de dar hijos al Estado, a lo que Ocampo le preguntó: “Pero ¿podría la mujer colaborar de otra manera con el hombre?”. “No”, respondió Mussolini. En su ensayo La historia viva (1936), la escritora habló de su temor de que el Duce llevara a su país a una guerra y de que las mujeres pariesen hijos “para la muerte”.
En el plano histórico y político hay otro acontecimiento importante: su asistencia a los juicios de Núremberg, incluido en la serie de los Testimonios. Por su parte, entre 1939 y 1941, Juan Domingo Perón, quien no ocultaba su admiración por el régimen fascista, ocupó el cargo de agregado militar en la Italia de Mussolini.
El antiperonismo de Ocampo le valió la cárcel en 1953, acusada de guardar armas en su casa marplatense para los enemigos del régimen. La enviaron al Buen Pastor como presa política, un instituto ubicado en San Telmo, donde convivió durante 26 días con otras mujeres condenadas y perseguidas. La noticia de su detención conmocionó a personalidades culturales del mundo, lo que movilizó a numerosos escritores célebres a organizar una campaña para pedir su liberación. Aldous Huxley, en conjunto con Waldo Frank, encabezaron el Comité Internacional para la Liberación de los Intelectuales Argentinos. En una carta que data pocos días después de su liberación, expresó: "Las miserias, las debilidades de la humanidad y también sus arranques de generosidad nunca se me aparecieron con tanta evidencia como en esos 26 días, y me alegra haber tenido oportunidad de vivirlos. Estas no son palabras en el aire. Además nunca he sentido como en esos días lo que significa la camaradería en la desgracia y el calor de la ternura humana entre desconocidas".
La escritora apoyó el golpe militar de la autodenominada Revolución Libertadora del 55. Hubo un editorial de la revista Sur que fue tan escandalosa en su apoyo, reivindicando a los golpistas como héroes, que llegó a generar diferencias hasta en la misma revista: “Lo que acabamos de vivir ha demostrado la magnitud del peligro. [...] aprovechemos una lección tan cruel y que hubiera podido serlo aún más si el impulso de algunos hombres que se jugaron la vida no hubiera intervenido de manera milagrosa. [...] ayudémoslos con toda nuestra buena voluntad, con toda nuestra preocupación de verdad y de probidad intelectual”.
Aquella mujer, transgresora para su época, logró conquistar su espacio, aquel cuarto propio que supiera “diseñar” Virginia Woolf en el ensayo que problematizara acerca del rol de las mujeres en la literatura universal. Victoria Ocampo encontraría la muerte el 27 de enero de 1979, a los 88 años de edad.

Lujan Echeverría

domingo, 28 de enero de 2018

Las tres estaciones: macrismo, peronismo e izquierda



Reescribiendo a Alsogaray, el gobierno quiere “pasar el otoño” con la ilusión de la reelección. El PJ quiere “olvidar el verano” y ubicarse como oposición de cara al 2019. Para la izquierda, hay que pelear ahora contra los despidos.

“Hay que pasar el otoño”

La famosa frase con la que Álvaro Alsogaray lanzó un plan de ajuste en 1959 (“hay que pasar el invierno”) apareció reescrita y reinterpretada en el diario La Nación. En un editorial de Claudio Jacquelin se afirma que luego de la crisis por la sanción de la reforma previsional, “la máxima de estos días es "hay que pasar el otoño". En cualquier conversación con los principales responsables de la administración macrista se lee esa frase en el subtexto. La táctica es no hacer olas. No tensar deliberadamente ninguna cuerda que pueda rebotar en su contra. Por eso, con los sindicatos, uno de los protagonistas de estos días, se opta por la acupuntura antes que por la cirugía mayor. Aunque algunos confundan ataques aislados con una declaración de guerra.”
Por supuesto, inmediatamente las olas aparecen. Con un ministro de Trabajo en problemas, el macrismo -cuya imagen cayó entre un 10% y 15% desde diciembre- tiene que surfear “los aumentos de tarifas que seguirán golpeando los bolsillos, el ajuste en los estados nacional y subnacionales (en parte como consecuencia de la reforma fiscal y la necesidad de bajar el gasto) y las negociaciones paritarias por los salarios de 2018, con los consecuentes reclamos, protestas (huelga docente dada por hecha, incluida) y agitación social”. Estas “son las amenazas y los desafíos del otoño que hay que pasar. Aunque tienen que lograr que termine el verano, que se parece más a la continuidad del año que se fue que al comienzo del nuevo”.
El gobierno, y sus medios afines, se ven obligados a reconocer la relación de fuerzas que dejó el 18D. Como afirmó Christian Castillo, en una entrevista publicada en este diario “las jornadas del 14 y el 18 de diciembre, en este último tanto la del Congreso como los cacerolazos de la noche, fueron la avanzada de un enorme y muy mayoritario rechazo social a esta medida confiscatoria contra los jubilados, quienes cobran la Asignación Universal por Hijo y quienes reciben otro tipo de pensiones. O sea que, gracias a estas acciones, que tuvieron elementos de lo que los marxistas llamamos “acciones históricas independientes de las masas”, el Gobierno ha pagado un alto costo político que lo obliga a recalcular sus planes, incluyendo poner en el freezer la llamada “reforma laboral”. “Es la lucha de clases, Durán Barba”, podríamos decir parafraseando a Bill Clinton”.
Con el fracaso del “reformismo permanente”, la ecuación del gobierno es que pasen los despidos en el sector público y privado y condicionar con ello las paritarias, para imponer un techo del 15%, sin cláusula gatillo. A eso se acompaña con el desfile impotente de Macri en Rusia, Davos y Francia, sin lograr seducir al capital internacional de derramar su prometida “lluvia de inversiones”. Este plan B tiene innumerables contradicciones, por empezar, que no hay forma de que el gobierno salga indemne de su ejecución: tiene que meterle la mano el bolsillo, una vez más, a millones de personas: eso no gusta a los electores. Pero, como diría el mismo Macri en algún discurso, "no paramos de soñar". El gobierno, sin resolver nada de lo que se viene en 2018, ya sueña en 2019 y en la reelección, no solo de Macri sino también de Vidal y Larreta.
Se ilusionan quizá con el hecho de que la caída en la imagen del gobierno no ha sido capitalizada por el peronismo. Y la verdad es que el peronismo viene haciendo todo lo posible para no capitalizar nada. Un sector votó a favor de la reforma previsional, otro -el kirchnerismo y el moyanismo- la dejó pasar a fuerza de abstenciones, ausencias y, de conjunto, una línea de “mucho ruido y pocas nueces”, o sea, oponerse de palabra y no hacer nada en los hechos.

