En el día de hoy arrancan los alegatos en el juicio por el asesinato de Mariano Ferreyra. Marcha habló con Pablo, su hermano, quien es uno de los querellantes y nos cuenta las últimas novedades del juicio y las perspectivas de cara a la sentencia.
-Concretamente, ¿en qué momento del juicio estamos?
-Bueno, acaba de terminar la etapa de las indagatorias a los diferentes imputados, lo que es el cuerpo principal del juicio, con el testimonio de Favale que no aportó demasiado. Sí amagó al principio con colocarse él en el lugar de perejil puesto ahí por los ferroviarios, pero cuando parecía que iba a responsabilizarlos, siguiendo las escuchas telefónicas donde había dicho que si le soltaban la mano iba a hablar, terminó echándole la responsabilidad de lo sucedido al testigo de identidad protegida, que se sabe que es Benítez. Fue una forma de decir “yo no fui”, pero al mismo tiempo tampoco señaló ni a Pablo Díaz, que podría ser el presunto organizador ahí en el lugar, ni a los responsables intelectuales, ni a Sánchez, que es otro de los acusados y que posiblemente habría disparado. En cambio, acusó a alguien que está por fuera de los ferroviarios y que se transformó en el testigo que terminó denunciándolos. Es un testigo que era parte de la patota cuyo testimonio, como testigo protegido, es el principal para inculpar al Gallego Fernández, a Favale y a Pablo Díaz. Ahí se nota que Favale, para salir de la culpabilidad plena del hecho material, está participando de manera organizada del pacto de silencio que evidentemente existe entre los ferroviarios. Por eso fue un testimonio más bien flojo, bastante mentiroso, que no brindó demasiados detalles.
-¿Y entonces ahora viene la etapa de los alegatos? ¿Podrías contarnos en qué consisten?
-Sí, exactamente. Este viernes 15 arrancamos con los alegatos. Es la etapa donde nosotros vamos a decir qué tipo de responsabilidad tiene cada uno y qué pena les correspondería. Yo ahora no puedo adelantar demasiadas cosas, pero sí que vamos a pedir las penas máximas. Estamos determinando todavía si a todos o a algunos. Sí consideramos que Pedraza y Fernández tienen que ser considerados instigadores del homicidio de Mariano. Nuestro alegato va a durar todo el día y posiblemente va a ser el alegato más largo que haya en todo el juicio, va a durar de nueve de la mañana hasta las siete de la tarde. Son casi mil páginas, doce capítulos escritos con todos los sucesos, con antecedentes y las responsabilidades de cada uno de los acusados. Va a estar acompañado por videos, por audios, por entrecruzamiento de llamadas telefónicas, por el cruce entre lo que filmaba la Policía y las órdenes que recibían por teléfono y después por escuchas de los días posteriores que revelaron la trama que planearon desde la Unión Ferroviaria para dar protección a todos los implicados. Es una gran tarea que empezamos hace varias semanas y va a culminar el viernes y después empiezan los otros alegatos, que son veinte en total. A los alegatos se les hacen réplicas y después están las devoluciones a esas réplicas. Todo eso puede llevar un mes y medio aproximadamente, a partir de lo que los jueces tienen una semana para deliberar.
-¿Es decir que podemos esperar un desenlace para abril?
-Claro, pensamos que a mediados de abril podemos tener ya una sentencia definitiva. Nosotros vamos porque este sea un caso que obtenga una condena ejemplificadora. La querella nuestra se juega por todo y vamos a ver si se desprende del alegato la posibilidad de seguir investigando a algunos personajes que creemos que deberían estar en el banquillo de los acusados, tales como una gerente de recursos humanos de la Unión Ferroviaria, una persona más que fue muy citada como que estaba en la movilización de octubre, gente de la Secretaría de Transporte y gente de la Policía de alto rango. Hay que ir midiéndolo pero la idea es que este proceso no termina acá. Se va a empalmar con una causa abierta de sobornos contra Pedraza, de manera que vamos a ir nutriendo de diferentes procesos que nos permitan que el caso siga teniendo réplicas y eco. Ahora se va a cerrar una etapa porque, esperemos, vamos a lograr que se juzgue a los asesinos de Mariano. Si conseguimos la perpetua para Pedraza y para los autores materiales estamos parándonos en un nuevo umbral de la Justicia argentina. Este caso lograría ser un ejemplo. Y después vamos a seguir siendo querellantes en otras causas relacionadas como la del soborno y la de las tercerizaciones en el ferrocarril, vamos a ir viendo hasta qué punto los negociados de Pedraza estaban intrínsecamente unidos con los subsidios que les daba el Estado, son cosas para ver con más precisión.
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