El “spot” de la recusación judicial ocurre a pocos días de la definición del juicio de Vialidad y bajo la amenaza de una reapertura general de las causas contra la vicepresidenta: Hotesur, memorándum con Irán, dólar futuro, etc.
La recusación hace foco en primer lugar en Gerardo Milman. El ex funcionario del ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich fue señalado por un asesor del Frente de Todos por una supuesta conversación en la que habría asegurado que “cuando la maten yo voy a estar en la costa”. El propio Milman había presentado un proyecto, días antes del atentado, donde pedía información sobre la custodia de Cristina y pronosticaba que “un loco suelto” podría querer asesinarla. La querella de la vicepresidenta reclama que no se lo haya citado a declarar como tampoco se hayan secuestrado los celulares de las asesoras que se encontraban junto a él ese día. Una de estas asesoras seria panelista del programa de Crónica TV donde apareció por primera vez Sabag Montiel, el que efectuó el disparo fallido.
El otro reclamo de la querella refiere a la no unificación de las causas de “los copitos” Sabag, Uliarte y Carrizo, con la investigación sobre “Revolución Federal”, que ha probado un vínculo financiero entre este grupo con un tal Jonathan Morel y el empresario Caputo. El juez Martínez de Giorgi ya había pedido esa unificación negada por Capuchetti primero y por la Cámara después. Según Página/12, el juzgado de Capuchetti se apresta a cerrar la causa con los tres copitos detenidos, para proceder al juicio oral.
La pista interna
Las hipótesis sobre los intereses en torno al atentado son inciertas. Es claro que existe en la Argentina toda una constelación de grupos fascistas financiados por empresarios y dispuestos a encarar acciones. Estos grupos estilo Revolución Federal tenían en carpeta atentar contra varios políticos y representantes del gobierno.
De cualquier forma, la querella boicotea la “pista interna”, o sea la investigación a la policía federal y a su custodia. Tanto una como la otra liberaron la zona y no protegieron a la vicepresidenta.
La recusación adelanta la dirección que va a seguir Cristina K para enfrentar su batalla contra “el partido judicial” que, ha asegurado, “la quiere presa o muerta”. Por el momento esa conflicto viene cuesta arriba, la Corte ha dado razón a Luis Juez para integrar el Consejo de la Magistratura en lugar del kirchnerista Martin Doñate.
Federico Fernández
10/11/2022
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