El 30, todos a Plaza de Mayo
Tras la exitosa jornada de clases públicas en Plaza de Mayo, una reunión de representantes del movimiento estudiantil realizada en el local de la Federación Universitaria de Buenos Aires (Fuba) resolvió impulsar una toma generalizada de facultades para el próximo miércoles 29, previo a la movilización del jueves 30 al Palacio Pizzurno y a Plaza de Mayo. Participaron presidentes de los diferentes centros de estudiantes de la UBA, la conducción de la Federación de la Universidad de las Artes (Funa) y miembros de las coordinadoras estudiantiles de secundarios y terciarios. Del debate en la reunión surgió una constatación unánime: la lucha educativa crece en todos los distritos y niveles. Es un momento decisivo para que los estudiantes digamos presente e intervengamos masivamente para torcerle el brazo al ajuste del gobierno de Macri y del FMI.
Frenos
En nuestra intervención, criticamos el papel de los rectores que, desde Alberto Barbieri en la UBA a Fernando Tauber en La Plata, se mantienen en silencio al margen del conflicto. Otros, como el ex rector del Litoral, Albor Cantard, o la ex presidenta de la FUA de Franja Morada, Josefina Mendoza, salieron sin pelos en la lengua a sostener el ataque macrista contra la universidad. La expresión más brutal del papel reaccionario de las autoridades se dio en Córdoba, donde el decano de Derecho Guillermo Barrera Buteler -ligado al clerical Portal de Belén y al rectorado del radical Hugo Juri- convocó a la Policía para reprimir y desalojar a sus propios estudiantes. La camarilla universitaria se aferra a sus acuerdos de fondo con el macrismo –reducción de las carreras, resolución 1254 de devaluación de los títulos, confluencia con las privadas, financiamiento a través de las empresas- y está a la espera de la primera oportunidad para dejar al movimiento docente a su suerte. A la luz de este balance, la reunión de la Fuba celebró lo ocurrido en Cuyo, donde una masiva asamblea resolvió expulsar a Franja Morada de la facultad.
Junto a los rectores, actúan las direcciones docentes burocráticas peronistas (Fedun) y kirchneristas (Conadu) que por segunda vez consecutiva en estas tres semanas resolvieron levantar el paro. Solo la Conadu Histórica conducida por la izquierda convoca a seguir con la huelga la semana próxima. De todas formas, es indicativo del estado del movimiento que al menos siete regionales de la Conadu yaskista, Rosario y Córdoba incluidas, resolvieron desacatar el mandato de su dirección y seguir con las medidas de fuerza. La política de freno de los sectores comprometidos con el régimen universitario y las políticas más generales de ajuste contra los trabajadores tendrá una expresión geográfica en la marcha nacional del próximo jueves 30: el bloqueo a que la movilización se dirija a la Plaza de Mayo, centro del poder político, restringiéndose al Ministerio de Educación.
Tomas e inter-facultades
Con esta comprensión, el llamado a realizar asambleas y tomas el miércoles 29 apunta a abrir un canal de intervención independiente del movimiento estudiantil en el conflicto para superar el freno de las autoridades y direcciones burocráticas. En este mismo sentido, la UJS propuso en la reunión la convocatoria a una asamblea inter-estudiantil, para unificar al activismo de las diferentes facultades y habilitar la confluencia con los secundarios y terciarios, que en estos días luchan contra el cierre de los 29 institutos de la Capital. Planteamos que el conflicto docente universitario es la oportunidad para que los estudiantes coloquemos nuestra propia agenda de reclamos, como el establecimiento de un boleto educativo gratuito para todos los niveles, un plan integral de refacciones edilicias, la derogación de la resolución 1254 y el rechazo a la UniCABA del jefe de gobierno porteño, Rodríguez Larreta.
Desde La Cámpora-Nuevo Encuentro hasta Patria Grande, pasando por la presidencia del centro de la Fadu (Arquitectura y Diseño) en manos del “Comunismo Revolucionario”, las agrupaciones vinculadas al kirchnerismo se mostraron escépticas frente a esta perspectiva. Defendieron su política de “unidad” con los rectores y gremios burocráticos, a pesar de que éstos están demostrando en tiempo real que constituyen una traba para el movimiento, con intereses diametralmente opuestos a la masa que estudia y trabaja en la universidad. La resistencia a desarrollar el movimiento de lucha y la línea de “unidad” con el régimen emparenta a estos grupos con la Fuba trucha de Yacobitti-Nuevo Espacio y la UES, que hasta el momento solo posó para la foto evitando convocar a cualquier instancia real de participación estudiantil.
A la lucha
Con todo, el impulso a una jornada de tomas generalizadas de facultades constituye un gran paso adelante. Está ahora en manos de los estudiantes intervenir para tomar las riendas del movimiento y superar todos los obstáculos hasta lograr el triunfo de la universidad pública. Vamos por asambleas masivas para votar las ocupaciones y que la marcha del 30 de agosto haga temblar las puertas de la Casa Rosada. Y vamos por una gran asamblea inter-estudiantil la otra semana para definir cómo sigue el plan de lucha. Aunque algunos interesados quieran presentar a los estudiantes como “damnificados” por el paro docente, lo cierto es que estudiantes y docentes somos víctimas por igual de una política de desguace. Si peleamos unidos y hasta el final, podemos derrotarla.
Julián Asiner
Presidente de la FUBA
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