viernes, 3 de septiembre de 2010

Facultad tomada por los estudiantes


Luego de una masiva asamblea, estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de Universidad Nacional de Buenos Aires decidieron tomar las tres sedes de la facultad en reclamo de mejoras edilicias y en solidaridad con la toma de colegios de estudiantes secundarios en toda la ciudad.

Por ANRED - C (redaccion@anred.org)

Ayer, los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA decidieron continuar con la toma de las tres sedes, en reclamo de la reparación inmediata de los tres edificios y el adelantamiento de los pliegos para el futuro edificio único bajo control de estudiantes, docentes y no docentes. La medida se reafirmó en una asamblea conjunta que se realizó en la sede Ramos Mejía, con la participación de más de mil estudiantes de las cinco carreras de la Facultad.
El conflicto por el edificio de Ciencias Sociales tiene más de una década de historia, pero volvió a tomar impulso el martes, cuando una placa de cristal de más de cinco metros se cayó en el hall de la sede de Marcelo T. de Alvear 2230. El incidente se produjo en una franja horaria en la que, afortunadamente, no transitan muchos estudiantes.
El mismo día, a la noche, se hizo una asamblea con cientos de estudiantes, en la que se decidió tomar el edificio y, al día siguiente, realizar clases públicas y difundir la problemática en Parque Centenario y Constitución. El miércoles a la noche, la medida se prolongó también a las sedes donde se cursa Ciencias de la Comunicación, Ciencias Políticas y Trabajo Social. “En comparación con la toma de 2008”, la última vez que se ocuparon las tres sedes, también por las condiciones edilicias, “la de este año es mucho más ordenada. Hay una experiencia acumulada, un balance hecho respecto a la toma anterior y hay, también, una decisión de confluir con la lucha de los estudiantes de los colegios de la Ciudad de Buenos Aires, que sostienen un reclamo similar”, afirmó Diego, estudiante de Ciencias de la Comunicación e integrante de la comisión de prensa.
De la asamblea de ayer participó una delegación de estudiantes de los colegios porteños, que reafirmó la intención confluir este lunes, junto a docentes y no docentes, en una marcha del Palacio Pizzurno a la jefatura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, en reclamo del incremento del presupuesto para la educación. También se acercaron a la sede de Ramos Mejía estudiantes del IUNA -el instituto de artes-, que tomaron la sede de Yatay al 800 por mejoras edilicias, y trabajadores despedidos de la ex línea Roca de trenes, Kraft y Felfort.
“La toma no busca impedir la cursada. Creemos indispensable que haya clases públicas. Es decir, un consenso entre estudiantes y docentes para crear un espacio donde coincidan el contenido académico y la discusión sobre la situación actual de la facultad”, señalan los estudiantes en un comunicado.
“No somos ‘tomadores”, continúan. “No tomamos la facultad por deporte ni placer. Lo hacemos con la finalidad conseguir respuesta ante problemas concretos e innegables para cualquiera que transite más de dos minutos por la facultad. No somos ‘oportunistas’, sostenemos esta drástica medida en consonancia con las tomas de los secundarios no por una ‘fiebre’ o ‘moda’ de la toma, sino porque estamos inmersos, igual que ellos, en el marco de una crisis en la educación.”
El reclamo también incluye subsidios para becas de apuntes y comedor, un comedor estudiantil para la sede de Constitución, el cierre de todas las causas abiertas a los estudiantes por luchar y la desacreditación de los posgrados de la Facultad ante la Coneau, organismo creado por la Ley menemista de Educación Superior. La asamblea de estudiantes de Ciencias Sociales señaló como responsables del ahogo presupuestario a Kirchner y a Macri, que “desfinancian la educación”, al rector de la UBA -Rubén Hallu- y al decano de la Facultad -Sergio Caletti-, quienes “no sólo son cómplices de la crisis” sino que le abren causas y tratan de deslegitimar el reclamo de los estudiantes que pelean por sus derechos. “Los responsables están claros, y los perjudicados somos todos y todas: estudiantes, docentes y no docentes de la facultad”, afirmaron en un comunicado.
Hoy, se van a hacer clases públicas en las tres sedes de la facultad y, por la tarde, asambleas para definir el curso a seguir.

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