Scioli, Massa, Stolbizer, Rodríguez Saá y todos los gobernadores se sentaron con Macri respondiendo al llamado a la “unidad”. Del Caño el único que marcó la diferencia. Un Congreso sin sesiones extraordinarias y un gobierno a puro decreto.
Una semana de “diálogos” y encuentros deja un balance para Clarín: “Mauricio va a tratar de conquistar a los gobernadores uno por uno”, explica un funcionario con alto cargo en el equipo de Macri”....he aquí la estrategia. “Ayer, Macri logró asistencia perfecta en Olivos.” (...)Sin contar al más notorio de todos los asistentes (en la asamblea legislativa): Daniel Scioli, a quien el nuevo presidente y reciente rival no dejó de privilegiar en estos días de la transición.”
Dice Eduardo Van der Koy “Difícilmente pueden haber arrojado algún resultado concreto las cumbres de Mauricio Macri con Daniel Scioli, Sergio Massa, Adolfo Rodríguez Saá y Margarita Stolbizer”. Y no Nicolás del Caño, agregaríamos, que fue el único que no se reunió. “Tampoco debió pretenderse demasiado del encuentro con los gobernadores. Son muchos los desaguisados provinciales que quedaron como herencia de la década.” El espíritu zen no necesariamente alcanza para el “acuerdo nacional” que pretenden.
Hay preocupación en los editoriales de globos amarillos. Es que no todo es un campo de orégano. Para Blanck desde un sector del peronismo se dice “Nos vamos a atrincherar acá, La Matanza es una provincia”, y agrega que se definen como “un peronismo kirchnerista, poco cristinista y nada camporista. De esas ensaladas estará repleto el menú del peronismo que viene...”. Y para muchos, de los acuerdos depende la llamada gobernabilidad.
Distintiva fue la posición de Del Caño y el Frente de Izquierda ante lo que definió como la “farsa de diálogo”. Borrado sin embargo de todas las editoriales de domingo, excepto de la de Wainfeld que en Página/12 destaca: “También es correcta y hasta valiosa la conducta opositora del diputado Nicolás del Caño: sería hipócrita fingir una charla con quien está en “las antípodas” de su ideología”.
Nicolás del Caño mantuvo la postura de independencia política del Frente de Izquierda, lo cual fue reflejado en diarios de todo el país.
Blanck y Solá: editorialistas al diván.
Editorialistas de los medios amarillos, luego de años de pelea por “otro país posible”, empiezan a señalar sus miedos para que nadie les arrebate a su paraíso (al fin) conquistado.
Ni la patria, ni el pueblo, ni la Nación....para el Diario de Mitre el tema es la preocupación por una hipotética vuelta del populismo. En su editorial de domingos de terror a la que viene acostumbrándonos, Joaquín Morales Solá arranca: Macri “lidera una administración que no tiene derecho al error, como etapa histórica. Un eventual fracaso significaría el regreso del populismo por un tiempo previsiblemente largo”....
Y agregando mística a un gobierno que está en veremos, dice que hay un “"País sereno", para agregar “Es raro que el partido político más moderno de la Argentina le haya devuelto a la política su mejor y más vieja costumbre, que es la de conversar con el otro, con el que se disiente”. Y se despacha con una reivindicación del menemismo “Hacía demasiado tiempo (20 años, por lo menos) que la política nacional se había encapsulado dentro de pobres fragmentos.” Hacía demasiado tiempo que no se reivindicaba tan abiertamente al menemismo, y menos en este sentido.
En esa sintonía Julio Blanck sintetiza su editorial: “El margen de error del nuevo presidente es extremadamente angosto. Solamente sus aciertos, sobre todo en materia económica, podrán hacerle más ancho el desfiladero por el que camina”. Y para complementarlos Eduardo Van der Koy escribe: “La sociedad percibe dificultades económicas. Pero no existe conciencia cabal sobre una situación de crisis. Esa idea suele estar asociada aquí sólo a cataclismos, como la hiperinflación alfonsinista o el derrumbe del 2001. No es lo que sucede en países con otro sentido de la normalidad. De allí que la cirugía debería realizarse sin errores”.