“Hay que olvidar el verano”

Mientras el macrismo quiere “pasar el otoño”, el peronismo trata de “olvidar el verano” y más precisamente los calientes días de diciembre. Así, un sector del PJ Bonaerense encabezado por su presidente e intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, se reunió este viernes en San Bernardo y sacó un documento que empieza con una cita del Papa Francisco y termina por ubicar al PJ como oposición electoral al macrismo de cara al 2019. El convite contó con la presencia de Pablo Moyano, Roberto Baradel, Sergio Berni, Martín Insaurralde, Francisco "Barba" Gutiérrez, Omar Plaini y otros 41 consejeros del PJ. Las ausencias también fueron notorias: Espinoza y los intendentes que vienen de apoyar y ser parte de las listas de Unidad Ciudadana, aunque días atrás el kirchnerismo había reconocido la autoridad de Menéndez.
Los caminos de la unidad son tortuosos, pero están plagados de buenas intenciones. Por eso, en el documento que salió de la reunión de San Bernardo, se dice que “con Néstor y Cristina vimos el legado de Perón y Evita en el gobierno, un país con crecimiento económico e inclusión social”. Menéndez, padrino de estos mimos al kirchnerismo, viene de un acercamiento con Massa y Bossio "para que puedan volver", según dijo. Massa, a su vez, viene de un acercamiento con Pichetto. Con este encadenamiento de factores, las puertas están abiertas para un frentón de todos con todos. Como indicó Abel Fernández, un atento seguidor de las internas peronistas, “conviene tener claro que estas módicas pulseadas se dan precisamente porque ahora en el peronismo no hay proyectos serios de división. Unidad Ciudadana no se plantea como un partido aparte; y nadie está trabajando para ser la pata peronista de Cambiemos”.
Lo que queda claro es que, así como el macrismo se ilusiona con la reelección antes de lograr resolver ninguno de los difíciles problemas que enfrenta, el peronismo se dedica a hacer lo mismo en versión oposición: dejar pasar los ataques, despidos, techos salariales, hasta el 2019. Un “agarrame que lo mato” electoral, que parte de reconocer a Cambiemos el “derecho y legitimidad democrática” y de ubicar al peronismo como “profundamente respetuosos de la voluntad popular”. Por lo que, salvo la todavía fría convocatoria de Camioneros para el 22 de febrero, no hay llamados a la acción, paros, movilizaciones, nada: excepto declamar contra la reforma laboral -ahora que convenientemente no se va a votar en el Congreso- y juntar firmas impotentes contra la reforma previsional que los referentes del peronismo “unificado” votaron o dejaron pasar.

"Hay que resistir y pelear para que los despidos no ocurran"

La frase del subtítulo corresponde a la legisladora del Frente de Izquierda, Myriam Bregman. Es que mientras unos quieren “pasar el otoño” y otros quieren “olvidar el verano”, la izquierda concentra su atención en otro lado: lejos de la rosca y con preocupaciones más concretas, están los millones que ya rechazaron el saqueo a los jubilados y que ahora ven con preocupación la situación económica, sufren los tarifazos, la devaluación y/o los despidos y, en suma, aumentan su descontento con el gobierno. Los que rompen con Cambiemos no parecen depositar tampoco su confianza en el peronismo ni en la figura de Cristina Fernández de Kirchner, con la que ya hicieron una experiencia de más de 10 años. De entre esos millones, unos miles resisten actualmente despidos y demuestran disposición a la lucha. Si, como sucedió parcialmente el 18 de diciembre, esas fuerzas lograran unirse para golpear como un solo puño, sería muy sencillo derrotar los despidos y el techo salarial que pretende imponer el gobierno. El único sector político que tiene puesta la mirada en 2018 antes que en 2019 parece ser el Frente de Izquierda, que, sin excepción, concurre con su militancia, sus legisladores, y diputados a cada uno de los conflictos contra los despidos, aportando a los fondos de luchas y colaborando para exigir acciones a las conducciones sindicales, como en estos días se los vio acompañando a las trabajadoras y trabajadores del Hospital Posadas.
Como también planteó Christian Castillo en la mencionada entrevista: “Mientras decimos que es necesario un plan de lucha de conjunto contra los despidos y contra el techo del 15 % en las paritarias no nos quedamos esperando pasivamente, sino que tratamos de incidir para que triunfen cada una de las luchas en curso. Es un momento donde las agrupaciones del Movimiento de Agrupaciones Clasistas pueden tener un crecimiento importante en función de cómo intervengan en los conflictos en curso, impulsando el frente único obrero, o sea la unidad de todos los que se oponen al ajuste del Gobierno y las patronales. Sabemos que las cúpulas se vienen oponiendo a esa unidad, por eso desde la izquierda y en conjunto con los que luchan tenemos que reclamar, realizar acciones y sumar fuerzas para imponer a las centrales y sindicatos un plan de lucha común que pueda frenar el ataque. En ese camino queremos fortalecer al clasismo como alternativa a las conducciones sindicales burocráticas”.
La consigna que se cantaba el 18 de diciembre, “unidad de los trabajadores”, no es para la izquierda un lema electoral para esperar a 2019, sino una bandera de lucha para el momento actual y para todo el 2018.

Cecilia Rodríguez

sábado, 27 de enero de 2018

La ciudad de Azul en lucha contra el cierre de FANAZUL

Myriam Bregman en CrónicaTV

Yo me declaro rebelde

El pasado 16 de diciembre se presentó la revista "La Retaguardia" en papel de distribución gratuita. En la oportunidad contó con la presencia del poeta y militante revolucionario Vicente Zito Lema

