martes, 3 de septiembre de 2024

De vetos y reformas reaccionarias, la continuidad del ajuste a los jubilados


Kirchneristas, macristas y libertarios robaron a los adultos mayores para pagar la deuda fraudulenta.

 Las jubilaciones se encuentran en niveles de miseria tras ser atacadas durante décadas por todos los gobiernos. Kirchneristas, macristas y libertarios son responsables directos del verdadero hundimiento que sufrieron los haberes en los últimos 15 años. 
 Cristina Kirchner vetó en octubre de 2010 una ley sancionada por el Congreso que establecía el 82% móvil para las jubilaciones, luego de grandes movilizaciones de la docencia. CFK dijo en ese momento que esa ley iba a llevar al país al default y tildó a quienes defendían a los jubilados de reaccionarios, a pesar que el monto de la mínima se encontraba entonces por debajo de la línea de pobreza. Son casi las mismas palabras de Milei hoy. Claro, la plata de la Anses fue usada para garantizar el pago de la deuda; mismo objetivo por el cual poco después instauraría el cepo cambiario. 
 Con Mauricio Macri en la Casa Rosada y la complicidad del PJ y la UCR en el Congreso se votó la reforma jubilatoria de diciembre de 2017, con la que los jubilados perdieron un quinto del poder adquisitivo de su haber en solo dos años. Ese robo fue lo que enfrentó la fuerte movilización brutalmente reprimida por Patricia Bullrich, pero que tendría efectos políticos de largo alcance. Hoy el PRO oficia de garante para que el parlamento no revierta el veto de Milei.
 Bajo el gobierno de Alberto Fernández, CFK y Massa los ingresos de los jubilados continuaron hundiéndose. En diciembre 2020 fue sancionada una nueva fórmula de movilidad confiscatoria que terminó por producir una caída del poder adquisitivo de la jubilación mínima que si no se consideran los bonos es del 39,7%. Sobre ese derrumbe del haber básico es que avanzó la motosierra de Milei, empezando por el cimbronazo de la devaluación del 52% de diciembre pasado y con un bono congelado desde marzo en $70.000, lo que explica más de la cuarta parte de todo el ajuste fiscal “más grande de la historia”.
 Los jubilados están cobrando hoy en términos reales casi la mitad de lo que percibían hace una década atrás. Cuando Cristina vetó el 82% móvil en octubre de 2010 la mínima era de $1.046 y llegó a $225.454 en agosto de 2024, una suba del 21.453%, mientras que un kilo de arroz lo hizo un 39.900% (pasó de $6,30 a $2.520), un kilo de pan un 33.233% (pasó de $7,2 a $2.400) y un litro y medio de aceite 38.608% (de $6,20 a $2.400).
 ¿Por qué todo los gobiernos empobrecieron a los jubilados? Porque utilizaron dinero de la Anses para pagar la deuda externa y subsidiar a grupos empresariales, a la vez que desvalorizaron los salarios y con eso la recaudación del sistema previsional, nunca repusieron los aportes patronales eliminados por Menem y Cavallo, y promovieron el crecimiento del trabajo precario que evade todas las cargas sociales. Por eso decimos que el Estado y los capitalistas se financian a costa de los jubilados, y no al revés.
El problema de la economía argentina no son las jubilaciones, sino el pago de la deuda fraudulenta. Ese es el interés que compartieron todos los gobiernos capitalistas. La recomposición de los haberes depende por eso de la lucha de los trabajadores, empezando por tirar abajo el veto ajustador de Milei y sus secuaces.

 Iván Hirsch
 Nazareno Suozzi

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