“Quedó en claro, a través de declaraciones del subcontratista, que SanCor lo obligó a desprenderse de todas aquellas personas que pertenecían a la Agrupación 7 de Febrero y que el resto de las personas, las que responden a la conducción nacional de ATILRA de Héctor Ponce, fueron reubicadas”, afirmó Jorge Elizondo, representante legal de los trabajadores en conflicto de SanCor, tras la audiencia realizada hoy en el Ministerio de Trabajo Provincial. Los obreros del Centro de Distribución de SanCor Rosario llevan 39 días de paro y acampe frente a la sucursal local por once despidos por persecución gremial y cuatro días de piquete en Avenida de Circunvalación y el acceso al Puente Rosario - Victoria, medidas que hace instantes definieron continuar. Por Indymedia Rosario.
Por ANRed - L (redaccion@anred.org)
En el encuentro realizado hoy al mediodía en la sede de la cartera provincial, participaron, por parte de SanCor, Mario Jorge Dominino, Gerente de Comercialización de la láctea, patrocinado por el Dr. Luis Carello, los delegados de los obreros de SanCor y su representante legal, además de autoridades de la Central de Trabajadores de la Argentina y del Ministerio de Trabajo de Santa Fe. No obstante, la presencia que marcó la reunión fue la del dueño de la contratista Marchisio, a la que pertenecían los 6 despedidos a inicios de septiembre.
“Las partes ha trasparentado su posición. No solo han ratificado lo que han dicho antes sino que se han agregado elementos de juicio que tendrá que ver el organismo de aplicación si es que realmente quiere resolver”, afirmó Elizondo. Sucede que uno de los argumentos esgrimidos por SanCor en torno a la desvinculación de 6 empleados de Marchisio, fue que la distribuidora “decidió cerrar sus puertas”.
Pero en la audiencia de hoy, el dueño de la distribuidora afirmó que “este conflicto es debido a la política adoptada por la Cooperativa Sancor Cul de donde se advierte una notoria discriminación entre los trabajadores que fueron absorbidos y los que fueron despedidos, obedeciendo todo esto a una cuestión puramente sindical totalmente ajena a Marchisio”.
Las palabras del subcontratista se condice con la persecución gremial que denuncian los trabajadores en conflicto. “Los primeros 5 despidos del 17 de mayo fueron claramente direccionados a activistas y referentes gremiales. Luego, a inicios de septiembre, prescinden del contrato con Marchisio, garantizando las fuentes de trabajo de aquellos obreros que responden al Concejo Directivo Nacional de ATILRA y dejando en la calle a los otros 6”, que pertenecen a la Agrupación de Trabajadores Lácteos 7 de Febrero, cercana a la intervenida y disuelta Seccional Rosario de ATILRA, detallaron los obreros.
“Quedó en claro, a través de declaraciones del subcontratista, que SanCor lo obligó a desprenderse de todas aquellas personas que pertenecían a la Agrupación 7 de Febrero y que el resto de las personas, las que responden a la conducción nacional de ATILRA de Héctor Ponce fueron reubicadas, se les garantizó el puesto de trabajo”, analizó por su parte el representante legal de los trabajadores de SanCor. “Creo que justifica la posición de los compañeros en la demanda judicial y es un aporte importante”, evaluó el abogado.
“Fue una demostración que parte de SanCor no encuentra justificativo del despido, de por qué dejó en la calle a un grupo de trabajadores que siempre cumplió con el trabajo, que tienen cargas de familia y sí reubicó a trabajadores solteros, sin cargas familiares. Cada reunión que pasa tienen menos salidas, se les agota el discurso. Están acorralados con la discriminación y la persecución que sufrimos por parte del gremio”, consideró por su parte Héctor Romero, delegado de los lecheros.
La semana próxima, el Ministerio de Trabajo Provincial debería expedirse en torno a este conflicto. “Hemos pedido que ponga fin a esta situación utilizando los medios legales a su alcance. Entendemos que hay un lock out patronal, ofensivo, que no se justifica desde ningún tipo de vista, al margen que el lock out no goza de ninguna protección constitucional como si goza el derecho a huelga. La realización de un lock out bajo pretexto que hay una huelga que no permite trabajar, cosa que no es cierta, se produce para consolidar la idea de SanCor de cerrar la sucursal local y llevar el trabajo a la ciudad de Gálvez”, manifestó Elizondo en torno al cierre de la Sucursal por parte de SanCor tras la resolución del paro.
En el expediente firmado en la cartera provincial, se asienta además que “contrariamente a lo expresado por la representación de Sancor Cul, la totalidad de dichos trabajadores incluyendo los dependientes de la sub-contarista Marchisio expresa que el despido de los seis trabajadores que dependen del mismo, obedece a una política discriminatoria de la empresa dominante, ya que el resto de los trabajadores fueron absorbidos por otra sub-contratista de Sancor Cul (...) En síntesis se trata de una política de persecución gremial, tendiente a impedir cualquier tipo de Organización de los trabajadores dentro de la Empresa”. Además se denuncia que los obreros “no han decepcionado los recibos de las remuneraciones del mes de Septiembre de 2010”.
Por su parte, tras 39 días de paro y acampe frente a la Sucursal local y 4 días de piquete en Avenida de Circunvalación, los obreros definieron en asamblea seguir el fin de semana con la medida, manteniendo la modalidad de liberar por el lapso de una hora cada dos de corte y levantando el corte de 01hs a 07hs “por el tema de la seguridad”, aclararon los lecheros. El lunes próximo a las 11hs se desarrollará una Jornada de Debate por la Libertad Sindical en el Concejo Municipal, organizada por los ediles tras el encuentro con los delegados obreros de SanCor.
“No son afiliados”
Tras meses de silencio en torno al conflicto en el sector lácteo, el Secretario General de ATILRA Nacional, Héctor Ponce declaró a Diario La Nación que "no son trabajadores afiliados a la organización". Esto sorprendió a los trabajadores de SanCor dado que “los 11 despedidos pertenecen a ATILRA, excepto el ex Secretario Adjunto de la ex Seccional Rosario que fue expulsado del gremio en diciembre de 2008 tras el intento de copamiento del sindicato rosarino por parte de los directivos nacionales de ATILRA. De todos modos, incluso el expulsado, es un trabajador y el gremio debería defenderlo como tal”, sostuvieron los obreros de SanCor.
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