No imaginaba que iba a hablar tantas veces en público, entre otras cosas no imaginaba que iba a estar acá. Pero saber que los compañeros de La Retaguardia se animaban a realizar un sueño, sacar una revista en papel, a alguien como yo que ya tiene más de 50 años de fundar y fundir revistas en papel, no me podía escapar a esta posibilidad. No para contribuir a fundirla pero sí para tener las alegrías de estar presente el día en que se hace público.
Alguna vez mi gran amigo Eduardo Galeano, en la época en que sacábamos Crisis y viendo los problemas que teníamos, que entre otras cosas llevó al secuestro y desaparición de nuestro inolvidable Haroldo Conti, nos decía mientras rumiábamos odio y desesperación: “habrá que bancar lo que sea porque una revista es la piel de Dios”. Él repetía una vieja creencia de los dioses mayas, escribir en papel es escribir en la piel de Dios. Y creo que es un desafío y como todo desafío tiene sus riesgos y su ética. Porque esta revista sale no en cualquier tiempo, sale en un tiempo donde se va gestando y ya está vigente una nueva dictadura en la República Argentina. Y no me vengan con cuentos, yo ya públicamente, lo poco que es ya mi cuerpo, me sirvió para decir que frente a un gobierno que ordena matar, yo me declaro rebelde.
Ya me he declarado rebelde desde hace bastantes días, desde que este gobierno cumple con la responsabilidad criminal de hacer morir, que es lo mismo que matar, porque las formas cambian pero fondo no, a Santiago Maldonado.
Desde la muerte obligada de Santiago Maldonado el gobierno del Presidente Macri es un gobierno criminal. Y hay que decirlo, qué pasa con los que votaron a un gobierno criminal. La situación, viendo la filosofía política, porque en algo hay que basarse, nos llevaría a dividir entre gente que ahora tendrá culpa o dolo.
Culpa en la irresponsabilidad sabiendo los antecedentes del que fue nombrado Presidente, la culpa es poner al volante de un coche veloz a alguien con antecedentes de borracho y de ser capaz de escaparse si comete alguna muerte, por más que la muerte fuera consecuencia de su impericia, de su irresponsabilidad. Entonces, que haya culpa en los que pusieron en la presidencia a un irresponsable civil con antecedentes criminales desde joven que nunca se los pudieron borrar. El que no los conoce es porque da la responsabilidad de elegir Presidente sin preocuparse de quién era ese hombre a quien estaba votando. Dar mandato a un irresponsable criminal. Porque criminal es cometer cualquier delito, no solo matar. Esto que quede claro.
Ahora, se está cumpliendo lo que clásicamente Freud llama “renegación psicótica”; buena parte de los que pusieron en el poder a alguien con antecedentes criminales no quiere hacerse cargo de la situación, la niega y después niega que la está negando. En la ciencia de la psicología, la psiquiatría y el análisis eso se llama renegación psicótica, y desde el punto de vista de la política y de la filosofía, Marx explicó también qué es la renegación de la alienación que hace la gente cuando no quiere aceptar aquello de lo que es en su fundación responsable.
Pero ahora viene una situación más complicada, porque cada vez es más evidente que lo de la muerte de Santiago Maldonado, esa gigantesca tristeza de un Cristo pálido, desnudo, ante un país sin amor, se va repitiendo y cobrando potencia con el asesinato por la espalda del compañero carpintero Rafael Nahuel en el sur patagónico.
Ya no se puede hablar de ‘no sé lo que está pasando’ y se está entrando en el salto que pasa de la culpa al dolo, y el dolo lo hace tan asesino al que consiente la cosa como a aquél que la cometió y todos los hechos de represión, de violencia, de muerte, de ahogo económico, de destrozo de la conciencia de Derechos Humanos que sigue cometiendo el gobierno y obtenga el silencio cómplice de la sociedad hace a esa sociedad cómplice de todos los hechos criminales que el gobierno cometa a partir de estos días donde ya nadie puede negar qué es lo que está pasando.
Se puede ser cobarde pero tan miserable no. Y es de miserables no querer ver las formas brutales de represión que está organizando y llevando a cabo el actual gobierno. Hay ya responsabilidad directa y no va a haber excusas de locura. Porque la renegación psicótica no invalida la responsabilidad en los hechos y el hecho aquí es el peor, es el silencio, es el mirar para otro lado, es no querer comprometerse, es lavarse las manos y seguir jodiendo con el tema menor, si hubo corruptos que vayan presos, pero no porque haya corruptos en Argentina que sea permitido el asesinato directo, el intento de asesinato con la cantidad de gente a la que están disparando, y la formas de asesinato masivo que comete el gobierno a partir de la destrucción del aparato psíquico de la economía familiar de todas las formas en que la gente esta sufriendo y los que sufren más, como siempre, son los sufrientes entre los sufrientes, los pobres entre los pobres, los discapacitados, frente a los que tienen la suerte de tener un cuerpo que les responda mejor. Esa es la situación, un país es cómplice de la conculcación de todos los Derechos Humanos.
Y no me vengan con el cuento de que esto no es una dictadura. Primero quisiera saber quién de los que dicen esto vivieron en carne propia las dictaduras. Yo las he sufrido, mi cuerpo tiene memoria, memoria de las balas que tengo en el cuerpo, de las bombas que me pusieron, de la expulsión de la Universidad, memoria de la prohibición de mis libros, memoria de mi exilio. Yo no estuve tocando la viola cuando hubo una dictadura militar y puedo distinguir a mis 78 años y con mi formación académica y mi formación concreta de poner el cuerpo en los actos, lo que es una dictadura. Yo las conocí. Mi cuerpo tiene memoria. Y esto es una dictadura.
Para los burros que hablan por hablar, en ningún libro de filosofía política piden que una democracia pase a ser una dictadura solamente por la intervención militar. Ni Aristóteles ni nadie habló de eso. La dictadura se caracteriza, la cosa que da la cosidad de la dictadura es el autoritarismo, las formas brutales con las que se manejan las cuestiones públicas. No importa que haya militares o que no los haya. Eso no tiene nada que ver con la característica de democracia y dictadura. Hay que estudiar para dar la batalla y son ustedes los más jóvenes, los que tienen que estar menos de joda y formarse más. O hasta cuándo va a ser la otra generación la que tenga que dar la cara; son ustedes, hay que formarse, hay que tener sueños, hay que asumir la responsabilidad. Sino van a vivir por vivir pero no estarán vivos.
Eso es lo que está en juego hoy por hoy, de eso hay que ocuparse. Y ese desafío se da en todos los órdenes y cada uno tiene que asumir la responsabilidad. En mi caso, como dijera Haroldo Conti, como dijera Rodolfo Walsh, me toca la responsabilidad de todo intelectual, hablar cuando hay silencio o hablar cuando otros no pueden, por lo que fuera, muchas veces porque no tienen dónde hablar. Yo tengo dónde hablar. Y hasta que este viejo cuerpo me lo permita seguiré hablando y acompañando como hice durante toda mi vida, mis actos a mis palabras. Cuerpo y alma se dice, palabra y acto también hay que decir. Esta es la situación, no se dejen engañar, estamos viviendo una dictadura, distinta de otras, pero no quita que sea una dictadura. Son todas dictaduras, unas tienen más muertos, otras menos, otras tienen desaparecidos por miles y otras no, pero la forma, el espíritu de la época que están gestando es el de la dictadura.
Hay un filósofo que muy bien lo marca, se llama Hegel. Hegel habla de “el espíritu de la época”, cuál es el espíritu de la época, el rencor. Hay un terrible rencor del poder, porque no cambió la Argentina pero intentó cambios y para quienes son los poderosos del mundo, intentar los cambios ya causa la desazón que preludia la tormenta, el deseo de castigar a los que sueñan, por más que entre los que sueñan también se mezclen delincuentes.
Me importa un carajo la corrupción de los bienes materiales, qué pasa con el espíritu, qué pasa con los vínculos amorosos, el que roba, a la cárcel, pero el asesino tiene responsabilidades mayores, tendrán que responder porque la historia no olvida a los asesinos de un pueblo. Este país tiene historia, tiene memoria, están sembrando mucho, van a cosechar tempestades, lo dice La Biblia y lo dice la historia argentina.
En ese contexto y en esa complejidad un momento de alegría, porque sin alegría no se cambia el mundo, sin alegría no hay lucha, sin alegría no hay deseo, sin alegría no hay triunfo. Modesto el gesto de alegría de hoy, modesto como mis palabras, no tengo un gran medio de comunicación, no tengo la fuerza para modificar la realidad, pero no me callo, asumo mi responsabilidad en esta resistencia y no me quitan la alegría de haber participado hoy, con energía, pero con placer, vengo de una generación dura y moriremos duros y con los pies donde hay que tenerlos, sobre la calle.
Mi alegría es por la existencia en papel de esta revista. Cada vez que una revista con conciencia, hecha por periodistas con conciencia, toma estado público es un momento de felicidad para la cultura de ese país, es un momento de engrandecimiento de nuestra conciencia crítica, de nuestro deseo de construir un cielo en este infierno.
Brindo por la revista, me pone feliz saber que soy partícipe, humilde partícipe, desde mi lugar de testigo, de que haya nacido la revista. No ofendo, me animo a hablar y a decir, tomen conciencia, no se escondan en el ayer, todo cambio no es el bien, son las consecuencias del cambio las que pueden ser positivas o negativas.
Es cierto que el país ha cambiado, ha cambiado para la muerte, es cierto que el país ha cambiado, ha cambiado para que aparezca el rencor y no el amor. Es cierto que el país ha cambiado, la conciencia crítica se licúa, es cierto que el país ha cambiado, la gente tiene temor en la calle. Lo que no ha cambiado es que todavía somos capaces de tender la mano al compañero que más lo necesita.
Son la tercera generación, los chicos de la pobreza, las mujeres embarazadas, los discapacitados, siempre en el lugar de la pobreza. La pobreza en la pobreza, el amor sin respuestas, el amor lastimado. A ellos no los podemos dejar solos, sino para qué tiene razón la existencia en comunidad. Para vivir solos no necesitamos de nada ni de nadie, nos podremos morir en la soledad de la noche.
Pero insisto, tarde o temprano hay una respuesta que todos deberemos dar, qué hiciste con tu coraje, qué hiciste con tu amor cuando el pobre entre los pobres sufría. Y hoy el pobre, entre los pobres sufre y los dueños de la riqueza están mejor que antes y de toda esta situación de criminalidad, de injusticia, como corresponde en las buenas, también en las malas, hay un responsable final y es el Presidente, el Ingeniero Macri. Él es responsable de la muerte de Santiago Maldonado, él es responsable de la muerte de Rafael Nahuel, él es responsable de todos los heridos que están ocasionando estas represiones como el muchacho al que están operando el cráneo en este momento, como el periodista fotógrafo de Página 12 con sus 10 disparos en el cuerpo.
Esa es la situación. ¿Y el lunes qué? Cada uno tendrá que pensarlo y hacerse cargo de su responsabilidad. Hay una frase de Manuel Dorrego que es bueno recordar “no llores mañana lo que tuviste que hacer con tu valentía en tu hoy y no fuiste capaz de hacer”. El hoy es el lunes en la Plaza.(*)
Muchas gracias a todos por haberme escuchado.

