Fuera Julián Dindart de la Comisión de la Mujer del Congreso

Soledad Sosa, autora del presente artículo y diputada nacional del PO-FIT, es integrante de la comisión de la mujer en la cámara de Diputados de la Nación

En la Comisión de Familia, mujer, niñez y adolescencia de la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación el oficialismo juntó voluntades políticas para designar como presidente al diputado nacional Julián Dindart, del bloque de la UCR. Su designación fue acordada por todos los bloques con representación en la comisión con excepción del Partido Obrero en el Frente de Izquierda.
El nombrado presidente es quien en 2012, siendo Ministro de Salud de la provincia de Corrientes, se ganó el repudio social por su aberrante afirmación de que las "adolescentes se embarazan porque tienen un recurso económico como premio" (La Razón, 19/03/2012). Esta declaración fue hecha con motivo de una entrevista que le realizaron ese año por el caso de una niña de 11 años que quedó embarazada a causa de una violación. No es la primera vez que un funcionario de gobierno hace declaraciones de este tipo, como cuando justifican a violadores o abusadores de menores detrás de “patrones culturales”, o en este caso explicando el embarazo adolescente como una norma entre los pobres para acceder a un miserable subsidio. La razón es que amparan un régimen social que mantiene en un rol subordinado y de opresión a la mujer, tanto en la producción (con salarios más bajos y los trabajos más precarios), como en el plano social y político, siendo funcional a los objetivos de reproducción del sistema capitalista.
En el prontuario de Dindart debe contarse también su rechazo público al fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que en ese mismo año había avalado el aborto para dos niñas embarazadas producto de una violación. El hombre es un oponente al cumplimiento del aborto no punible consagrado por ley. Dindart es un hombre de la Iglesia Adventista, que considera al sexo premarital como una práctica “contraria a la expresa voluntad de Dios” y sostiene que “las prácticas homosexuales (gays y lesbianas) y la bestialidad se encuentran entre las perversiones más obvias del plan original de Dios” (Declaraciones Oficiales de la Iglesia Adventista del Séptimo Día: http://www.libertadreligiosa.org.ar/web/DeclaracionesOficiales.htm#Conductasexual).
La designación de Dindart al frente de la Comisión refuerza una clara orientación para las mujeres y las familias: la subordinación a preceptos religiosos y el disciplinamiento y tutelaje por parte del Estado. El sometimiento de la mujer constituye una “cuestión de Estado” en un contexto de crisis social de gran alcance, con despidos, suspensiones, tarifazos y un aumento de la carestía, que violenta nuestras condiciones de vida y vulnera todos nuestros derechos. Esta coincidencia de fondo se expresó en la votación de Dindart por parte de oficialistas y “opositores”: desde el FPV, el PJ, el Frente Cívico y el masismo, hasta Libres del Sur.
Las movilizaciones masivas por el vigente #NiUnaMenos en todo el país –que volvió a expresarse en la marcha por el día internacional de la mujer trabajadora o en las marchas contra los femicidios de las mendocinas en Ecuador- han sido olímpicamente ignoradas por los gobiernos nacional y provinciales, que continúan sin dar respuesta a nuestros reclamos. La Comisión de Mujer y familia es el ámbito dentro del Congreso donde se discutirán estos problemas de fondo. Se trata de una comisión clave para el avance de uno de los reclamos más urgentes del movimiento de mujeres: la aprobación del proyecto de ley por la Interrupción Voluntaria del Embarazo de la Campaña Nacional por el derecho al Aborto para terminar con la principal causa de muerte materna en la Argentina. No puede estar precedida por un hombre del clero con un currículum en misoginia como Dindart.
El bloque del Partido Obrero en el Frente de Izquierda ha presentado al Presidente de la Cámara de Diputados un pedido de remoción de Dindart del cargo de presidente y la expulsión de dicha comisión. Llamamos a todas las organizaciones de mujeres a materializar este repudio en una campaña de pronunciamientos y reforzar más que nunca la lucha por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito y todos los derechos de las mujeres trabajadoras.

¡Vamos por nuestros derechos!

Soledad Sosa, secretaria adjunta CTA Mendoza y diputada nacional FIT-PO