Concejo monárquico de por medio: "Haz en los primeros tiempos lo que tienes que hacer o no lo harás nunca", le dijo Juan Carlos a Macri. Hay develar el misterio del “déficit, los pobres y el saqueo” del kirchnerismo. Clarín agrega a la receta: echar la culpa siempre a los demás, y evitar el helicóptero. Todo un reconocimiento a un estado de cosas en donde no hay consenso para el ajuste.
Poniendo presión. Marcando los límites
No nos equivoquemos por un lado. No te equivoqués por el otro. Continuando la campaña "Buuh" el "Hay que pasar el verano", de Wainfeld, no es para nada inocente. El título trae a la memoria la célebre frase "hay que pasar el invierno”, del salvaje Alsogaray cuando, a fines de junio de 1959, el gobierno de Frondizi anunciaba así un nuevo paso en su política antiobrera y proyanqui.
En la nota advierte, y a la vez desafía al macrismo a poder jugar el rol que tuvo el gobierno K a la hora de contener la protesta social “La inherente conflictividad del mundo real es sub valuada....” (en el discurso macrista). “No así en la agenda de sus funcionarios. El pago de los medio aguinaldos en provincias, las paritarias docentes locales y nacionales cobran centralidad porque se vienen encima”. La ya en marcha paritaria docente será una parada fuerte para el gobierno. Su estrategia de pacto social puede verse cuestionada por el derrotero de la negociación con los gremios que agrupan a los trabajadores de la educación.
En la misma edición, el analista Alfredo Zaiaten P12 , nos regala una glosa de la “Tormenta perfecta” que resulta de la actual situación internacional y pone en entredicho el éxito de las medidas ortodoxas anotadas en la hoja de ruta del nuevo gobierno en materia económica para terminar advirtiendo “Si Macri no sabe discriminar entre discurso opositor y gestión de gobierno deberá asumir la responsabilidad política de sumergir a la economía argentina en una crisis”.
Big Fish
Acertando en un elemento, y es que aún no se dijo nada, Verbitsky como en una película de Tim Burton es "Un hombre ve de forma diferente las cosas en distintos momentos de su vida". Se cuela esta ideología de El Gran Pez:"¿Alguna vez has escuchado un chiste tantas veces que has olvidado por qué es gracioso? Y luego lo escuchas nuevamente y de repente es nuevo. Y recuerdas por qué lo amabas al principio". Este mecanismo estaría operando en la cabeza de más de uno en estos tiempos.
Le dice el doctor a Will “....y esa es la verdadera historia de tu nacimiento. ¿No es muy emocionante verdad? y supongo que si tuviera que elegir entre la historia verdadera y una versión rebuscada sobre un pez y una alianza de boda, es posible que escogiera la versión fantástica.”
¿Se acordará Verbitsky o alguno de los negocios del kirchnerismo con empresarios como la familia Macri? ¿Se acordarán del cogobierno en la Ciudad de Buenos Aires, en donde votaron todas las leyes al “monstruo” Macri?. Desde ya que sí, pero de otra manera. Como diría Julio Blanck “La lógica lineal diría que Cristina es el mejor enemigo que podría construirse Macri, así como ella en su momento eligió al ahora Presidente como su contracara”.
Verbitsky denuncia al macrismo en “El arte del nomeacuerdo”, olvidando, ay!, que los negocios que hizo el macrismo con el Estado se desarrollaron todos bajos los ojos del kirchnerismo en el poder. No fue magia.
Y repasa la agenda planteada en el discurso de asunción “Macri planteó “tres ideas centrales: pobreza cero, derrotar el narcotráfico y unir a los argentinos”. Agregó luego una “intención básica: combatir la corrupción” y “otro pilar de su gobierno”: revolucionar la educación pública. Esa es la agenda que reitera sin pausa el Papa Bergoglio, con quien Macrì intenta mejorar la relación.” Otra vez como en el gran pez, los K tienen colgados los zapatos en la entrada de Roma, que puede ser la “Spectre”... de su enemigo.