Vicente Zito Lema

(*) Nota del editor: Se refiere a la movilización contra la Reforma previsional del lunes 18.12.2017.

Edición: Mario Hernandez

Desgrabación: Ana Laura Xiques

¿Por qué contra los mapuches?

Es el blanco elegido por el gobierno nacional y los medios oficialistas. Todos los pueblos indígenas de Argentina exigen lo mismo: territorio.

Tienen distintas metodologías de lucha, pero ninguna provoca tanto recelo (político, judicial, mediático, social) como el accionar del pueblo mapuche. “Terroristas”, “chilenos”, “mataron a los tehuelches”, son algunas de las definiciones que la voz oficial instaló en distintos momentos de la historia y se repiten hasta la actualidad. A dos meses del asesinato por la espalda de Rafael Nahuel y luego de la creación de un “comando unificado”, mérito de la ministra Patricia Bullrich, avanza en la criminalización. Racismo, derechos vulnerados y el fondo: el territorio en disputa.
Enero, agosto y noviembre de 2017. Tres momentos: feroz represión contra el Pu Lof en Resistencia de Cushamen (Chubut), desaparición de Santiago Maldonado y asesinato de Rafael Nahuel (en Villa Mascardi, Río Negro). Como nunca antes, los medios de comunicación hicieron foco en “los mapuches”. La situación mapuche se instaló, de la peor forma, en la agenda nacional.
Diana Lenton, doctora en antropología y docente de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, señala que la avanzada contra el pueblo mapuche tiene una base fundamental en el racismo. Explica que las comunidades mapuches tienen los mismos reclamos que el Pueblo Qom, pero expresan su mensaje de manera diferente, “de igual a igual” frente al no mapuche. “La mirada racista no tolera que un indígena se posicione de igual a igual”, afirma.
Lenton destaca que muchas personas suelen decir que nos son racistas porque “ayudan” a un grupo determinado, pero cuando el destinatario sale de esa situación todo cambia. “Toleran al ‘otro’ cuando está debajo de uno, pero no toleran que ese otro lo trate de igual a igual”.
Integrante de la Red de Investigadores en Genocidio y Político Indígena, agrega que existe una generación de dirigentes mapuches muy preparada, con formación política y universitaria, y eso aumenta el recelo racista. Y esos líderes mapuches tienen buen manejo de oratoria y de los medios de comunicación, con lo cual su discurso es más efectivo que quizá otros pueblos.

