Milei presentado el Presupuesto 2025 en el Congreso.
El proyecto de Presupuesto 2025 presentado por Milei prevé eliminar el gasto tributario del del 3,48% del PBI en 2024 al 3,54% del PBI; nada más ni nada menos que $23,7 billones. Esto es lo el fisco dejará de recaudar por exenciones impositivas otorgadas a las patronales. Mientras tanto, se agrava la carga fiscal sobre los trabajadores con la reposición de Ganancias sobre el salario y la suba del monotributo.
Estas rebajas impositivas incluyen los regímenes de promoción económica (como el de la industria de Tierra del Fuego, el de la minería y el de la economía del conocimiento), que pasarán del 0,4% del PBI en 2024 al 0,43% en 2025; el diferimiento del pago de impuestos, la amortización acelerada en el Impuesto a las Ganancias, la devolución anticipada de créditos fiscales en el IVA y reducción de aportes a la seguridad social. Con todo, en 2025 el beneficio fiscal a las empresas crecerá en $1 billón respecto a 2024.
Se trata de un monto equivalente al aumento a las jubilaciones que vetó Milei. Como vemos, el gobierno cuida el “equilibrio fiscal” hambreando a los jubilados mientras le cuida el bolsillo a los capitalistas eximiéndolos de impuestos. Por otra parte, la reducción de aportes patronales contemplada en el proyecto desfinanciará aún más el régimen previsional.
Mientras el gobierno colma de ventajas impositivas a la clase capitalista, agrava la presión fiscal sobre los trabajadores, aumentando la cuota del monotributo y reponiendo la cuarta categoría de Ganancias, gravando a 1,1 millón de asalariados. A su vez, el oficialismo, en pos de no defraudar las metas fiscales del FMI, compensará las exenciones a los capitalistas recrudeciendo el ajuste sobre los trabajadores, como también lo anticipa en el proyecto de presupuesto presentado.
Estos incentivos, a diferencia de lo que afirma el gobierno, de ninguna manera destrabará la huelga de inversiones; solo el vaciamiento del erario público a manos de los empresarios. Los índices muestran que la inversión cayó en picada en el primer semestre, y que la recesión seguirá su curso como resultado de la caída del consumo, la apertura de las importaciones, la caída de la obra pública, y las dudas acerca de la viabilidad del plan económico del gobierno.
Sobran las razones para rechazar en las calles contra este presupuesto ruinoso que vuelve más ricos a los ricos y empobrece a los más pobres. Construyamos la huelga general para derrotar la ofensiva de este gobierno antiobrero.
Sofía Hart
No hay comentarios:
Publicar un comentario