Todos unidos triunfaremos
“El peronismo es una ancha avenida que nos contiene a todos” decía el General. Pero esta máxima no impidió que Alejandro Granados, el “duro” del modelo K afirmara desde el ejecutivo municipal que preside: "No tengo nada que ver con el Frente para la Victoria", y para complementar: "Soy del Partido Justicialista de Ezeiza y mis próceres fueron San Martín, Rosas, el teniente general Perón y la compañera Evita. Nunca se olviden de eso: Perón y Evita". Pero Granados mediante, peronistas se reivindican todos y la disputa es por quien conduce. Habrá que ver “si el que gana dirige y el que pierde acompaña”.
La semana destacó algunos “panqueques” y ProFriendly buscando puerta de salida y entrada: “El santafecino Miguel Lifschitz, socialista, recordó el método absurdo de provincias que debían disputar el dinero con la Nación en la Corte Suprema. "No había diálogo ni solución política", explicó. El salteño Juan Manuel Urtubey agregó que Macri necesita tiempo y que el problema con las provincias es de naturaleza federal, no de disputa por el poder (La Nación).
También están las variantes de reacomodamientos. Así arranca su editorial Julio Blanck en Clarín “Un senador peronista de primera línea decía en la tarde del viernes: “Estoy terminando mi primer día como opositor, es una sensación extraña, vamos a ver cuánto me dura”.
Dicen que no es lo que quieren, es lo que pueden
El lamento republicano “Al principio no tendrá más remedio que recurrir a los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) para gobernar. Se trataría de una excepción. Sobre todo para una administración que arribó prometiendo una normalización”, todo según Eduardo Van der Koy.
Pero para Joaquín Morales Solá hay explicación: “Cristina Kirchner no le dejó nada a Macri; sólo deudas, escasez y conflictos. El Presidente quería levantar el cepo al dólar el día después de su asunción. No pudo. Ese levantamiento no sólo era una promesa electoral; es también, y fundamentalmente, un requisito para que los productores rurales comiencen a liquidar los dólares de las cosechas que almacenan. Los productores no liquidarán nada hasta no saber cuánto costará el dólar”. Garantizar el negocio es el fin, para el que valen estos medios.
Se pregunta ¿Qué culpa tiene Macri? Y dice es cultural y depende del ritmo. No quiere subsidios al consumo “Esos subsidios espolean un consumo social irrestricto de energía que el país no tiene”...y sigue proponiendo liberalismo revolucionario “¿Por qué no dejar que los argentinos cobren por el valor de su trabajo y administren su economía sin intermediarios? Eso ya sería una revolución en serio”.
Luces (¿Macri?) y Sombras (¿la resistencia?)
En Clarín destacan: “Los jefes gremiales prometen un período razonable de convivencia pacífica. En el macrismo esperan al menos seis meses de paz social”. “No hay espíritu combativo”, aseguraría Stanley, casi como deseo. Pero hay una izquierda inmanejable, según Joaquín Morales Solá: “Hay organizaciones que se dicen sociales pero que son kirchneristas (Movimiento Evita, la agrupación de Luis D’Elía, el propio Quebracho, entre otras), que no están defendiendo necesidades sociales, sino un objetivo político. El objetivo que marcó Cristina antes de irse: "resistir" al gobierno de Macri, que no significa otra cosa que desestabilizarlo (...) Otra cosa son las comisiones internas de los sindicatos, muchas de ellas adscriptas a una izquierda inmanejable que, por lo general, no controlan aquellos dirigentes”.
Mientras tanto en la zona norte de Bs.As. la izquierda que están en las fábricas, escuelas, establecimientos, esa que “es inmanejable” para la dirigencia burocrática y la derecha preocupada, se organiza. Como dijo Nicolás del Caño ante los 800 asistentes al Encuentro Obrero en la zona norte del Gran Buenos Aires: “Para enfrentar el ajuste es fundamental mantener esta alianza, esta unidad, entre la izquierda clasista y socialista y el movimiento obrero combativo”. “Nuestro compromiso y nuestro diálogo siempre será en forma colectiva con los trabajadores para organizar la resistencia al ajuste, y transformar las luchas de resistencia en luchas ofensivas que nos permitan arrebatarle el poder a los capitalistas, a los banqueros y a los grandes terratenientes”.
Virginia Pescarmona y Paúl Lecea
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