Territorios y corporaciones

Existe una coincidencia en que un elemento central es la disputa por el territorio, con actores que avanzan sobre los derechos indígenas (petroleras, mineras, grandes estancias; siempre en articulación con sectores políticos y judiciales). “Hay que tener presente qué empresas y qué actividades económicos quieren desarrollarse en los territorios donde viven las comunidades mapuches”, alerta Lenton.
Lefxaru Nawel, integrante de la zonal Xawvnko de la Confederación Mapuche de Neuquén, confirma el rechazo al fracking (en particular en Vaca Muerta), a la minería y a las represas, que desalojan e inundan territorios ancestrales. Y destaca otro factor particular del pueblo mapuche, las “recuperaciones territoriales”, cuando las comunidades identifican un lugar ancestral hoy en manos de grandes empresas o terratenientes, y deciden volver. Si bien existen algunas experiencias de recuperaciones territoriales de otros pueblos (comunidades pilagá en Formosa), es mucho más propio del pueblo mapuche. “Hace más de 25 años que las comunidades decidimos hacer uso efectivo de nuestros derechos y volver a los territorios que nos pertenecen”, aclara Nawel.

Colonización tardía

Lefxaru Nawel no duda de que en los últimos meses hubo una campaña política y mediática para criminalizar y reprimir a las comunidades originarias de la Patagonia. “Recién han pasado 130 años de la finalización de la conquista, en manos del Estado argentino, mientras los pueblos indígenas del norte argentino lo sufrieron hace 300 o 400 años, en manos de los españoles”, recuerda. Y, por otro lado, puntualiza que el pueblo mapuche tiene la particularidad de plantear la necesidad de una nación, no en términos secesionista, sino de soberanía en territorios, autonomías, con autoridades propias. “Es un planteo que lleva a un debate profundo sobre el estado plurinacional, quizá otros pueblos no lo proponen tan abiertamente y eso lleva a que sectores reaccionarios tomen posturas represivas”, afirma.

Indómitos y transfronterizos

Eduardo Hualpa es abogado especializado en derecho indígena, con más de veinte años de trabajo junto a las comunidades mapuche-tehuelche de Chubut. Cree que el recelo contra el pueblo mapuche tiene múltiples causas, entre ellas que se trata de “uno de los pueblos más aguerrido, más indómito, con sus líderes de alto perfil en espacios regionales, nacionales e internacionales”. Afirma que la política del gobierno nacional es “apuntar a la cabeza de los líderes mapuches y acallar reclamos”.
También señala la particularidad de la gran extensión territorial que abarcan las comunidades mapuches, con presencia en cinco provincias, lo que “le ha dado una gran dinámica, diversa en su lucha” y destaca que se trata del único pueblo que alza la bandera de las recuperaciones territoriales.
Destaca que también es muy notoria la presencia mapuche en los ámbitos judiciales. Hualpa es autor del libro “ Derechos Constitucionales de los Pueblos Indígenas” , donde descubrió que la mitad de las sentencias en causas indígenas obedecen a comunidades mapuches. Es el pueblo indígena que más litiga en los tribunales.
“Un factor a pens ar es que se trata de un pueblo transfronterizo (Argentina y Chile), al que le calzan muy bien las teorías de seguridad continental que promueve el Departamento de Estado de Estados Unidos”, alerta Hualpa, integrante de la Asociación de Abogados de Derecho Indígena (AADI).

Extractivismo y clase social

Adrián Moyano es licenciado en Ciencias Políticas y periodista, escribió tres libros sobre el pueblo mapuche y vive desde 27 años en Bariloche. Afirma que “la ofensiva y represiones” contra el pueblo mapuche tiene relación con la anunciada “lluvia de inversiones” que el gobierno nacional promete para la Patagonia. Y precisa que un actor de peso es el Eximb ank, organismo financiero público de Estados Unidos que financia inversiones de compañías estadounidense en el exterior. “Varios de esos proyectos transcurren en Neuquén, Río Negro y Chubut, y tiene relación con la explotación de hidrocarburos no convencionales y proyectos hidroeléctricos”, explica Moyano.
Precisa como ejemplo la intención de una represa sobre el río Corcovado, resistido por la población de la ciudad del mismo nombre y por la comunidad mapuche Pillán Mahuiza. Si bien el proyecto tiene casi dos décadas, busca proveer de energía a la compañía Aluar, anuncios oficiales señalan un intento de relanzamiento.
Moyano recuerda que el presidente Macri suele descansar en el country Cumelén de Villa la Angostura, que a poco de asumir mantuvo un encuentro con Joe Lewis, “señor feudal de la zona y, como Benetton, con control de naciente de aguas y proyectos hidroeléctricos”.
Un factor histórico que destaca es que el Gobierno “llegó al poder con el especial apoyo del sector social que se benefició con la Campaña del Desierto”. El caso más emblemático es el nombramiento del presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, al frente del Ministerio de Agroindustria. “La pertenencia a esa clase social de funcionarios importantes es un factor que explica el particular encono contra los mapuches, en el marco de un Gobierno que profundiza la estigmatización de los pueblos indígenas”, afirma Moyano.

