El Asamblea de Jachal informó este viernes el caso de un niño de 5 años que tiene un gran volumen de arsénico y mercurio en sangre. Bonasso, autor de un libro sobre la Barrick, opina sobre las consecuencias de la megaminería y las responsabilidades políticas.
¿Qué sentís al enterarte de este caso de un chico con arsénico y mercurio en sangre que informó la Asamblea de Jachal?
Lamento comprobar que tuvimos razón los que denunciamos que el derrame de agua cianurada procedente de la mina Veladero, de la Barrick Gold, contaminaría las aguas del río Jachal y pondría en peligro la vida de los habitantes de Jachal, Iglesia y vaya a saber uno cuántos otros pueblos más. Lamento muchísimo que esta confirmación se dé a partir del envenenamiento de un chico y me solidarizo con la Asamblea de Jachal. Los protectores de la Barrick, una empresa envenenadora de nuestras aguas, deberían ser juzgados por el pueblo. Empezando por el ex gobernador José Luis Gioja.
Vos denunciaste claramente en tu libro los peligros e intereses que traía la instalación de la megaminera Barrick en Veladero.
Efectivamente en mi libro "El Mal. El Proyecto K y la Barrick Gold. Amos y servidores en el saqueo de la Argentina", denuncié que la explotación de Veladero y la de Pascua Lama por parte de la Barrick Gold suponía varias catástrofes para nuestro país como la destrucción de glaciares, el uso casi gratuito del agua por parte de esta minera (que es la más importante del mundo en las auríferas) y una herencia ambiental terrible. Por ejemplo el dique de colas, o sea el basurero a donde va a parar el agua cianurada con los derrames que ya hemos visto, y la filtración de los venenos hacia las napas subterráneas. También denuncié todo esto como diputado nacional y como ciudadano ante los tribunales de Comodoro Py. Nadie me hizo caso, excepto quienes luchan gallardamente por los recursos naturales, como los vecinos de Jachal, Famatina, Andalgalá y tantos otros sitios del país donde se instala la megaminería o el fracking.
En estos años los pueblos afectados se han rebelado contra ese saqueo y contaminación. ¿Cómo han sido tratados por los gobiernos de turno?
El gobierno de Cristina Fernández de Kirchner ha sido cómplice de la Barrick Gold. Macri también, sin duda. Con la vieja cantilena de atraer inversiones va a terminar de lotear el país. Salvo que se haga conciencia de lo que está ocurriendo con el agua, los bosques (que se siguen desmontando a pesar de la ley de mi autoría) y otros recursos estratégicos malversados en perjuicio del ambiente.
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