jueves, 4 de abril de 2019

La suma de todos los miedos



La policía detuvo ayer en el aeropuesto de Mendoza al equipo Colombiano de BMX, a este hecho se le suma la deportación del equipo pakistaní de futsal y la de los dos chilenos acusados de haber dejado una bomba -en realidad eran dos parlantes- en la ciudad de Córdoba.

Tres hechos se sucedieron en el país que fueron repudiados en redes sociales. Ayer, la policía detuvo en el aeropuesto de Mendoza al equipo Colombiano de BMX, a este echo se le suma la deportación del equipo pakistaní de futsal - que fue por un error de la embajada argentina - y la de los dos chilenos acusados de haber dejado una bomba -en realidad eran dos parlantes- en la ciudad de Córdoba.
Mariana Pajón, es una de las deportistas retenidas en Mendoza, es bicampeona olímpica y con varios títulos mundiales. "Cuando entramos nos dijeron que tenían que ver nuestro pasado judicial porque éramos colombianos. Y ahora nos tienen acá porque piensan que vamos a vender nuestras bicicletas", declaró. "Es súper triste que esto siga pasando. Nosotros somos orgullosamente colombianos. Viajamos por el mundo con este uniforme para ser los mejores representantes y embajadores, esto tiene que cambiar", agregó irónicamente.

"Cuestiones de seguridad nacional"

El hecho de les colombianos se suman a la deportación de los jugadores pakistaníes de futsal. La delegación de deportistas viajó para participar del Mundial de la categoría que se disputa en Misiones y la excusa de su deportación fue por por “cuestiones de seguridad nacional”.
Pero no sólo fueron víctimas deportistas, Gabriela Medrano Viteri y Felipe Zegers, fueron detenidos en Palermo el fin de semana tras olvidarse un “paquete sospechoso” en Córdoba y ser liberados pero sin poder salir del país, solo tenían parlantes en esa valija. Ellos eran dos artistas chilenos que estaban paseando en el país. Estuvieron 48 hs incomunicados, lo cual fue un verdadero papelon diplomático.
La persecución y el acoso aleatorio por parte de la Policía Aeroportuaria descansa en perseguir a un "enemigo externo e interno" que aplica Patricia Bullrich y que la llevó a decir que "las fuerzas de seguridad primero deben disparar y luego preguntar". Pero el aval de la "doctrina de Chocobar" no es solamente implementado por Cambiemos, a este tipo de políticas Sergio Berni le da el visto bueno.
Esta construcción discursiva de “nuevas amenazas” que atentarían contra la seguridad nacional pretende, en la práctica, construir un nuevo enemigo interno a quien es necesario enfrentarse con todo el poder de la ley y de la fuerza, en un contexto de ajuste y ataques al conjunto de la clase trabajadora.

Tomás Máscolo

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