El Comando de Bullrich

“Comando unificado”, fue el nombre elegido por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para bautizar un espacio impulsado por el gobierno nacional y articulado con los gobiernos de Neuquén, Río Negro y Chubut.
“Tras ocho años de una escalada de violencia creciente, la Ministra de Seguridad junto con los ministros de Gobierno de Chubut, Pablo Durán; de Seguridad de Neuquén, Jorge Lara; y el ministro de Seguridad de Río Negro, Gastón Pérez Estevan, crearon un comando unificado para el abordaje de la problemática. Con 96 causas judiciales en su contra, este grupo violento ha intensificado sus ataques, atemorizando a toda los ciudadanos”, anuncia el comunicado del gobierno nacional, fechado el 27 de diciembre de 2017.
Según el Gobierno, se registra “un incremento del accionar violento y delictivo de la organización Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), el brazo armado de un movimiento de liberación etnonacionalista denominado Movimiento Autónomo del Puel Mapu (MAP). La RAM y el MAP, y su organización madre localizada en Chile, la Coordinadora Arauco Malleo (CAM) promueven una lucha insurreccional contra los estados argentino y chileno que persigue el fin último de escindir los llamados ‘territorios ancestrales’ de ambos países, y confirmar un estado nuevo regido por un gobierno propio”.
También las denomina “organizaciones extremistas” y las acusa de recibir apoyo de “grupos anarquistas y de izquierda radicalizada que utilizan su nombre y sus símbolos para cometer actos violentos en las grandes ciudades”.
“RAM. Informe conjunto realizado por el Ministerio de Seguridad de la Nación y los gobiernos de Río Negro, Neuquén y Chubut”, es el nombre de la “investigación” que presentó Patricia Bullrich. Se trata de 180 páginas repleto de imprecisiones, datos falsos, suposiciones y apunta a los mapuches como enemigo interno, peligroso, terrorista. “La RAM estaría vinculada a comunidades aborígenes radicalizadas en las provincias de Rio Negro, Chubut y Neuquén (…) Desconoce el Estado Argentino, su organización, sus leyes, e instituciones tratando de imponer sus ideas de no pertenencia a la Nación Argentina por la fuerza y el temor (…) Actúan en la clandestinidad, con rostros cubiertos y portando armas de fuego, facas, hondas, bombas molotov, palos y piedras. Incendian propiedades, dañan instalaciones, roban ganado, cortan rutas y el suministro servicio eléctrico, amenazan a vecinos, intimidan y apedrean transeúntes, no permiten la libre circulación, balean, incluso matan”.
La segunda semana de enero, e l presidente Macri recibió a los gobernadores de Chubut (Mariano Arcioni) y de Río Negro (Alberto Weretilneck), en sus vacaciones en el country Cumelén de Villa la Angostura. “La cuestión mapuche” (como la llaman desde el poder) estuvo en la agenda política.
“Una vez más, asistimos a una medida del gobierno nacional y los gobiernos de Neuquén, Río Negro y Chubut, que atenta contra leyes y principios democráticos consagrados en la Constitución Nacional, configurando un paso más en la escalada de hostigamiento a los pueblos indígenas”, alertó la Mesa Nacional para la Paz y el Diálogo Intercultural, integrada por Adolfo Pérez Esquivel, Fernando Pino Solanas, Roberto Gargarella, Diana Lenton, Maristella Svampa y Alcira Argumedo, entre otros.
Del espacio también participan la Confederación, el Parlamento Mapuche-Tehuelche de Río Negro y el Parlamento Plurinacional. “La creación de un comando con fuerzas de seguridad de carácter interprovincial y nacional cuyo objetivo es combatir a este ‘enemigo mapuche’ recuerda la terrible historia del terrorismo de Estado en Argentina”, advirtieron las organizaciones indígena.
La Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi), junto a medio centenar de organizaciones, también repudió la creación del comando unificado: “El Estado, nuevamente, intenta demonizar y dividir a diversos movimientos populares, con el objetivo de crear un enemigo interno, un chivo expiatorio que justifique el vertiginoso aumento de la represión a la protesta social ante las permanentes medidas antipopulares que lleva adelante”.

Haciendo el juego

El 10 de enero, el Movimiento Mapuche Autónomo de Puelmapu (MAP) emitió un comunicado en el que denunció la política represiva del gobierno nacional. Y también reivindicó el accionar de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), justamente el espacio que más cuestiona el Gobierno y eje de la campaña mediática de los grandes diarios.
“La Resistencia Ancestral Mapuche ha existido, existe y existirá mientras el pueblo mapuche siga siendo oprimido por el estado argentino (…) Ante estas amenazas, la violencia y el avasallamiento ejercidos por el estado y el capitalismo trasnacional es que se han organizado grupos de resistencia en comunidades y zonas rurales para defender el territorio mediante acciones de sabotaje”, explica el comunicado.
Señala que el MAP es “una propuesta política y filosófica” y sostiene que “las comunidades alineadas a la propuesta política del MAP reconocen la existencia de la Resistencia Ancestral Mapuche”.
Ninguna comunidad mapuche firma el comunicado. Ninguna comunidad mapuche se identifica como parte de la RAM en público.
El comunicado del 10 de enero es funcional a la estrategia represiva del gobierno nacional.
En septiembre pasado, una decena de organizaciones mapuches había emitido un inusual y duro comunicado: “Frente al drama o grotesco llamado Resistencia Ancestral Mapuche”.
“No avalamos, no justificamos, no adherimos a ninguna RAM. La RAM y la contracara que es el plan de represión desde el Estado, es síntoma de la falta de diálogo político institucional serio. El pueblo mapuche reivindica los derechos humanos y la no violencia como método de reivindicación de derechos”, destaca el escrito firmado por referentes de la Coordinadora del Parlamento Pueblo Mapuche-Tehuelche de Río Negro, de la Confederación Mapuche Neuquina (Zonales Xavnko, Pewence, Willice y Lafkence) y comunidades de Sata Fe, Chubut y Santa Cruz. Cuestionaron duramente a la RAM: “Hoy surge una expresión que se autotitula mapuche, que a través de comunicados y panfletos se responsabiliza de acciones directas, en ataques físicos y destrucciones materiales de supuestos ‘objetivos enemigos’ que de lo grotesco y evidente parece más el accionar de un grupo de inteligencia que de la lucidez y capacidad de resistencia cultural que ha tenido el pueblo mapuche en décadas de represión”.
Recordaron que el pueblo mapuche siempre reivindicó el diálogo cómo forma de resolución de conflictos. “Como es posible que panfletos absurdos que reivindican violencia, agresiones físicas, incendios de bienes de trabajadores, de espacios públicos, sean propio de personas que se identifican con una historia como la mapuche. Creemos que es obra de un montaje, del accionar de los servicios de inteligencia de los estados argentino y chileno, para implementar un plan de aplicación de la ley antiterrorista; construyendo así un escenario que justifica una política represora”.

Violencia e impunidad

El 17 de enero la comunidad mapuche Las Huaytekas denunció un ataque incendiario en sus viviendas. La policía no dio con los atacantes. Y el Poder Judicial tiene sus tiempos (largos) para investigar los hechos de violencia contra mapuches.
El jueves 25 de enero se cumplen dos meses del asesinato por la espalda de Rafael Nahuel, joven mapuche, en manos de la Prefectura. A pesar de que la bala mortal es del mismo calibre de las utilizadas por la fuerza estatal, ningún efectivo fue procesado por el juez Gustavo Villanueva ni apartado de su cargo por Patricia Bullrich.
Habrá manifestaciones en la ciudad de Buenos Aires, en la capital neuquina y en Bariloche. “Fue el Estado, fue prefectura. Ni un muerto más por la defensa del territorio”, invita la convocatoria en Bariloche, impulsada por organizaciones sociales, comunidades mapuches, familiares y amigos de Rafael Nahuel.
El afiche de invitación muestra una foto de Rafael Nahuel en una marcha, tocando un ñolkiñ (instrumento mapuche). En letras rojas, dos palabras, resumen lo que exige la familia Nahuel y también una deuda histórica con los pueblos indígenas: “Justicia ya”.

