Por: Litbell Díaz Aché(*)
Ante los recientes sucesos protagonizados por un grupo de jóvenes y estudiantes, pero evidentemente dirigidos por la oposición golpista, es necesario reflexionar y puntualizar algunos aspectos, que nos permitan mirar con claridad lo que está sucediendo.
* En primer lugar enfatizar que estas acciones no son en defensa de la libertad de expresión, la cual, como ha quedado ampliamente demostrado, está garantizada en el país.
* Estas acciones no son un hecho aislado, son parte de un plan de características abiertamente insurrecciónales, cuyo origen data desde el momento mismo en que Hugo Chávez gana las elecciones en el 98.
* Los implicados en este hecho no actúan por cuenta propia, sino que obedecen a las directrices emanadas desde el Departamento de Estado Norteamericano y sus centrales de inteligencia.
* Lo que está en juego tiene carácter estratégico: para nosotros, tiene que ver con la supervivencia del proceso revolucionario y para ellos con el aseguramiento de las reservas energéticas y el mantenimiento de su modelo y sus intereses.
Ahora bien, veamos como se desarrolla esto en lo concreto, como ya estaba anunciado con bastante anterioridad, el gobierno venezolano en el legitimo uso de su derecho no renueva la concesión a RCTV y se desata un plan que venía gestándose desde el momento en que se conoció esta decisión, es decir, que la oposición tuvo varios meses para fraguar esta conspiración sin ser detectada por los órganos de inteligencia, y debido a que estas instancias no actuaron con la celeridad requerida, presumimos que fueron sorprendidos por estas acciones, las cuales evidentemente no fueron previstas por ellos.
Por otra parte, se evidencia que nuestra respuesta mediática no ha estado a la altura de los acontecimientos y en las primeras de cambio fuimos derrotados en este terreno, todavía existe mucha timidez para abordar el tema de la conspiración y nos distraemos siguiéndole el juego a los conspiradores, explicando que si hay libertad de expresión y que no es cierre sino vencimiento de la concesión y etc., etc., cuando había que denunciar con firmeza los planes de la oposición y desenmascarar desde el primer momento las verdaderas intenciones de los golpistas que no son otras que dar al traste con el Gobierno Revolucionario e impedir el avance del Socialismo y la Revolución.
El Plan del Imperio y sus colaboradores nacionales, persigue un solo objetivo: Salir de Chávez, por la vía que sea, incluyendo por supuesto el magnicidio, ahora bien, si el objetivo es uno sólo, las tácticas son diversas, flexibles y prolongadas en el tiempo, eso debe tenerse claro y comprender que cualquier acción desarrollada por ellos, por pequeña que sea, apunta en esa dirección. Por lo que no debemos en ningún momento subestimar al enemigo, es necesario calcular todos sus movimientos y prever todos los escenarios para estar preparados cuando sea necesario actuar, y poder hacerlo oportunamente.
Tomemos en consideración que no solo defendemos al gobierno, sino que defendemos la posibilidad de continuar adelante con el socialismo, lo cual implica un cambio radical en nuestro modelo de desarrollo y por supuesto implica afectar los intereses del imperio y sus cómplices nacionales.
Veamos en que momento se desarrollan esas acciones, justamente en el momento en que se pone en marcha La Ley habilitante (Tal como ocurrió en el 2002), acompañada además de un reforma constitucional, cuyas medidas ya están haciéndose sentir en la realidad concreta: Nacionalización de la CANTV, De la Electricidad de caracas y sus filiales, de la industria petrolera y la faja del Orinoco, entre otras.
A quienes afectan estas medidas, ¿solo a Marcel Granier y la familia Phelps? Evidentemente ellos salen perjudicados, al perder su gallinita de los huevos de oro, pero ante medidas tan contundentes como las enunciadas en el párrafo anterior, es obvio que el fin de la concesión a RCTV no es más que la excusa para llevar adelante, como lo están haciendo, su plan conspirativo.
Señalamos que la táctica empleada por el enemigo es flexible, por eso vemos a nuevos actores, jóvenes, estudiantes y gente de los medios de comunicación, pero es un cambio solo en lo aparente pues aunque todos coinciden en enfatizar que no son políticos y en lo pacifico de su protesta (las consecuencias de estas acciones tan “Pacificas” ya se han hecho sentir) vemos en lo concreto que por supuesto se esconde objetivos políticos y que estos objetivos están dispuestos a alcanzarlos por la vía violenta, que ante sus reiteradas derrotas electorales y por su condición de minoría es la única vía posible para ellos. Por esta razón es que siempre procuran llevar sus manifestaciones al camino violento.
Todos estos “nuevos actores” defiende viejos intereses, los intereses del Capital Transnacional que en el caso venezolano ha tenido grandes inversiones en el área de las telecomunicaciones y el petróleo y es eso lo que en verdad defienden sus prebendas y privilegios que han sido golpeados con las medidas de nacionalización, pues aunque se haya nacionalizado solo a CANTV y no se le renovara la concesión solo a RCTV los otros grupos se ven afectados, en el caso de la telefonía tendrán ahora que competir con los precios del Estado. Pero para todos vale poner sus barbas en remojo porque estas medidas dejan sentado un precedente histórico favorable a la profundización de la revolución.
Para comprobar que estos “nuevos actores” defienden viejos intereses no hace falta más que verificar su origen y en algunos casos su apellidos, de donde provienen estos estudiantes: Universidad Santa María, Universidad Metropolitana, Universidad Católica Andrés Bello y Universidad Simón Bolívar. ¿Los hijos de quienes estudian en estas universidades?
En el caso de la Universidad Central de Venezuela debemos resaltar que se trata por una parte de la FCU secuestrada por ese joven llamado Stalin que es un deplorable híbrido entre Bandera Roja (Organización con un amplio expediente de traición a los movimientos revolucionarios en Venezuela) y el Partido Un Nuevo Tiempo. Y por otra parte, aquellas facultades que históricamente han estado en manos de la derecha como es el caso de medicina, derecho y comunicación social, porque como todos sabemos si bien es cierto que la UCV es una universidad pública fue objeto durante años de una política dirigida a excluir de sus aulas a los jóvenes provenientes de las clases populares.
Por otra parte el sector financiero tiene también especial interés en derrocar a Hugo Chávez, porque es evidente que más tarde o más temprano el avance del socialismo desencadenará la nacionalización de la banca.
En definitiva no importa quien protagonice las acciones, lo que es bien cierto es que detrás de ellas se esconde la mano peluda del imperio, el capital transnacional y sus serviles colaboradores de la oposición venezolana, todos con la intención de frenar el avance revolucionario y defender sus intereses económicos y de clase.
Por lo que está claro que ciertamente la sociedad venezolana está polarizada no por el odio sembrado por Chávez, como suelen afirmar ellos con sus ojos llorosos frente a las cámaras de Globoterror, está polarizada porque hemos llegado a un punto álgido de las contradicciones de clase: el capitalismo no quiere morir y nuestro socialismo aun no ha terminado de nacer.
Sirvan estas reflexiones, para que como pueblo asumamos nuestro papel en la seguridad y defensa de la nación y la revolución, no se trata solo de movilizarnos cuando la revolución nos convoque, se trata también de continuar formándonos para dar la batalla de las ideas, en este sentido es preciso pasar a la ofensiva, y continuar organizándonos porque en este momento histórico la sobrevivencia de la revolución pasa por tres palabras claves:
Formación – Organización- Movilización
¡Patria, socialismo o Muerte Venceremos!!!!
¡La Revolución no tiene marcha atrás… La victoria es Nuestra!!!
(*)Madres Bolivarianas Por Venezuela
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