El referente del Partido Obrero también señaló que Trump es “el emergente de una crisis capitalista mundial”, y criticó los elogios de CFK al presidente electo en EEUU.
Jorge Altamira afirmó que la crisis abierta en el macrismo, luego de la victoria electoral de Donald Trump, “demuestra que tenemos un gobierno absolutamente colonial”. Fue en el marco del debate televisivo del pasado sábado 12, en el programa “Todo en uno” de América 24.
Altamira hizo así referencia al panorama problemático abierto para Mauricio Macri y la canciller Susana Malcorra, que habían apostado públicamente a una victoria de la demócrata Hillary Clinton; y contrastó el cuadro de crisis en Argentina con la actuación del gobierno alemán de Angela Merkel, que profundizó sus críticas a Trump luego de su triunfo en las elecciones norteamericanas.
A su turno, el referente del Partido Obrero señaló que con la victoria del magnate “asistimos a una crisis política enorme, porque Trump es el emergente de un impasse del capitalismo mundial, que está participando en ocho guerras en este momento.”
En este cuadro señaló los profundos límites del macrismo, que apuesta al ingreso de capitales especulativos a la Argentina, “creyendo que la tasa de interés –a nivel internacional- se va a quedar por el resto de la eternidad al 1%, y los dólares van a venir a la Argentina”. Altamira recordó que una apuesta similar había desarrollado el chavismo con el petróleo, cuyo precio luego cayó estrepitosamente. “Esta tendencia que se ha abierto liquida las fragilísimas bases del proceso de endeudamiento y de especulación del macrismo; le corta las alas. Vamos a una crisis de fondo. Porque el macrismo es nada más que este ingreso de capital especulativo, y un robo a mano armada.”, afirmó Altamira.
“Trump va a hacer lo que dice”
Altamira caracterizó el derrotero que llevó al desenlace electoral norteamericano, señalando que “Desde la crisis del 2007 en adelante, se han gastado billones de dólares en rescatar bancos y empresas, y la economía no se mueve. Y Hillary Clinton representaba la continuidad de una economía que no se mueve. Y no solo que no se mueve, sino que ha creado enormes burbujas: por ejemplo, la bolsa de Nueva York, el ingreso de capitales a la Argentina, en cualquier momento estallaban y se llevaban puesto de nuevo a los principales países como en el 2008.”
El dirigente de izquierda completó el cuadro señalando el altísimo nivel de la deuda pública norteamericana (125% del PBI, cerca de 12 billones de dólares), la crisis industrial y de infraestructura, la prolongada reducción de los salarios (desde los años ’70), el crecimiento del desempleo y el trabajo descalificado, la caída de las inversiones productivas y la subsecuente reducción de la productividad del trabajo.
“Trump ha dicho que va a hacer un default parcial de la deuda. ¡Es un Rodríguez Saá!”, afirmó Altamira, que caracterizó el programa del presidente por asumir como “una guerra comercial y financiera contra las potencias rivales -lo que tendría como un eje la devaluación del dólar-, complementada con una guerra de tipo social, porque el hombre es un fachista”.
En polémica con la hipótesis de que el capitalista inmobiliario podría moderar en su gobierno este programa, Altamira sostuvo que “Trump va a hacer lo que dice. Y la razón es que él es una respuesta a este impasse capitalista. Él no puede evadir esa respuesta; si no da esa respuesta, se hunde.”
Durante el programa se exhibieron declaraciones de la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, elogiosas del triunfo de Trump, señalándolo como un voto contra el establishment y “la expresión de lo que el pueblo siente económicamente”. El referente del Partido Obrero señaló que, por el contrario, Trump no planea elevar el salario mínimo (una consigna popular de la clase obrera norteamericana), y se dispone a liquidar el sistema universal de salud: “¿A ustedes les parece que eso es para los trabajadores? ¡Es una estafa política! Y hay que ver la dimensión fachista del tipo.”
Altamira también hizo referencia al posicionamiento de los explotados de Estados Unidos frente a la crisis social: “El sector popular que votó a Trump lo votó porque él dijo que la economía no anda, no hay empleo y todo lo demás. El sector popular que votó a Clinton dijo ‘yo a un fachista no voto’. Ambos mezclaron en su demagogia política, determinados aspectos. Ahora vamos a ver lo que ocurre con el proceso efectivo. Porque vamos a ver una crisis de magnitud.”
Tomás Eps (@tomaseps)
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