La Feria del Libro 2023 se inauguró este jueves 27 en el predio de la Sociedad Rural con discursos a cargo de autoridades, invitados y del escritor Martín Kohan.
En su intervención, el ministro de cultura de la Nación, Tristán Bauer, celebró la derogación de la ley de caducidad por parte del Parlamento y denunció al gobierno de Mauricio Macri por la aprobación de esa iniciativa en 2017. La norma en cuestión apuntaba a liquidar, a partir de 2023, la asignación automática de fondos a entes de la cultura.
Sin embargo, el ministro omitió decir que los legisladores del justicialismo votaron a favor de esa ley en 2017. Su derogación en 2022 no responde a la buena voluntad del gobierno sino a que los trabajadores de la cultura se pusieron en pie, con grandes movilizaciones. El gobierno que integra Bauer desenvuelve una política de ajuste, a cuenta del FMI, que empobrece a las masas y afecta la educación y la cultura.
Su par porteño, Enrique Avogadro, hizo un llamado a la “palabra”, el “diálogo”, y reivindicó los 40 años de democracia, mientras los gobernadores de Juntos por el Cambio reprimen la protesta social y esa misma coalición se adentra en tratativas para sumar al facho José Luis Espert.
El discurso principal estuvo a cargo de Martín Kohan, quien concentró su intervención en una revalorización del lector. “La provisión de autores para la literatura contemporánea está cubierta, y hasta podría decirse que con creces” -ironizó. “El asunto son los lectores, y los lectores para esa cantidad de autores, ahí donde el deseo de escritura se afirma como deseo de lectura, como deseo de ser leído, y no tan solo de verse impreso, del nombre en la tapa”. En vez de una feria dedicada a la exhibición de novelistas y poetas, postuló el intercambio y diálogo. Completando el lema histórico de la feria: “del autor al lector”… y “del lector al autor”.
Kohan además hizo referencias puntuales a la grieta entre explotadores y explotados, el mercado, la “estética dominante” y el “aparato represivo”.
Si el discurso de Guillermo Saccomanno en 2022 sacudió las estanterías por su abierto cuestionamiento a la realización de la feria en instalaciones de la oligarquía agroganadera; al incremento de la pobreza; al oligopolio del manejo del papel; y a la explotación de los escritores que apenas reciben el 10% del precio de tapa de sus libros, Kohan defendió en cambio la aproximación sigilosa del caballo de Troya que se instala en las tierras del enemigo. “Ninguna torre de marfil, ningún paso a la ofensiva”, sintetizó en el tramo final.
Estas excesivas precauciones, más allá del gran nivel de su discurso, dejan un sinsabor, especialmente en una Argentina que se incendia, entre la devaluación, la inflación y la pobreza. Es un dato que Clarín haya celebrado que se trató de una de las inauguraciones más respetuosas de los últimos tiempos.
La Feria continuará hasta mediados de mayo. Participan escritores locales y algunos extranjeros, como el español Arturo Pérez Reverte, que ha publicado una novela titulada “Revolución” que tiene como escenario la gesta mexicana de las primeras décadas del siglo XX. Habrá actividades por el centenario de “Fervor de Buenos Aires” de Jorge Luis Borges.
En la Feria se presentará también el 6 de mayo el libro “Por qué fracasó la democracia”, de Gabriel Solano, precandidato del Partido Obrero en el Frente de Izquierda, que aborda en forma polémica los últimos cuarenta años de historia y lucha política.
Gabriel Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario