lunes, 8 de julio de 2019

Pobreza, frío y muerte: el despreciable oficio de defender el ajuste



Fernando Iglesias y Juan Acosta criticaron a quienes denuncian las muertes por la ola de frío. La defensa de una política económica que hunde a millones en la pobreza termina en el cinismo más abierto.

En tiempos de Cambiemos, Fernando Iglesias y Juan Acosta se han convertido en dos de las caras más visibles de la política nacional. El diputado nacional y el actor suelen oficiar de defensores de toda política que lleve adelante el gobierno de Macri, sean cuales sean sus consecuencias.
En estos día no hubo excepciones. Ambos salieron a protagonizar un “combate” contra quienes denunciaban los padecimientos que sufren miles de personas en situación de calle. El hecho de dormir en las calles llevó, solo en las últimas dos semanas, a varias muertes como resultado de las bajas temperaturas.
Solo en la semana que termina se registraron, por lo menos, tres fallecimientos como resultado de la ola polar que azota al país. Uno en la Ciudad de Buenos Aires, otro en San Salvador de Jujuy y un tercero en Merlo, provincia de Buenos Aires. Este último, un joven de 17 años, falleció por inhalar monóxido de carbono, al intentar calentarse con carbón encendido.
Las causas de la muerte ocupan un lugar secundario en esta terrible situación. Todas son consecuencias de situaciones de pobreza empujadas por el brutal ajuste que imponen el FMI, Macri y los gobernadores del peronismo.
Intentando ocultar las consecuencias de esa política de ajuste, este jueves Fernando Iglesias calificó como “opereta kirchnerista” las denuncias existentes sobre la situación en la Ciudad de Buenos Aires.
Desde su cuenta de Twitter, el diputado nacional sostuvo una defensa cerrada de la gestión del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Esto, a pesar de los cuestionamientos a la cifra de personas en situación de calle brindada por la administración de Rodríguez Larreta.
De hecho, este viernes se conoció el informe del Censo Popular de Personas en Situación de Calle, que indicó un número cinco veces superior al señalado por la gestión macrista de la Ciudad.
Durante la polémica en Twitter, Iglesias ratificó la defensa de las políticas de ajuste que lleva adelante Cambiemos. “Mucha humildad y mucha convicción para seguir #HaciendoLoQueHayQueHacer”, escribió en su cuenta.
El actor Juan Acosta no se quedó atrás. El hombre que supo hacer el papel de Naboletti en la ficción terminó en un rol lamentable en la realidad. “Tengo gente en mi barrio que la vi crecer y tener hijos en la calle toda una vida, no quieren cambiar esa situacion, hay un factor psicologico importante, no hagan politika barata”, escribió en su cuenta de Twitter.
Como resulta lógico, su nombre escaló como tendencia en la red social del pajarito y no fue por recibir felicitaciones. No es la primera vez que el actor defiende las política de ajuste de Cambiemos.

Muertes que no son naturales

El país es azotado por una terrible ola polar, con temperaturas por debajo de los cero grados en muchísimas regiones. Sin embargo no se puede hablar de “tragedias” a la hora de evaluar las muertes ocurridas por hipotermia o por inhalación de monóxido de carbono.
Esos fallecimientos eran completamente evitables y son consecuencias de una situación social y económica creada por la política de ajuste que impulsan juntos Macri y los gobernadores peronistas bajo las órdenes del FMI.
No son muertes “naturales”, sino el resultado de un sistema de cosas donde todos los gobiernos privilegian los negocios del gran capital por encima de los intereses de las grandes mayorías populares. Bajo el capitalismo no puede ser de otra forma. Más allá del signo político, el Estado es el órgano que garantiza la rentabilidad del gran empresariado.
Por eso la pobreza asola todo el país, gobierne Cambiemos o el peronismo. Ambas fuerzas comparten una política que privilegia los intereses de los grandes acreedores internacionales. Es por eso que Alberto Fernández, más allá de las palabras de queja, se apuró a ratificar que si llega al poder continuarán los pagos al FMI.
Cuando la ola polar termine, la pobreza seguirá ahí. Cuando el frío extremo se vaya, cientos de miles de personas seguirán sin hogar, miles y miles viviendo en la calle.
Para impedir nuevas muertes evitables hace falta invertir las prioridades, como plantea el Frente de Izquierda Unidad. Las ganancias de especuladores inmobiliarios y privatizadas no pueden estar por encima de la vida de millones.

La Izquierda Diario

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