El gobierno macrista y los gobernadores han desencadenado un ajuste brutal sobre el movimiento obrero y, en particular, sobre los trabajadores del Estado. En cuatro meses, despidieron a 40.000 estatales nacionales, provinciales y municipales. Al resto, el ajuste les llega vía reducción salarial a partir de la inflación, la devaluación y los tarifazos.
Sin embargo, el ajuste muestra su peor cara cuando se lleva la vida de los compañeros. En estos días de gobierno, ha transcendido que por lo menos 4 compañeros perdieron la vida en distintas circunstancias: se ha suicidado un compañero luego de enterarse que fue despedido, ha sufrido un infarto una trabajadora a la que sólo le depositaron $40 de salario, lo mismo sucedió a otra compañera que luchaba por su reincorporación y la de su marido (Melisa Bogarin), y de igual forma le ocurrió a un trabajador despedido que estaba de licencia por enfermedad de largo tratamiento.
Las muertes no pueden dejar de ser consideradas en el marco de la precarización laboral en la que se encontraban. De hecho, durante el gobierno kirchnerista se sucedieron muertes entre los estatales que fueron consecuencia directa de la relación laboral en la que se encontraban: es el caso del femicidio de Laura Iglesias (http://www.po.org.ar/prensaObrera/1337/mujer/justicia-para-laura-iglesias-scioli-y-casal-son-responsables) o la muerte de Walter Leemejis de ATE Educación (http://www.po.org.ar/prensaObrera/digital-2015-09-14/politicas/el-ajuste-de-scioli-de-lucia-mata).
En el caso del PRO, tenemos el nefasto antecedente de la muerte de Ayala, trabajador de limpieza del Teatro Colón, aplastado por un montacargas (http://www.po.org.ar/prensaObrera/1297/sindicales/teatro-colon-privatizacion-tercerizacion-y-muerte). Es tal la despreocupación del macrismo por la vida de los compañeros, que cuando un periodista lo interpeló al propio Macri por la muerte de la auxiliar de escuela en Mar del Plata, respondió cínicamente: “Te la debo. No estoy en tema.”
La conclusión es que todos estos casos se trataron de muertes evitables. Ya sea por las pésimas condiciones de trabajo o por la conmoción que implica el ajuste, los distintos gobiernos han dado cuenta que la necesidad del ajuste está por encima de la vida de los trabajadores.
Desde Tribuna Estatal reclamamos:
- Pase a planta permanente de todos los trabajadores y la prohibición de los despidos.
- Comisiones de trabajadores para garantizar las condiciones de trabajo.
- Juicio y castigo a los responsables de las muertes de trabajadores.
Francisco Travía
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