Darío Aranda
lavaca.org

La estrategia de ir contra los testigos

El Gobierno denunció a los mapuches que declararon en el caso Maldonado

En línea con el interés oficial por desligar del caso a Gendarmería, el Ministerio de Seguridad presentó una denuncia penal por "falso testimonio" contra siete integrantes de la comunidad mapuche de Cushamen y contra un amigo de Santiago Maldonado.

El Gobierno no esperó a que finalice la feria para retomar la estrategia judicial que busca despegar a la Gendarmería de la causa en la que se investiga la desaparición forzada y la muerte de Santiago Maldonado. El Ministerio de Seguridad, encabezado por Patricia Bullrich, presentó una denuncia por "falso testimonio" contra siete integrantes de la comunidad mapuche de Cushamen y contra Ariel Garzí, amigo de Santiago. La demanda los acusa de sostener "compendios de mentiras", que para la Casa Rosada "fueron condición necesaria para la posterior construcción del relato por parte de determinados funcionarios judiciales, referentes políticos y miembros de organizaciones de derechos humanos". Cuando comience el año judicial, la Justicia de Esquel deberá definir si da curso a la denuncia contra los testigos de la represión de la Gendarmería. También está en manos del juez Gustavo Lleral definir el cambio o no de carátula del caso, completar la reconstrucción de lo ocurrido el 1 de agosto en el Pu Lof y analizar el rol que cumplió en el lugar jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad, Pablo Noceti.
La denuncia contra los testigos de la comunidad aparece un día después de que el Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas levantara la "acción urgente" que instaba a localizar el cuerpo del joven. El comité de la ONU también le exigió al Estado que cumpla con su obligación de "proteger a los allegados de la persona desaparecida y a sus defensores, a los testigos y a toda persona que participe en la investigación, de cualquier forma de presión, acto de intimidación o de represalia". Tras esa exigencia del comité internacional, el Gobierno presentó una denuncia con una figura penal que contempla penas de hasta 10 años. Una semana atrás, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos también había decidido levantar la medida cautelar por la desaparición de Maldonado, advirtiendo que "corresponde al Estado investigar de manera exhaustiva la totalidad de las hipótesis que han surgido a lo largo de la propia investigación".
La presentación, que corre paralela a la causa por la desaparición forzada, la realizó el secretario de Coordinación con los Poderes Judiciales del Ministerio de Seguridad, Gonzalo Cané, el mismo que estuvo a cargo de dirigir la estrategia de defensa de la Gendarmería por la represión ilegal del 1 de agosto que desembocó en la muerte de Maldonado. La acción judicial, que fue debatida a nivel de Jefatura de Gabinete, según el diario La Nación, que tuvo acceso exclusivo a la denuncia, afirma la presunción de que la muerte de Santiago Maldonado ocurrió por un "ahogamiento accidental", obviando el contexto represivo en el que se produjo el fallecimiento.
Precisamente, los testimonios de los integrantes del Pu Lof presentes en la represión a la comunidad Matías Santana, Claudina, Ailinco y Lucas Pilquiman; de las voceras Soraya Maicoño Guitart, Adriana Baigorria y Andrea Millañanco, y del amigo de Santiago, Ariel Mariotto Garzí, fueron los que permitieron volcar en el expediente el agresivo despliegue de la Gendarmería sobre el Pu Lof, un operativo ilegal reconocido por el primer juez de la causa Guido Otranto, quien solo había ordenado despejar la ruta 40. Es sobre ellos que Cané presentó la denuncia por el artículo 275 del Código Penal por "falso testimonio", que contempla penas desde un mes a 10 años de prisión.
Quienes decidirán a la vuelta de la feria judicial si dan o no curso a la denuncia presentada en los tribunales federales de Esquel por el subordinado de Bullrich son la fiscal Silvina Ávila, quien continúa al frente de la instrucción en la causa Maldonado, y el juez Otranto, apartado de la investigación sobre la muerte del joven por "manifiesta parcialidad". Por su parte, el juez Lleral también tiene pendientes varias medidas para investigar el contexto en el que se produjo la muerte de Maldonado y a partir de allí definir si modifica la caratula de "desaparición forzada" por la de "averiguación de muerte", como solicitó la fiscal.

Página/12

Enero de 1936: huelga de la construcción y huelga general



El 27 de enero se ponía fin a la huelga de la construcción después de desplegar una gran combatividad que permitió importantes conquistas y el fortalecimiento de la organización obrera.

La huelga de los obreros de la construcción(1) de Buenos Aires comenzó el 23 de octubre de 1935, se extendió a lo largo de casi 100 días y congregó a unos 60.000 obreros que representaban el 95 % de los ocupados en la rama.
Esta huelga fue planificada y organizada en distintas asambleas convocadas por la Federación Obrera de Sindicatos de la Construcción (FOSC) durante el mes de septiembre de 1935. La FOSC reunía de manera centralizada a distintos sindicatos con jurisdicción en la Ciudad de Buenos Aires.
Luego de la fuerte contracción provocada por la crisis del 29, la industria de la construcción alcanzó un enorme empuje a partir de los años 1933 y 1934, incorporando grandes destacamentos de trabajadores desocupados. La rama estaba monopolizada por un puñado de grandes empresas de capital extranjero, principalmente alemanas, y entre las principales se encontraban Siemens Baunion, Wayss & Freytag, Polledo y Cía.; las vinculaciones de la Compañía General de Construcciones y la Siemens Baunion con el régimen nazi eran por todos conocidas. Añorando los campos de concentración de su patria, las obras en construcción trataban de emularlos: 11 horas diarias promedio, en algunos casos 14, pésimas condiciones de seguridad y salarios bajísimos conformaban la realidad del obrero de la construcción.
Los trabajadores reclamaban el reconocimiento del sindicato, mejoras salariales, de condiciones de trabajo, reducción de la jornada laboral, descanso dominical y seguro por accidentes de trabajo, exigencias que se presentaban en momentos en que la industria de la construcción vivía un importante crecimiento y, por tanto, una gran demanda de fuerza de trabajo. El derrumbe en un obraje del barrio de Belgrano, con el saldo de víctimas fatales, terminó siendo el detonante de una bronca que a esa altura era prácticamente incontenible.
A partir de las asambleas previas al inicio del conflicto se puso en pie un comité de huelga integrado por 12 miembros entre los que se encontraban los dirigentes comunistas Fioravanti, Chiarante, Ortelli, Íscaro, Fabretti y Burgas, lo que demostraba el enorme peso alcanzado por el Partido Comunista en el gremio de la construcción.
La masividad de la huelga fue garantizada a través de multitudinarios mítines y asambleas obreras realizadas en Plaza Once y en el estadio Luna Park, de dimensiones nunca antes vistas en el país tratándose de actos realizados por una misma organización sindical. Junto a esto, se constituyeron comités de empresa y piquetes huelguísticos, comisiones de mujeres y de familiares de los trabajadores en paro, organismos populares de solidaridad y comedores colectivos que sostuvieron la lucha a partir del aporte de pequeños comerciantes. De este modo, se evitó que el conflicto se agotara por hambre. También se organizaron colonias de vacaciones para garantizar el esparcimiento de los hijos de los obreros que durante gran parte de la huelga se encontraban en receso escolar.
Mientras las empresas rechazaban el pliego de reivindicaciones levantado por los obreros en lucha, el repudio masivo contra aquellas patronales creaba un clima favorable para la continuidad de la huelga. El sindicato desplegó entonces la publicación de su órgano de prensa, El Andamio, y organizó las secretarías en los barrios que, durante la huelga, se convirtieron en comités de lucha zonales encargados de organizar piquetes y actividades de solidaridad.
Ante el fracaso de distintos intentos de conciliación, en una asamblea del 15 de noviembre, miles de obreros reafirmaban la huelga general de toda la rama, incorporándose obreros de la mayoría de los oficios.
En diciembre, crecieron los choques callejeros entre los huelguistas y la policía en distintos puntos de la ciudad. La Legión Cívica Argentina redoblaba sus ataques y casi un centenar de obreros eran detenidos en Villa Devoto, pero la solidaridad con la huelga crecía a nivel nacional e internacional. Se realizaron actos, festivales e importantes eventos que involucraron a figuras del arte y la cultura; en Uruguay fue convocada una huelga en solidaridad con sus hermanos argentinos.

