Ha estallado un importante conflicto en Tierra del Fuego desde el 14 de mayo, cuando la UOM de esa provincia lanzó un paro por tiempo indeterminado en las fábricas de Río Grande. La raíz del conflicto es la puesta en marcha del DNU 70/223, que derogo la llamada ley de “promoción industrial”, que daba importantísimas exenciones de impuestos a las empresas.
Esta semana, el gobierno anunció una rebaja de aranceles a la importación de celulares y una baja de impuestos internos a una serie de electrodomésticos. La baja de los aranceles a los celulares se reduciría a cero a partir del 15 de enero de 2026. Por lo pronto, la rebaja del 16 al 8 % que rige actualmente ya afectará seriamente la producción y se descuenta que las patronales la aprovecharán para producir despidos masivos.
Desde hace muchos años, Tierra del Fuego opera con un régimen de promoción industrial que significa el 78 % de su economía. Ese régimen, de todos modos, ha tenido importantes sacudones desde su creación en 1988. Bajo el gobierno de Macri, se sacaron los aranceles a la producción de notebooks y no se fabricaron más en la isla. Hoy esos dispositivos tienen precios enormes.
El gobierno de Milei, en nombre del “curro” de las empresas que se acogen a la “promoción”, toma una decisión donde el pato de la boda lo asumen los trabajadores.
El paro por tiempo indeterminado de la UOM, al que se sumará un paro de toda la provincia para el 21 de mayo, constituye el paro más consensuado de la historia de la Argentina porque lo apoyan las direcciones sindicales, la totalidad de las empresas, el gobernador de la provincia -un hombre de filiación radical que ha armado su propio partido local- y hasta su oposición.
La situación ameritaría un paro general del conjunto de la UOM, acompañado de un plan industrial y un régimen laboral de la clase obrera. Furlán, el secretario general de la UOM, concurrirá al acto del 21 en el marco del paro se que se producirá en la provincia en “defensa de la industria nacional”, pero sigue arrastrando los pies frente al parate de un año y medio de la paritaria siderúrgica. Tampoco se ha dicho nada sobre el pago de los salarios caídos por la huelga.
Exijamos que las empresas y la gobernación garanticen los salarios de los trabajadores.
Juan Ferro
16/05/2025
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