El tarifazo en el transporte

La publicación en el Boletín Oficial de la suba del boleto en un 40% a partir de agosto, no hizo retroceder a las cámaras patronales que habían declarado un lock out y reducido el servicio en un 50%. Ahora plantean que algunas líneas se van a normalizar, otras seguirán afectadas en un 20-30% el servicio y otras cerrarán. Esto no significa la eliminación de los subsidios: la tarifa técnica pasará a ser de 150 pesos en el AMBA, mientras que el boleto mínimo de colectivo costará $ 25,25. Los beneficiarios de planes sociales tendrán un descuento del 55%. Un tarifazo similar se aplicará en el transporte ferroviario. En el interior del país, los gobernadores ya han subido o tiene planificado subas de tarifas que llegan al 80%.

 Las patronales utilizan a trabajadores usuarios y choferes como rehenes. En las empresas, el retraso en el pago de salarios y aguinaldos a los trabajadores, por la demora o la insuficiencia de los desembolsos de subsidios, es sistemático. Esto ha desatado numerosas huelgas, paros parciales y autoconvocatorias en todo el país. La complicidad de la burocracia de Fernández es completa, mientras que los y los cacareos de la fracción Bustinduy son sólo eso. La burocracia ha convertido las paritarias en un ariete de las patronales para obtener más fondos públicos. En el transporte automotor, se desarrolla un proceso de concentración, precedido por el cierre de ramales o reducción de frecuencia servicios en todas las líneas. Asimismo, los despidos y suspensiones para quebrar el convenio colectivo y el pago en negro de vueltas extra se han convertido en moneda corriente. Las empresas que cierren serán absorbidas por holdings como Metropol y Dota. 

 El tarifazo expresa la quiebra del sistema de subsidios que ha regido durante los últimos 20 años. Es la antesala del "tarifazo segmentado" en luz, gas y agua. 

 Matías Cisneros 

 21/07/2022