La huelga general del 7 y 8 de enero de 1936

El 21 de diciembre se realizó un acto en Plaza Once organizado por el Comité de Solidaridad, un activo organismo presidido por Mateo Fossa, obrero del gremio de la madera y quien se transformaría en un destacado dirigente del trotskismo en la Argentina. Participaron del acto, según los organizadores, 100.000 trabajadores, y en él se discutió la continuidad de la huelga.
Finalmente, y tras un largo debate, el 4 de enero, una nueva reunión resolvió convocar a la huelga general del 7 de enero de 1936, que se extendió hasta el día 8 en repudio a la represión y exigiendo la libertad de los detenidos durante el día anterior.
Con la huelga general, la ya heroica lucha reivindicativa de los obreros de la construcción se transformaba en una verdadera batalla obrera y popular que emulaba las jornadas de lucha de 1919, la Semana Trágica. La huelga económica adquirió entonces la naturaleza de una acción política de la clase obrera. En efecto, por sus métodos, extensión y radicalización, la huelga general del 7 de enero de 1936 se convirtió en una huelga general con características semiinsurreccionales: movilizaciones de masas, enfrentamientos con las fuerzas represivas y el despliegue de una gran solidaridad obrera y popular, poniendo de manifiesto el peso social conquistado por la clase obrera.
Desde las primeras horas de aquel 7 de enero, los obreros de la construcción con el apoyo de otros sectores de trabajadores y de amplios sectores populares se fueron haciendo del control de una gran parte de la ciudad. Los piquetes y las barricadas se propagaron; los colectiveros y tranviarios paralizaron gran parte del transporte y comenzaron las refriegas y enfrentamientos; la violencia de las masas ganaba en intensidad y las fuerzas policiales comenzaban a replegarse ante las acciones de los huelguistas. Las mujeres y los jóvenes desplegaron una energía inaudita y su papel comenzaba a ser un elemento clave de la huelga; se apedrearon trenes, se quemaron ómnibus, algunos trenes lecheros fueron volcados y su carga repartida entre los vecinos.
El centro de gravedad de la huelga general se encontraba en lo que se llamó el “Cinturón Rojo obrero y popular”, un enorme espacio geográfico que se extendía por los barrios de Saavedra, Chacarita, Villa Crespo, Paternal, Villa Devoto, Villa Urquiza, Villa del Parque, Flores, Villa Luro, Liniers, Mataderos, Parque Chacabuco, Parque Patricios, Boedo y Nueva Pompeya.
Mientras gran parte de la ciudad quedó en manos de los huelguistas, el Estado comenzaba a preparar el contraataque; pero la respuesta de las masas no se hizo esperar y desde la tarde volvieron a arreciar los enfrentamientos armados. La huelga fue una batalla abierta en las calles.
Sumado a las detenciones en los enfrentamientos, se inició una feroz persecución sobre los dirigentes de la huelga y los allanamientos se multiplicaban. Al fin del día 7, el número de presos ascendía a varios centenares. Frente a esta situación, los miembros del Comité de Defensa y Solidaridad que no habían sido detenidos declararon la continuidad de la huelga por otras 24 horas exigiendo la libertad de los presos.
Finalmente, la batalla obrera y popular del 7 y 8 de enero obligó al Estado a intervenir a favor de los huelguistas e impuso la liberación de todos los detenidos. A su vez, logró fracturar la unidad patronal y las empresas debieron pagar los salarios reclamados por los huelguistas, la jornada de 8 horas, la formación de comisiones internas por obra y la convocatoria a paritarias para discutir salarios y condiciones de trabajo. Se reconoció el derecho de los dirigentes a ingresar a las obras para organizar a sus trabajadores y se otorgó el reconocimiento a la Federación. El 27 de enero, una nueva asamblea reunida en el Luna Park resolvió levantar la huelga tras 96 días de duración.
El contundente triunfo obrero impulsó y extendió la organización de los trabajadores de la construcción en todo el país. Los albañiles, que habían recibido el apoyo de la mayoría de los obreros especializados en la construcción, conquistaron la posibilidad de crear un sindicato verdaderamente nacional.(2) La clase obrera retomaba así con renovada vitalidad la tradición y las prácticas de acción directa heredadas de la experiencia anterior: huelgas y piquetes, movilización callejera y métodos de autodefensa, solidaridad activa y agitación, demostrando su decisivo poder en la sociedad.

Alicia Rojo
Historiadora UBA

Notas:

1. Seguimos en los hechos la reconstrucción realizada por Nicolás Iñigo Carreras en su libro La estrategia de la clase obrera, 1936. Ver también: Alicia Rojo, Josefina Luzuriaga, Walter Moretti y Diego Lotito, Cien años de historia obrera en la Argentina 1870-1969, de los Orígenes a la Resistencia, Ediciones IPS, 2017 del cual fue adaptado el presente relato.
2. Para un análisis de la actuación de las direcciones en este proceso y las perspectivas que se abrieron ver el citado Cien años… pág. 247 y siguientes.