El presidente pasa el fin de semana de Carnaval en Mar del Plata. Está por empatar dos días de “trabajo” con los de “descanso”. Y se viene el “retiro espiritual”…
Macri llegó el viernes con su familia a Chapadmalal. Allí está una de las residencias donde descansan los presidentes. No sería nada novedoso si no fuera porque con estos días ya suma 29 días de “paseo” en los últimos dos meses.
En las fiestas de fin de año había viajado a Villa La Angostura, en la Patagonia. En vez de dos semanas, se quedó casi tres. Quizá el “cachetazo” que había implicado la crisis de la “reforma previsional” lo había estresado un poco.
Luego estuvo de gira por Europa, donde intentó con dudosa suerte conseguir inversiones, pero también aprovechó para pasear algunos días.
Lo más sorprendente es que, aunque estará hasta el martes en Mar del Plata, volverá el jueves a la “ciudad feliz” para un “retiro espiritual” de Cambiemos. Allí estará los ministros, con quienes realizará unas "Jornadas de Trabajo" pensando en los planes de gobierno. ¿Cambiarán el diagnóstico y los planes que habían hechos eufóricos tras las elecciones? La situación económica, el malestar social y la caída de la imagen presidencial lo recomiendan.
En el encuentro participarán la gobernadora María Eugenia Vidal y el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Tanto paseo parece obsceno tratándose del autor de la frase “hay que trabajar los sábados y domingos” y beneficiario de 90 días de vacaciones con tan solo dos años de “antigüedad” en la Casa Rosada. Pero hay que reconocer que las del próximo fin de semana no serán vacaciones. Allí los Ceo que hoy son funcionarios seguramente “discutirán” y “planificarán” cómo harán para mantener los negocios de los empresarios amigos a costa del ajuste al pueblo trabajador.
La Izquierda Diario
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