Apoyados, en la indefensión programada de la clase trabajadora, por el Peronismo demagógico en el Gobierno, unido con su Icono intocable la Oligarquía, máxima beneficiaria de la estafa, la carga de la deuda agigantada, castigara como siempre, a la inmensa mayoría de trabajadores y humildes.
Como el cuentito de lo Nacional y Popular, se hunde en las aguas turbias de Chevron, Monsanto, Barrick Gold, las sojeras envenenadoras y depredadoras, la inflación indetenible, el pago vergonzoso a Repsol, la corrupción interna en el seno de los burócratas del Gobierno y sus amigos capitalistas.
Sumemos además, la fuga gigante de las divisas, durante el Kirchnerismo, muy superior a la Deuda Publica Argentina.
Fuga, cuyo monto exacto se debe investigar, pues si bien oficialmente se reconoce, que llego a 180 000 millones de dólares, otras fuentes más confiables, las hacen llegar a más de 400.000 millones.
Mientras nos cuentan, que salvaron los fondos de las AFJP, de los bolsillos de los Bancos Privados, olvidan que mantienen viva, a toda costa, la fraudulenta ley de Entidades Financieras, que colaboró activamente con la fuga de divisas.
Apoyados en la Ley 21.526 de Entidades Financieras, impuesta por la dictadura, en 1977, y pensada por el oligarca Martínez de Hoz, una ley dictada por un gobierno de Facto, en realidad un decreto, se mantuvo inamovible durante los 11 años de Kirchnerismo, durante los cuales en su mayor parte, ambos Kirchner dispusieron de la mayoría absoluta en el Congreso, para anularla o modificarla.
Sumemos el estancamiento permanente de la pobreza, pese a la limosna de la Asignación Universal, que desde luego, nunca puede modificar la condición de los pobres.
Agreguemos la situación angustiosa de los jubilados, de los cuales el 95 % no alcanza a cubrir sus necesidades básicas, especialmente luego que la inflación, termino por reducir sus ingresos.
Finalmente el comienzo de una crisis financiera, grave dentro de un sistema capitalista, como el de este Gobierno, y que ya muestra el desempleo, como una de sus consecuencias.
Es poco lo que le queda a Cristina, para decir y engañar en sus discursos cargados de olvidos fundamentales, como ser jamás mencionar, el monto actual total de la deuda pública, para no asustar a la “gilada”. Y menos todavía, referirse al carácter de fraudulenta, que tiene esa deuda y que no se debe pagar.
Eso sí, no abandona el cuentito del mega canje del 2005, de Kirchner, Lavagna y Nielsen, y su ampliación del 2010, a los que se refiere diariamente, ocultando al mismo tiempo, el fracaso y las duras condiciones contra la Argentina, que Néstor y Cia, aceptaron en aquella ocasión y que llevaron a aumentar al día de hoy, la deuda pública, a cifras superiores, a la de la fecha del Mega canje y eso pese a los intereses cuantiosos pagados.
Y dentro de las condiciones aceptadas por Néstor, está la continuidad de establecer a Nueva York, cono la sede jurídica obligada, para dirimir las cuestiones que se presenten. Motivo este por el cual hoy en día, estamos nuevamente al borde del Default.
Los trabajadores y los humildes, que en la Argentina son más del 85 %, de la población total y que votan a un político de clase media, como los Kirchner y como todos los anteriores, desde Perón para abajo, deben saber a lo que se exponen.
Deben saber, que cuando estos políticos negocian, en sus mentes y ambiciones, están primeros ellos, luego la Oligarquía a quien entronizan y admiran, y para nada los intereses y necesidades del pueblo trabajador, que les es ajeno por clase y educación.
Los trabajadores deben pensar seriamente, que fueron y serán los “·pagadores seriales”, si siguen depositando su voto a favor de los políticos, que representan a las clases enemigas .Si piensan seguir dejándose estafar, por los “cuenteros seriales “en los Gobiernos.
Desde que la Oligarquía cedió el Poder Ejecutivo, a sus testaferros de la clase media, es decir desde Perón a Cristina, todos los presidentes que tuvo Argentina, quizás siendo benevolentes, con la excepción de Illia y Campora, han engañado sin vergüenza a su pueblo.
De todos los gobiernos, que tuvieron relación con la Deuda Publica Argentina, el más demagógico, fue el de los Kirchner, pues aquellos que originaron la Deuda y los que la ampliaron, antes del gobierno Kirchnerista, no se jactaron de su carácter Nacional y Popular, solo se limitaron como integrantes de la Clase Rica y Clase Media Altas, a cumplir con su función de cipayos obedientes, del capitalismo financiero. Pero todos ellos, en conjunto con Kirchnerismo incluido, cargaron sobre las espaldas de los trabajadores, nuevamente el peso total de la deuda y su pago.
Hersh Zakheim
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