jueves, 20 de febrero de 2025

Privatización del Banco Nación, otra estafa pero sin “cripto”


Después del cimbronazo político causado por la estafa de la criptomoneda $Libra, Milei y Caputo decidieron renovar la confianza del capital financiero redoblando la apuesta, o sea, la estafa. En la mañana donde emprendían otro viaje a Estados Unidos, la camarilla libertaria anunció la transformación del Banco Nación en sociedad anónima, a través de un decreto. El Nación había sido retirado de las entidades públicas sujetas a privatización en la Ley Bases, sin perjuicio de lo cual los mismos que pidieron esa exclusión le votaron a Milei, a renglón siguiente, los poderes especiales. Por lo tanto, la venta del Nación quedó habilitada desde el mismo momento en que se votó la megaLey, aunque la Asociación Bancaria y el kirchnerismo celebraran a la falsa “exclusión” del Nación como una victoria.
 Por eso mismo, la venta del Nación no debuta con este decreto: viene siendo cuidadosamente preparada. En enero pasado, la Comisión de Valores adoptó una resolución que ‘flexibiliza’ la suscripción de obligaciones negociables -títulos de deuda- a empresas públicas, en el mercado de capitales local o en el exterior. Aunque esa decisión habilitaba al Banco Nación a endeudarse, el banco estatal no podía ofrecer como garantía a sus propias acciones. La conversión del Banco en una S.A. facilita ese paso crucial: la Bancaria acaba de denunciar que Milei-Caputo saldrán a buscar dólares en Estados Unidos colocando a las acciones del Banco como garantía. La capitalización posterior de esos préstamos daría lugar al ingreso de los acreedores privados como accionistas. De esta manera, el primer paso de la privatización del Nación permitiría a los liberticidas hacerse de dólares para sostener el actual régimen cambiario y financiero, y afrontar los vencimientos de deuda en ciernes. El FMI está celebrando el anuncio, el cual debe formar parte del acuerdo que se continúa tramitando con el gobierno argentino. El ingreso de dólares a cambio del remate del Banco reduce el monto de divisas que el FMI debería colocar para sostener al régimen libertario. 
 El decreto de transformación en S.A. despoja al Banco del monopolio en la percepción de depósitos judiciales y otros depósitos de carácter oficial. Deriva esta fuente de financiamiento virtualmente gratuita a la banca privada. Bajo la lupa de los acreedores y futuros accionistas, el banco será sometido a dos fuertes cirugías. Una de ellas será la “racionalización” de personal y sucursales, o sea, un plan de despidos y de ataques a las conquistas laborales. El otro bisturí tiene que ver con la reorientación y centralización del crédito. Pero la captura de los recursos del banco a manos de las camarillas capitalistas más poderosas no augura ninguna solvencia patrimonial, como presume el decreto de privatización, sino más bien lo contrario. Para probarlo, y sin ir más lejos, está el rescate millonario a Vicentín, que le ocasionó al Nación fuertes quebrantos. Para esa circunstancia, la conversión a S.A. permite también la liquidación del banco. 
 Milei y Caputo llegarán a Estados Unidos con este negociado en la valija. Es un motivo poderoso para que la administración yanqui ponga en el freezer a la causa $Libra y sus repercusiones. Como expertos en estafas piramidales, los liberticidas han resuelto un despojo con otro mayor. 

 Marcelo Ramal 
 20/02/2025

No hay comentarios:

Publicar un comentario