El Parlamento aprobó una ley para que se paguen antes del 18 de diciembre, con el objetivo de “fomentar el consumo”. Sin embargo, se estima que entrará en vigencia el año que viene. En Argentina, muchas empresas pagan los aguinaldos cuando quieren. Los contratados y los tercerizados son los más afectados. La huelga en Pepsico y Kraft por el aguinaldo de los tercerizados y un bono.
Esta semana se aprobó, en el Senado de la Nación, una ley que obliga a las empresas privadas a pagar el aguinaldo antes del 18 de diciembre. El proyecto, impulsado por el senador radical “Nito” Artaza, modifica el artículo 122 de la Ley de Contrato de Trabajo reformada en 1976. La fecha para el pago de la segunda cuota del Sueldo Anual Complementario, actualmente fijada el 31 de diciembre, ahora “tiene vencimiento el dieciocho (18) de diciembre de cada año”.
Según Artaza, el adelanto “tiene como finalidad que los trabajadores reciban su dinero una semana antes de Navidad, con el fin de impulsar el turismo y el consumo navideño”. Tampoco se podía esperar una motivación puramente “pro obrera” del senador radical.
La medida, sin dudas, favorecerá a más de seis millones de trabajadores, la mayoría afectados por una inflación cercana al 40%, que ha llevado a un malestar creciente a fin de año. El rechazo al impuesto al salario, y el pedido de un bono de fin de año, tiñeron los últimos días de diciembre. Las cúpulas sindicales levantaron las medidas anunciadas ante una concesión oficial que solo alcanza a un 10% de los trabajadores.
Será una forma de encarar los gastos que imponen las fiestas de fin de año.
La ley y la trampa
Como siempre, las concesiones que hacen desde el gobierno o el parlamento hacia los trabajadores, tienen su “letra chica”.
La primera, es que la ley tiene que espera la promulgación del Gobierno nacional para hacerse efectiva. “Quizá sea difícil que la ley esté vigente desde este mismo año, pero lo bueno es que sí o sí desde el año que viene el aguinaldo deberá ser pagado los 18 de diciembre”, reconoció Artaza, mientras preparaba sus valijas para hacer temporada teatral en Mar del Plata. El Ministerio de Trabajo ya adelantó que no tiene novedades sobre la promulgación.
La segunda, que solo involucra a las empresas privadas. Para extender el beneficio a los estatales nacionales, provinciales y municipales, deberían aprobarse normas de adhesión en cada jurisdicción.
La tercera, aunque quizás la más importante, es que obviamente la medida no habla del 30% de la clase trabajadora, que está en negro. Para ellos, ni el 18 o el 31 hay un mango extra para pasar las fiestas.
Reacciones
“Está bien que se fije que los muchachos cobren antes para pasar las fiestas. Pero hacer una ley es fácil, lo que hay que tener en cuenta es que hay empresas que dicen tener dificultades para pagarlo hasta principios de enero”. ¿Quién lo dijo? Adivine: ¿Ignacio de Mendiguren, Cristiano Ratazzi o Daniel Funes de Rioja? Ninguno de ellos (ya lo dirán). El dirigente oficialista de la CGT, Antonio Caló, se encargó de transmitir la preocupación de las “empresas con dificultades”. Caló siempre tiene “dificultades” para defender los derechos de los trabajadores, aunque se trate solamente del adelanto de un salario golpeado por la creciente explotación obrera y por la inflación.
En Córdoba, una anécdota sirve para ilustrar el pensamiento de la casta política que nos gobierna. Los legisladores oficialistas y opositores prefirieron postergar el pago del aguinaldo a legisladores, secretarios de bloque y autoridades de la cámara para los primeros días del mes de enero. El motivo no es altruista. Al cobrar más de 35.000 pesos, el tope para ser eximidos de Ganancias, postergan el cobro para ahorrarse unos cuantos miles de pesos de impuesto. El hecho fue denunciado por Laura Vilches, la diputada del PTS en el Frente de Izquierda que ayer asumió su banca.
Una lucha por los derechos de los más explotados
En la Argentina, millones de trabajadores están precarizados. Los que están en negro, difícilmente cobren aguinaldo. Los tercerizados y contratados, según cuando se les ocurra a los patrones. En estos días, antes de que el Senado apruebe la ley, se desataron conflictos en Kraft y Pepsico, en la zona Norte del Gran Buenos Aires. Los tercerizados reclamaron, en el caso de Kraft, un bono de fin de año y el pago de todo el aguinaldo en diciembre. Recibieron el apoyo de la comisión interna, dirigida por la Lista Bordó del STIA, con paros y asambleas.
En Pepsico también se desató un conflicto. Como cuenta Camilo Mones, delegado de la comisión interna: “Nos enteramos a la madrugada que se votó en el Senado la ley de que todas las empresas tienen que pagar el aguinaldo antes del 18 de diciembre. Nosotros veníamos desde hace dos meses exigiendo a la empresa tercerizada de Pepsico, que se llama ISS, que pague el aguinaldo en diciembre. Se negaron. Los tercerizados, con la solidaridad de los compañeros de Pepsico, iniciaron medidas de lucha. Las medidas empezaron la semana pasada, y continuaron esta semana. Con la interna hicimos actividades, bloqueamos y paramos distintos sectores de la planta. La empresa se niega, quiere dar un adelanto, y pagar el resto en enero. Están cobrando seis mil por mes, o sea dos mil pesos debajo de lo que están cobrando los otros trabajadores. Entonces necesitan todo su salario para pasar las fiestas. Pepsico es cómplice”.
¿Y los sindicatos? Sigue Camilo: “El sindicato de maestranza solo después que empezaron los paros se hizo presente para decir que nosotros no teníamos que meternos. Lo rechazamos en asamblea, votamos que la interna dirigida por la Bordó participe. Empezamos una serie de negociaciones entre las partes, después intervino el Sindicato de la Alimentación. Siguen ofreciendo dos mil pesos. Esto fue rechazado nuevamente por los trabajadores. Entonces ahora se planteó lo de la ley que se votó en estos días, entonces a la empresa no le quedó otra que repensar la situación”.
La ley, sin embargo, llega tarde. “Sale a la luz que al final del kirchnerismo sale una ley que se necesitaba hace muchos años. A los tercerizados, en toda la industria le pagan los aguinaldos en enero, o en cuotas. Cuando además los tercerizados son los que menos cobran. También pasó en Kraft, donde los compañeros de limpieza con un paro de 24 horas consiguieron que les paguen un bono de mil pesos y el aguinaldo completo. Desde la comisión interna y la Bordó colaboramos y apoyamos a los compañeros, con la solidaridad de los efectivos”.
La situación no deja más que revelar la situación de millones de trabajadores durante el kirchnerismo. En 10 años de crecimiento récord, las patronales mantienen muchas condiciones ganadas con la dictadura y el menemismo. “Los compañeros ven que las conquistas –sigue Camilo– lo que el kirchnerismo dice haberle dado al movimiento obrero, a ellos ni siquiera les llegó. En este tema del aguinaldo, las empresas pueden pagar el dinero, pero prefieren laburarlo en los bancos, cobrar intereses, pensemos que son sueldos de cuatro mil empleados. Entonces estiran y pagan en cuotas”.
Esta vez, la “bicicleta financiera” no les funcionó. “Los compañeros, muchos jóvenes y mujeres, se plantaron, y el conflicto va a seguir hasta que le paguen todo el aguinaldo en diciembre. El apoyo de la interna los fortalece. Maestranza sufrió una derrota, porque venía a arreglar por 1200 pesos en diciembre, con los paros esto se rechazó. Esto seguirá la semana que viene. Pero vamos a exigir, que aunque la ley no se promulgue ahora por el lobby patronal, los compañeros cobren el aguinaldo en diciembre. El año que viene será tarde”.
Más allá del tema del aguinaldo, para los delegados clasistas de Pepsico, “lo importante es denunciar la existencia de estas tercerizadas, con una enorme masa de trabajadores que tienen menos salario y menos derechos que los efectivos. Los sectores ligados a la izquierda están peleando para que no pase lo mismo que todos los fines de año. Si la empresa se sigue poniendo dura o la ley no se implementa, va a seguir el conflicto”.
Bronca de fin de mes, bronca de fin de año
Este año, lejos de lo que dijo la Presidenta, los salarios volvieron a perder con la inflación. Los cálculos estiman que los salarios reales cayeron un 8%, y el 90% de los trabajadores no llega a cubrir la canasta familiar estimada en 12.000 pesos. Mientras tanto, las empresas que cotizaron en bolsa tuvieron ganancias por 39 mil millones de pesos, un 60% más que en el mismo período del año pasado.
Ante esta situación, el adelanto del aguinaldo es solo un paliativo, pero tiene que entrar en vigencia inmediatamente, e incluir a todos los trabajadores, los estatales y en negro.
Pero no alcanza. Como ha planteado el diputado Nicolás del Caño en el Congreso y ante distintas organizaciones obreras, es necesario el pago de un bono de fin de año de $ 4.000 a todos los trabajadores, privados y estatales, registrados y en negro, jubilados y beneficiarios de planes. Contra la casta política que legisla a favor de los empresarios, Del Caño plantea que los diputados y funcionarios cobren lo mismo que un docente, y el sueldo mínimo quede establecido en el valor de la canasta familiar.
Lucho Aguilar
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